Néstor García Iturbe
Tal y como se había anunciado, el día 2 de noviembre fue un verdadero día de actividad política en la ciudad de Oakland, California. Para ese día se había anunciado una huelga o al menos que la mayoría de las personas que pudieran se unieran a la demostración.
Gracias a la información que nos remite directamente la compañera Karen Lee Wald, que se encuentra en Oakland, podemos trasladarles a ustedes algunos detalles de lo sucedido en dicha ciudad en el día de hoy.
La manifestación tuvo un apreciable respaldo por parte de la población. Miles de personas marcharon por las calles de la ciudad cantando consignas, con carteles donde se reflejaban protestas contra Wall Street y los métodos establecidos para enriquecer a unos pocos mientras que la casi total mayoría continúa sufriendo y siendo explotada.
La manifestación de Oakland tuvo la característica de que no solamente acamparon en la recientemente nominada por el pueblo Plaza Oscar Grant, en memoria a un joven negro que murió asesinado por la policía, sino que también se dirigieron al puerto, lugar donde la fuerza de las masas allí reunidas prácticamente paralizó las actividades del mismo e impidió que el turno que debía entrar a trabajar a las 7.00 p.m. lo hiciera.
Es importante que algunos sindicatos apoyaran la marcha, e inclusive los propios camioneros del puerto manifestaron sus simpatías por los que estaban en la protesta. Algunas acciones se realizaron directamente contra los edificios de los bancos, pero estas fueron principalmente pintar letreros en sus paredes y alguno que otro cristal roto, en ningún caso se puso de manifiesto violencia contra las personas.
Las cifras de los manifestantes fueron estimadas de distintas formas, se plantea que en el puerto estuvieron cerca de 5,000 personas mientras que otras 5,000 continuaban en la Plaza Oscar Grant. Distintos grupos se vieron manifestando por la ciudad, de ahí que la miembro del Consejo de la ciudad, Desley Brooks dijo que consideraba durante todo el día estuvieron involucrados en la actividad política cerca de 20,000 personas.
Al caer la noche, aún continuaban pequeños grupos manifestando por distintos lugares de la ciudad, aunque se generalizó el temor de que la policía incrementara la represión en horas de la noche, como han hecho en otras oportunidades.
Scott Olsen, el veterano de las guerras de Iraq y Afganistán que resultó herido en la cabeza el primer día de manifestación, se plantea que tiene fractura del cráneo y por el momento se encuentra estable. Los médicos consideran que mejorará. Este incidente trajo como consecuencia que la policía disminuyera el nivel de represión, para evitar que algo como esto se repita.
Otro resultado importante ha sido el anuncio de algunos bancos de modificar los contratos de las deudas de los estudiantes, disminuyendo el interés que cobran y en algunos casos eliminándolo, pero en cuanto al problema financiero, todavía hay mucho que modificar.
Los indignados se mantienen en Oakland, al igual que en Wall Street y en otros lugares de Estados Unidos. Este movimiento crece diariamente, mientras que su principal demanda no se satisface, tener un empleo decente que les permita vivir y satisfacer sus necesidades personales y familiares.