Ángel Guerra Cabrera
La troglodita asonada parlamentaria que destituyó al presidente de Paraguay Fernando Lugo viene a poner de relieve dos cuestiones muy importantes. Una, Estados Unidos, cuya embajada en Asunción incubaba el derribo del mandatario desde 2009, ha sido el diseñador, fabricante, o cómplice, de todos los golpes de Estado contra los gobiernos democráticos latinoamericanos, aunque últimamente los disfrace con ropajes distintos a los tradicionales. Cataloga de amigos a los gobiernos salidos de las urnas sólo cuando se pliegan a sus dictados y no lleven a cabo reformas que afecten sus intereses. Así lo demuestran sólidas evidencias, cuya investigación debemos a una pléyade de eminentes historiadores insuficientemente conocidos, como el argentino Gregorio Selser.
Dos, esta tradicional conducta no ha sido modificada en lo esencial durante la administración de Barak Obama, que no sólo ha continuado, sino profundizado, la política de su antecesor respecto a nuestra región, persiguiendo los mismo objetivos aunque utilizando el llamado poder “inteligente”. Este conlleva, entre otros recursos, alianzas regionales de gobiernos derechistas, o efímeras y pragmáticas para ciertas coyunturas, cooptación de mandatarios que enarbolan posturas latinoamericanistas e intentos de dividir al bloque de gobiernos progresistas. Otro de sus componentes importantes es la infiltración de fuerzas populares a través de fundaciones y ONG yanquis y europeas o hasta la propia USAID, cuya expulsión de sus países recién acordaron los miembros de la Alba. De repente nos encontramos luchas sociales con demandas legítimas, usadas por la derecha con fines golpistas contra los mandatarios populares.
Con Bush o con Obama, presidentes que se oponen enérgicamente a las políticas neoliberales han debido enfrentar intentos de golpes de Estado, llamémosles de nueva generación, como en Venezuela –tres veces-, Bolivia –dos veces, el más reciente aparentemente desactivado hace unas horas- y Ecuador una. Contra los presidentes patriotas y latinoamericanistas de Honduras y Paraguay los golpes triunfaron dada la fortaleza política y militar de la derecha comparada con la debilidad de sus movimientos populares no suficientemente articulados, aunque existen diferencias entre ambas situaciones. Zelaya tenía un equipo de colaboradores cualitativamente superior al de Lugo y su combatividad, anterior y posterior al golpe, estimuló la forja de un ejemplar movimiento de resistencia. En cambio, Lugo optó por hacer concesiones a la jurásica derecha paraguaya pensando tal vez que así podría su derrocamiento. No obstante, el pueblo lo sigue llamando presidente y clama por verlo al frente de la resistencia.
Ahora bien, es conveniente recordar que Hugo Chávez, como Evo Morales, Rafael Correa y antes Salvador Allende, ya desde que eran candidatos tuvieron que vencer feroces campañas de calumnias y maquinaciones orquestadas por Estados Unidos y las oligarquías con la proverbial complicidad de los consorcios mediáticos. Evo pudo conquistar su primer mandato por la copiosa votación a su favor, pues hubo muchas evidencias de fraude electoral. La misma receta se aplica y aplicará en nuestra región contra cualquier candidato que se proponga cambiar, aunque sea moderadamente, el modelo neoliberal. Y si no es posible frenar su ascenso a la presidencia, Washington y la oligarquía no le darán un minuto de tregua a partir del momento en que se anuncie su victoria, como viene haciendo con los líderes mencionados. Es también el caso de Cristina Fernández de Kirchner, sometida a una intensa guerra sucia, antes y después de su primera elección, por los consorcios Clarín, La Nación y sus socios continentales, y a los intentos de golpe rural primero, y ahora camionero, lanzados por extrañas alianzas que unen a latifundistas, exportadores, sectores medios culturalmente colonizados, la liliputiense izquierda gorila y los resentidos de turno.
Conviene profundizar en lo que une estos hechos entre sí y a su vez con otros como el ataque a Ecuador de 2008, la restauración de la IV Flota y la red de dispositivos militares y acuerdos de seguridad tipo Plan Colombia sembrados por Washington desde el mismo sur del río Bravo a lo largo de América Latina y el Caribe(http://alainet.org/active/45135). Se trata de una ofensiva para acabar con los gobiernos que se oponen a las políticas neoliberales y al saqueo de sus recursos cuando el hundimiento económico del imperio lo empuja a conquistarlos como sea.
Verdad
Que la ofensiva es grande ,se imagina usted que consiguieron casi todos losvotos del Senado ? Aun los de su propio partido deben de haber votado por la destitución La votación fue casi unánime .habrán modificado la constitución?
Eso pasa cdo las elecciones están mediadas por el dinero y las mafias
Por supuesto, Ercumbaldo, votaron los antiguos stroessnistas, los que están complotados con el juez que dio orden para desalojar a los campesinos que a su vez están complotados con los agroproductores que tienen un negocio millonario con monsanto para importar semillas transgénicas contra la ecología y la voluntad de los campesinos. Tú sabes bien que todos ellos aspiran a un cambio en las políticas sociales porque lo que les interesa es defender sus privilegios, no les importa quien caiga. Tienen miedo a reformas agrarias, a planes para beneficio de los campesinos y los pobres. Sí quieren neoliberalismo egoísta, ambicioso, continuar explotando sin frenos. para eso tienen que besarle la mano peluda al gobierno del norte. Su patrocinador. Esa no es la voluntad de las matorías que tendrán que esperar más tiempo por verdaderas reformas sociales…
Saludos compañeros y camaradas: Con el golpe de Estado contra el pueblo de Paraguay, ¿aún creen que todo está saludable? ¿Acaso se han olvidado de Honduras? Continuarán con el próximo país de nuestro Continente Americano, seguiremos argumentando, seguiremos con los comentarios? NOOOOOOOOOOOOOO es hora YA de tomar una ofnsiva contra los países imperiales, ojo a los yanquis y su lobby de sionistas, es lo mismo, es el mismo guión del Medio Oriente, simultáneamente, Síiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiii, es hora de actuar en el paranoma sniestro que está achicando nuestro círculo.
Sigan con lo mismo, cuando se vayan a dar cuenta, como dicen los yanquis: ” IT IS VERY LATE BABY”
Saludos,
Joaquín el VASCO!!!!!!!!!!!!!!!!
Mas allá de un Presidente Paraguayo defenestrado, Fernando Lugo es en realidad un demócrata, un hombre que ama la paz, por su proceso de vida, después de haber resistido 24 intentos de juicio político (léase golpes de estado ) encontramos a un Presidente agobiado representante de una democracia sitiada, a la que le impusieron un cerco que terminó con el pasaje vergonzoso que todos conocemos. Muy difícil se le hizo gobernar Paraguay con la tradición se podría decir de gobiernos de facto, un estado con una institucionalización frágil lo acabamos de ver , presa de la injerencia corporativa y del Depto, de Estado Norteamericano estadounidense , una tarea cuesta arriba sin parciales en el parlamento, sin un Partido que construya soberanía popular, elemento que debe ir creciendo al unísono con la gestión del Presidente que quería rupturar lo viejo, para ir creando una legitimidad desde sus bases con participación del Pueblo. Porque el Parlamento actual debió haber sido barrido con una Constituyente, para que se dé paso a referentes del Pueblo mas sintonizados con sus esperanzas.
Pero el imperio acecha y no desestima ninguna forma , táctica por mas heterodoxa que ésta sea y que confluya con sus estrategias de dominación para caerle encima a su presa. Y el talón de Aquiles de Fernando fué su parlamento, cuya composición brillaba por su rusticidad no solo académica si no de comportamiento , de conducta democrática, de patriotismo.
El imperialismo está preocupado con los procesos democráticos en América Latina, que se han resistido a su égida, que han remontado con creatividad e inteligencia el dogal de la deuda externa ..y en Paz!! sin tener un cohetecito, saliéndoles al frente con democracia, institucionalidad y participación ciudadana; con las mismas reglas del sistema burgués. Pero he aquí la rocambolesca conducta del imperio, ahora la institucionalidad demócrata burguesa revolucionaria y correctamente aplicada , les molesta..y pues la tiran abajo como parte de un plan de intervención, en el que buscaron escindir la unidad de la integración latinoamericana.
El tema reclama reflexión porque estamos ante un enemigo que no se detiene ante nada, y que no le importa la percepción que dan ante el mundo, ni el parecer de la comunidad de naciones, ante ésta sorda declaración de guerra a los gobiernos de democracia participativa, lo mas aterrizado es empezar a librarnos de lastre que no necesitamos en nuestras naciones, como lo son cualquier tipo de fachada de la CIA, como la USAID y las ONG’s que le sirven como tentáculos al pulpo, e ir determinando una estrategia militar multinacional que persuada al pervertido Tio Sam que no le vamos a permitir que pisoteen nuestras flores. Patria o Muerte!!
Pero además, tanto se vocifera sobre “la formalidad del acto realizado”, que no nos informan si, TODO EL PROCEDIMIENTO que se supone indica la disposición por la ley invocada, FUE REALMENTE CUMPLIDA.
Por lo hasta ahora sindicado, no se le permitió a Lugo presentarse con su abogado.
Por tanto, el usar una ley a medias, aún con su supuesta formalidad formal, es una felonía.
La formalidad de una ley, no exime ni puede justificar la felonía e infamia del acto llevado a cabo en su supuesto nombre.
La “formalidad”, debe ser completa.
Mona vestida de seda, mona queda….