Intervención de Miguel Mario Díaz-Canel Bermúdez, Primer Secretario del Comité Central del Partido Comunista de Cuba y Presidente de la República, en la reunión con los primeros secretarios provinciales del Partido y otros dirigentes invitados, en el Palacio de la Revolución, el 22 de mayo de 2021, “Año 63 de la Revolución”.
(Versiones Taquigráficas – Presidencia de la República)
Estamos planteando el inicio de un proceso para implementar las directrices, las ideas, los conceptos y los acuerdos derivados del Octavo Congreso del Partido, pero que ya se ha iniciado y se inició inmediatamente después del Congreso, porque con mucha responsabilidad, como han expresado aquí un grupo de organismos y de organizaciones de masas, y tal como se ha comprobado también en recorridos que han hecho el compañero Morales y el compañero Machado por las provincias, las estructuras del Partido, del gobierno y las organizaciones de masas de inmediato empezaron a interpretar lo abordado en el Congreso y empezaron a tener una traducción, una implementación, una concepción, unos en programas, otros en planes de trabajo, en planes de acciones para lograr este objetivo.
Era importante este encuentro, porque aquí podemos uniformar y compartir directamente la manera en que queremos hacerlo y, sobre todo, a qué aspiramos con este proceso.
El Octavo Congreso del Partido es un Congreso histórico y ha sido definido, con toda razón, como el Congreso de la Unidad y la Continuidad.
A lo que tenemos que aspirar y a lo que tenemos que llegar es que a partir de todo el análisis que se haga de los documentos fundamentales del Congreso y de lo que emana del Congreso, con objetividad, en cada organización de base del Partido, en cada una de las estructuras de gobierno, en todos los ámbitos de trabajo, en todas las organizaciones de masas y en todos los lugares logremos que se concrete realmente cómo damos respuesta y qué rol le corresponde a cada militante, a cada revolucionario, a cada estructura, a cada colectivo para aportar en la implementación a ese Congreso; o sea que nosotros no podemos quedar satisfechos solo porque se discuta y se conozca.
La concreción la tenemos que lograr con la objetividad con que para cada uno de los temas se diga en cada lugar: nosotros vamos a hacer esto, y nosotros esto lo vamos a respaldar con tales acciones, con tales resultados, con tales propósitos, buscando tales metas, trabajando de esta manera.
Hemos ido a un proceso que tiene como entrada los acuerdos, las resoluciones del Octavo Congreso del Partido, sus directrices, sus ideas y sus conceptos; y que desarrolla varios momentos de ese proceso: uno es la edición y distribución de los documentos con diferentes formatos, las orientaciones del proceso de continuidad del Octavo Congreso del Partido, su discusión e implementación, la evaluación y control de los resultados de esa implementación y el perfeccionamiento. Todo eso lo tenemos que gestionar con un ciclo de mejora continua en cada ámbito.
¿Qué nos tiene que dar como salida? Que se implementen esos acuerdos y que se manifiesten en resultados; en resultados en correspondencia con la Estrategia Económico-Social, con el Plan Nacional de Desarrollo Económico y Social, con los elementos que hemos planteado de enfrentamiento a la subversión político-ideológica, con los principales postulados que hay en la batalla ideológica y en la batalla económica.
Ese primer componente de este proceso ya lo hemos cumplido, o sea, se editaron los documentos aprobados por el Congreso del Partido, aquí se ha presentado el documento que tiene las directrices, ideas y conceptos que próximamente llegará hasta nivel de organizaciones de base. Hay copias digitales de todos los documentos para llegar a todas las organizaciones de base; van a estar presentes en el sitio web del Comité Central del Partido, pero también van a tener enlace en otros sitios web y en las plataformas digitales de diferentes organismos e instituciones. Se está elaborando un material audiovisual de apoyo. Ya hay una primera versión de una apk, yo la bajé el otro día, faltaban por complementar algunas cosas, pero ya hay una apk donde la gente puede tener como guía todos los elementos estos para trabajar en la implementación del Congreso, y hay una distribución de todas estas ediciones, según las pautas que se han planteado.
Ahora estamos en este segundo momento, que es cómo orientamos el proceso, de hecho esta es una reunión en la que se está orientando el proceso, en una dimensión bastante amplia por la composición que aquí explicó el propio Morales, de a cuánta gente le estamos llegando hoy con esta videoconferencia. Aquí están las estructuras de Partido, de Estado, de Gobierno, de las organizaciones de masas y el sistema empresarial.
Después, por supuesto, cada provincia y cada municipio extenderá y ampliará, pero ya con las orientaciones que se están dando hoy aquí todo el sistema político, todo el sistema económico, todo el sistema social del país y la sociedad civil están en condiciones de abordar con integralidad este proceso e inmediatamente estas orientaciones se van a discutir y se van a implementar.
Hay varios momentos que hemos encontrado para orientar y para complementar esa implantación.
Ya hubo una Mesa Redonda de tres miembros del nuevo Secretariado que tuvo un impacto importante en la población. Ahora irían la próxima semana los tres miembros del Secretariado que no estuvieron en la primera Mesa Redonda y abordarán estos temas. Y cuando entremos en el recorrido por provincias habrá una Mesa Redonda en composición completa del Secretariado ya hablando, más que de orientaciones, de elementos de implantación que estaremos apreciando y esto sirve para extender este proceso a toda la población cubana.
Estos son temas que se van a seguir tratando en las reuniones con secretarios de organizaciones de base a nivel de cada uno de los territorios, y se van a seguir desde el Secretariado con reuniones de cuadros de la Unión de Jóvenes Comunistas y las organizaciones de masas. La semana que viene pretendemos realizar el despacho con cada una de las organizaciones de masas y la Unión de Jóvenes Comunistas y ver la perspectiva que ellos tienen sobre esta implementación.
El Comité Ejecutivo del Consejo de Ministros y el Consejo de Ministros también están incorporando todos los elementos del Congreso en la planeación estratégica que tenemos en el trabajo de Gobierno, que identifica en seis macroprogramas los Ejes Estratégicos del Plan Nacional de Desarrollo Económico y Social y a través de un grupo de programas y proyectos se siguen todos los Lineamientos, las metas del Plan Nacional de Desarrollo Económico y Social, y cada uno de los Organismos de la Administración Central del Estado también preparará sus propuestas de implementación, así como los gobiernos a nivel territorial.
Serán contenido también de las comisiones permanentes de la Asamblea Nacional del Poder Popular, por lo tanto, los temas que se aborden en las sesiones de la Asamblea Nacional del Poder Popular y en todo el sistema del Gobierno darán continuidad a la implementación y, de igual manera, todo el sistema empresarial, las OSDE y las empresas tienen que llevar a su ámbito, que es un ámbito importante, decisivo para la implementación, estos conceptos y estas ideas, y todo eso se apoyará con acciones de comunicación; o sea, lo que tenemos que lograr es que en los propios sistemas de trabajo en todos los ámbitos haya una correlación entre los temas, las acciones, los planes y los propósitos en función de que estén reflejados y estén implementados los acuerdos emanados del Octavo Congreso del Partido.
También, en un grupo de elementos que ya está incluido como sistema de trabajo se podrá evaluar y controlar los resultados que va dando esa implementación, que será el componente posterior de este proceso, cuando a partir de esta reunión se genere la implementación.
Habrá recorridos del Secretariado, del Buró Político; están los recorridos del Gobierno; de cada una de las estructuras; estará reflejado esto en los planes de temas que se llevan a los consejos de dirección, al Secretariado, Buró Político, la Asamblea Nacional y, por lo tanto, si lo hacemos coherentemente estarán evaluando resultados de esa planeación.
Estará el seguimiento que se le hace a la planeación estratégica del Gobierno todos los miércoles después del Comité Ejecutivo mediante los chequeos de macroprogramas, programas y proyectos. Estarán en el componente las visitas a las provincias, que se hacen desde diferentes instancias, en activos por sectores y temas que estaremos convocando, posteriormente, con la militancia del Partido. En el plan de temas y en las actividades propias de la Unión de Jóvenes Comunistas y las organizaciones de masas; en los temas que se aborden en los plenos de los comités municipales, comités provinciales y Comité Central del Partido. En el trabajo que estamos organizando de enfrentamiento a la subversión político-ideológica que se va a apoyar con un grupo de trabajo que se ha creado para la labor ideológica que asesora al Partido que tiene tres subgrupos: uno, que se va a dedicar a fomentar y a conceptualizar desde el marxismo todo el trabajo ideológico del Partido en los tiempos actuales.Imagen
Otro subgrupo va a hacer análisis sistemáticos de la situación del país y un tercer subgrupo que está trabajando, cotidianamente, en materia de comunicación social para ir apoyando los procesos que se van gestando.
De igual manera estará en la estrategia y en el trabajo con los cuadros. Recuerden que la Política de Cuadros y el trabajo con los cuadros fue uno de los temas fundamentales y una de las comisiones del Congreso. Hay una estrategia por terminar que dio sus bases en el Congreso, que lleva complejidades y que, además, la estamos calzando con un grupo de trabajo, en el que hay expertos y científicos para también abordar desde la perspectiva de la investigación científica el aporte de la ciencia y el conocimiento experto de la Política de Cuadros. Y están las comisiones de trabajo del Comité Central del Partido, que recientemente fueron presentadas y aprobadas en primera instancia en el Secretariado, que van esta semana al Buró Político para aprobarlas y desatar también el trabajo de estas comisiones permanentes de trabajo.
Por último, como parte de ese control, de esa valoración que vayamos haciendo, estaremos incorporando elementos de perfeccionamiento, ajustes y correcciones a todo el sistema.
ALGUNOS CONCEPTOS FUNDAMENTALES
Yo ahora quería, después de explicar la manera en que queremos trabajar, detenerme en algunos conceptos fundamentales, en los que se va a abordar, indudablemente, con más profundidad a partir de las orientaciones de este proceso, pero me parece que son cosas en las que tenemos que estar claros por qué las tenemos que evaluar, hasta qué nivel tenemos que tratar de concretar.
Congreso de la Unidad y la Continuidad. Nosotros necesitamos que en este proceso todo el mundo interprete qué es continuidad y qué es unidad; cómo se defiende la unidad y cómo se defiende la continuidad, porque si no, no entendemos el Congreso.
La unidad ha sido forjada, ha sido defendida, ha sido consolidada por la dirección histórica de la Revolución en todos estos años de Revolución. Pero ahora tiene una exigencia nueva, porque el propio proceso gradual mediante el cual la generación histórica ha entregado las principales responsabilidades del Partido, el Estado y el Gobierno a las nuevas generaciones requiere, para que se mantenga la unidad, que la autoridad moral del Partido único garantice esa unidad representando a la nación. Y aquí es muy importante para lograr esa unidad ese concepto del General de Ejército de que un partido único tiene que ser más democrático, tiene que dar más participación, tiene que consensuar más, tiene que trabajar más en colectivo, tiene que representar los intereses de toda la población, y esa unidad la tenemos que cuidar con celo, y no podemos aceptar la división entre revolucionarios.
Desde el Partido tenemos que promover la más amplia democracia y, como explicaba Gladys, una parte importante de la unidad para tener la autoridad moral del Partido descansa en que seamos ejemplares. Si en un momento hay que defender la ejemplaridad de la militancia para que esa ejemplaridad también sea un valor que comparta toda nuestra población y todos los revolucionarios es ahora.
Lo otro es que tenemos que defender esa unidad sin discriminar, por eso también en el Partido los temas que puedan dividir, los temas que puedan ser causas de discriminación, vestigios que quedan de discriminación racial, toda esta problemática que ahora vamos a abordar en el Código de las Familias, los temas de violencia contra la mujer, los temas medioambientales, que además son temas que unen a la izquierda en el mundo y que están en las agendas de los partidos de izquierda, nosotros no los podemos separar de la labor partidista, los tenemos que encabezar, los tenemos que defender con las potencialidades y con las estructuras que tenemos.
¿El tema de la mujer? Aquí tenemos una organización de mujeres cubanas que tiene una historia tremenda en la emancipación de la mujer en la Revolución, las que tienen que liderar ese tema son ellas.
¿Temas medioambientales? Nosotros tenemos estructuras, centros de investigación, gente joven que puede liderar cualquiera de esos temas en este país.
Tenemos un programa de Gobierno para el avance de la mujer, para la lucha contra la discriminación racial. En la Constitución nuestra está bien refrendado que no puede haber discriminación en Cuba en ninguna forma.
El Código de las Familias al que vamos a ir, va a ser un código moderno, totalmente emancipador y enaltecedor.
Eso tiene que estar también en el centro de la defensa de la unidad por parte del Partido.
La continuidad la tenemos que defender con una visión integral. Tenemos que consolidar ahora la autoridad ganada por los méritos de la generación histórica, que son méritos que, a mi modo de ver, ninguna otra generación en el país los va a tener.
Hay que preservar ese liderazgo y la autoridad moral de nuestra organización, eso es lo que va a dar continuidad. Y ahí entonces entra un concepto muy importante que está relacionado con la ejemplaridad: cómo de verdad somos vanguardia política; cómo de verdad con el trabajo del Partido reforzamos, alimentamos, sostenemos, apoyamos lo que dice el Artículo 5 de la Constitución. Y en ese elemento de continuidad, la continuidad generacional es parte fundamental de esa unidad, por eso hay que trabajar mucho desde el Partido con los jóvenes. Es un tema que tenemos que defender, creo que se están haciendo acciones sistemáticas de trabajo con los jóvenes en los momentos actuales, pero que las tenemos que integrar también.Imagen
Ahora, vamos al trabajo directo del Partido, a lo que le llamamos la vida interna de la organización. Están definidas en el Informe Central al Congreso por el General de Ejército, ratificadas, porque también se plantearon en el Congreso anterior: el desarrollo de la economía nacional, junto a la lucha por la paz y la firmeza ideológica, constituyen las principales misiones del Partido. Por lo tanto, eso nos está dando una guía. Aquí, cuando vayamos a hablar de prioridades, las prioridades son esas y lo que hay es que ubicar cada una de las cosas que nos proponemos: cuáles están en la prioridad de la batalla económica, cuáles están en la prioridad de la batalla ideológica y cuáles están en la defensa de la paz. Y desde el trabajo del Partido, cómo el Partido dirige esos procesos, cómo el Gobierno gobierna, cómo la Administración administra, y cómo un grupo de organizaciones en lo social ayuda a mover a toda la masa de ciudadanos revolucionarios que tenemos en el país para apoyar estas cosas.
Tenemos que ganar en el concepto y en la concreción de que el presente y el futuro del país, la defensa de la Revolución y nuestro avance descansan en lo que seamos capaces de hacer con nuestras propias fuerzas, que eso en ningún momento significa renunciar a la solidaridad, que siempre la vamos a dar y la vamos a acrecentar; ni renunciar a las relaciones con los países, con los partidos amigos y hermanos, pero la vida nos ha demostrado que nosotros no podemos depender de nadie.
En tiempos de COVID-19, ¿qué hemos tenido que hacer?, la respuesta la hemos tenido que dar por nosotros mismos. Aquí no ha llegado ninguna vacuna de nadie. Los problemas de producir alimentos los vamos a resolver nosotros. Tenemos que olvidarnos de que van a venir de otro lugar o que vamos a tener dinero para importar; no, no, tenemos que producir alimentos nosotros con nuestros propios esfuerzos, con nuestro talento. Ese es un concepto que hay que defender, que hay que potenciar, que hay que fortalecer, que hay que robustecer.
Una vez más vuelvo a la ejemplaridad. Ejemplaridad en el cumplimiento del deber y de los postulados constitucionales. Nosotros desde el Partido tenemos que hacer las cosas que no nieguen la Constitución, todo lo que hagamos tiene que responder a los preceptos constitucionales. Los primeros que tenemos que defender la Constitución somos nosotros.
Estrecho vínculo con las masas. Hay que hacer cambios en el estilo de trabajo más acordes con esta época y con los desafíos de esta época, eso forma parte del debate que tenemos que hacer dentro del Partido; hay que perfeccionar el trabajo en la base; hay que elevar la combatividad y la intransigencia revolucionaria, que son temas que se han abordado aquí, incluso en este encuentro que estamos haciendo hoy.
Como se ha planteado, y hay una interpretación de eso, a partir de lo que planteaba Gerardo, la Secretaria de la Federación y el Secretario de la CTC; hay que revitalizar el accionar de las organizaciones de masas. Hay que decir: “Las funciones históricas, las misiones históricas de las organizaciones de masas desde que surgió la Revolución son estas”. En las condiciones actuales esas se mantienen, pero, y qué otras cosas tenemos que hacer, cuáles son otras exigencias que tenemos que abordar desde esas organizaciones de masas.
No hay ningún país que tenga un sistema de organizaciones de masas, de organización de la sociedad civil, más completo que nosotros y más abarcador que nosotros, pero eso hay que moverlo más, eso hay que revolucionarlo más. También hay que tener siempre una mirada hacia cuál es el rol que les corresponde a las organizaciones de masas en todo lo que nos propongamos hacer en ese trabajo.
Hay que profundizar en el enfrentamiento a prejuicios y a todo vestigio de discriminación —ya eso lo hablamos— en la lucha por la prosperidad. Y ese concepto de que nosotros vamos a resistir sin claudicar, pero no vamos a quedarnos resistiendo, es resistiendo para avanzar, para alcanzar prosperidad. La Visión de la Nación lo que plantea es que este país tiene que llegar a tener prosperidad, por lo tanto, es resistiendo pero avanzando, ¡avanzando!
La relación con los jóvenes. Es preciso hablar y compartir realizaciones con nuestros jóvenes como las más importantes personas que son.
Hay que fortalecer la dinámica de funcionamiento del Partido y la proactividad de su militancia ante los problemas más acuciantes que afronta la sociedad.
Uno de los principales aportes de concreción objetiva de los temas que estamos discutiendo en el Partido a partir del Octavo Congreso es que nosotros logremos que nuestras organizaciones de base, con más espontaneidad, con más naturalidad, con más cohesión, con más autodeterminación, sean capaces de discutir sus problemas sin esperar tanta orientación de arriba ni mucho menos, sean capaces de aglutinar a la militancia, sean capaces de aglutinar a su colectivo de trabajadores; analizar los temas, los propios de su radio de acción, que están en su centro, en su colectivo, y los que están en la sociedad y los que sean preocupación de cualquier militante, y vamos a discutirlo con honestidad, con la verdad, con el sentido que puedan tener las preocupaciones y las aspiraciones, y, sobre todo, qué vamos a hacer con esa militancia y con esos colectivos para transformar cada uno de los elementos que componen esos temas.
Eso sería fundamental en los cambios o en el perfeccionamiento que queremos lograr en la labor del Partido. Porque nosotros entre militantes del Partido y militantes de la juventud tenemos una fuerza de más de medio millón de revolucionarios en el país, unos 750 000, ¿no? (Le responden que hay más de 700 000 militantes del Partido).
Más de un millón de militantes (entre el Partido y la UJC). Con un millón de militantes a este país lo movemos, lo revolvemos, lo transformamos, lo que pasa es que a veces tenemos inerte a una parte importante de esa fuerza política. Y si esa fuerza política es ejemplar, es combativa, es intransigente, ¿cuántos vamos a arrastrar?, ¿qué es entonces la vida externa del Partido?, ¿cuánta gente vamos a arrastrar en materia de movilización y de participación?
Si nuestros métodos son más democráticos, si consultamos más a la gente, si le damos participación, si convocamos; es lo que han hecho los jóvenes en la pandemia, se convocaron ellos mismos y han estado en los escenarios más complicados de la pandemia, y de esos jóvenes ¿qué hemos logrado ahora?, que tienen un crecimiento espiritual, revolucionario y humano tremendo, porque han vivido momentos complejos y lo han hecho con responsabilidad y han aportado. Hay lugares donde han estado esos jóvenes, que si no hubiéramos tenido a esos jóvenes ¿cómo hubiéramos enfrentado el funcionamiento de esos lugares?, ¿cómo hubiéramos cubierto las necesidades y las exigencias de esos lugares?, en zona roja, atendiendo los centros de aislamiento, atendiendo a las personas. Entonces, eso hay que trabajarlo también.
Hay que buscar vías más ágiles, breves y novedosas de comunicar orientaciones, no podemos dilatar tanto las cosas, no podemos complicar tanto los procesos.
Defender como premisa el legado del Comandante en Jefe de “no mentir ni violar principios éticos”, con la verdad, por dura que sea, ganamos.
El otro día intercambiamos con Polanco algunos elementos de la comunicación social, que es otro de los temas que tenemos que priorizar. Los primeros que tenemos que ser críticos para perfeccionar nuestros problemas de manera transparente y con la verdad en la mano somos nosotros, y le quitamos ese espacio al enemigo. Hay veces que el enemigo critica y critica, y nosotros tenemos tantas insatisfacciones como cualquiera, entonces, nos quedamos callados, no comunicamos. No es lo mismo que nosotros seamos los primeros que critiquemos y digamos: estamos criticando esto por esto y por esto, pero lo vamos a solucionar por esto y por esto, ¿qué espacio le dejamos al enemigo?, que hablen lo que quieran, las sandeces que quieran, pero los que estamos abanderando eso somos nosotros, y no siempre actuamos así.
No nos podemos dejar vencer por el peso de las dificultades que van a ser muchas, que están siendo muchas en estas condiciones, tenemos que dar vitalidad, y tiene que ver con los elementos de los que hemos hablado ya de la movilización popular.
Los que somos un poco más viejos tuvimos la oportunidad, en otros momentos de la Revolución, que tenían otra dinámica, de que constantemente estábamos convocados en actividades de participación política, social y económica. Las nuevas generaciones han tenido menos posibilidades, no porque ellos no quieran, es porque no han tenido el espacio o porque en estos tiempos hemos abordado de maneras diferentes determinados temas para buscar más eficiencia; pero tenemos que tener en cuenta siempre que cualquier cosa que nos propongamos tiene que tener también una expresión, tiene que tener una salida en la movilización popular y en la participación de las masas.
Con esto del Congreso vamos con las masas, no pudimos discutir antes las cosas del Congreso por la COVID-19, ahora seguimos con COVID-19, repitiendo más, por grupos más chiquitos, con aislamiento, pero vamos a hacerlo, las masas tienen que conocer lo que se discutió en el Congreso, las tenemos que comprometer con que participen en las cosas que queremos implementar del Congreso.
De todos los procesos del Partido y, en particular del crecimiento, hay que hacer procesos que tengan repercusión social, que levanten moral, que levanten autoestima, que levanten compromiso, no pueden ser procesos fríos. Cuando uno ingresa al Partido está tomando una posición en la vida, entonces eso no puede ser un proceso nada más de una entrevista, de una comprobación y de que al final te den un resultado, tenemos que hacer de eso un proceso que, además de participativo, conmueva y fortalezca. ¿Quién llega a militante del Partido? El que el colectivo ha reconocido como ejemplar, eso tiene que tener otra manera de ameritarlo a nivel social.
Incorporar a la labor del Partido pilares que ya hemos definido, que estamos implementando en la gestión de Gobierno, como son: la informatización de todos los procesos del Partido, el apoyo en la ciencia y la innovación para el abordaje de los problemas, y la comunicación social; y con relación a eso ir a construir una economía socialista basada en el conocimiento, cimentada en el conocimiento.
Una vez más volvemos al tema de que hay muchas tareas por delante, todas estas cosas que nos vamos a proponer requieren mucha participación activa y proactiva de la militancia, de los jóvenes, de los trabajadores y del pueblo en sentido general.
Liberarnos de lastres de burocratismo, de centralismo excesivo, de ineficiencias, de ineficacias, de trabas, y que eso donde lo podamos concretar genuinamente sea en el espacio de la organización de base, en el núcleo.
Hay que despertar también el orgullo por integrar las filas del Partido, y hay que ejercer una militancia partidista y revolucionaria activa también en el enfrentamiento, como explicábamos anteriormente, a las conductas racistas, discriminatorias, en defensa de los derechos de la mujer cubana, en todos estos temas.
En la batalla ideológica no podemos seguir haciendo más de lo mismo, hay que buscarle también creatividad, transformación de la labor partidista; cuando hablo de transformación no hablo de cambiar todo, es perfeccionar, aquí estamos hablando de continuidad, no estamos negando nada de lo que se ha hecho, lo que pasa es que los tiempos son muy exigentes y tenemos que ir también con una óptica de perfeccionamiento.
Hay que lograr la articulación revolucionaria. ¿A qué me refiero cuando yo les hablo de articulación revolucionaria? Cómo aprovechamos todos nuestros potenciales y nos integramos todos para enfrentar en bloque la subversión político-ideológica, la agresión contra el país, pero incluso para ponernos a la delantera, no para estar dando respuestas, es para estar a la ofensiva, que la respuesta la tenga que dar el enemigo, tenemos que estar delante y para eso hay que mover mecanismos, maneras de hacer.
Seguir confirmando y ratificando que en Cuba las calles, los parques y las plazas son de los revolucionarios, y no le vamos a negar en ningún momento al pueblo el derecho legítimo a defender la Revolución.
En la batalla ideológica hay que acudir constantemente a Fidel y a Raúl. En estos tiempos de fake news, falsas noticias, de todas las maneras en que se trabaja desde los sentimientos a las masas, manipulándolas en las redes sociales, lo peor que nos puede pasar es que nuestra gente se vaya con una noticia falsa o que duden ante una noticia falsa. Cada vez que eso pasa duele mucho que con la mentira se vaya la gente revolucionaria, y a veces es porque nuestras verdades no las hemos puesto oportunamente y, además, cuando ellos logran eso se anotan una pequeña y manida victoria.
Cuando uno ve que en un tema complicado en las redes sociales están coincidiendo criterios de revolucionarios y no revolucionarios, ahí estamos perdiendo, ahí hay gente nuestra confundida, porque nosotros, oportunamente, no dimos cuál es nuestra posición o no dimos la perspectiva desde la Revolución. Y no podemos desconocer, como lo ha alertado el General de Ejército, que nos están aplicando guerra no convencional, por lo tanto, tenemos que tener respuesta para la guerra no convencional, que no es la misma que nos hacían en los años sesenta. Entonces, eso también tenemos que saberlo interpretar.
Nosotros vamos a tener el mayor éxito posible en la batalla ideológica en la misma medida en que cerremos fila en defensa de la Patria y la Revolución, y para eso tenemos que lograr que ningún militante sea espectador pasivo y que actuemos con todos los militantes.
Donde hay un militante revolucionario combatiendo no puede estar solo, todos los otros tienen que estar ahí, ¡tienen que estar ahí!, todos tenemos que luchar juntos, todos nos tenemos que apoyar, nadie puede estar en solitario frente a los provocadores, y a la Revolución la tenemos que defender los revolucionarios, y entre los revolucionarios los comunistas al frente, y lo más revolucionario en la Revolución tiene que ser el Partido, por lo tanto, los más revolucionarios dentro de la Revolución tenemos que ser los militantes del Partido, y eso es más fácil decirlo que hacerlo, pero hay que hacerlo y lo podemos hacer, ¡y lo podemos hacer!, y eso tiene que ver con el pensamiento que les pongamos a las cosas, con la disposición y con la manera en que nosotros actuemos.
Comunicación social. Ya es hora de terminar de comprender que esto hace falta, que la labor partidista se tiene que apoyar de la comunicación social, que eso es una ciencia que el Partido necesita desarrollar, que hay que darle un vuelco total, y hay que estar todos los días con un goteo informativo con nuestras verdades, enfrentando las campañas del enemigo y, como explicaba Gerardo, con el lenguaje para que la gente entienda las cosas.
Todo lo tenemos que llevar al lenguaje de los que resisten a diario, a esa dimensión más íntima de la Patria que es el barrio, la pequeña parcela de tierra, la comunidad, la fábrica, la escuela, la obra, la familia, acortando la brecha entre el discurso institucional y las demandas públicas, para que todo el mundo entienda, porque si no, no nos entienden; si no la gente no va a entender el Código Penal, ni las cuatro o cinco Leyes que van ahora que son importantísimas para la vida del país.
Hay momentos en que discutimos con ese nivel, ¿no? Y después eso hay que ser capaz de llevarlo al lenguaje de toda la población, para que todo el mundo lo entienda o que lo entienda la mayoría.
La defensa de la Patria está claro, ya estaremos viendo con los compañeros de las Fuerzas Armadas Revolucionarias y el Ministerio del Interior, cuando pasemos la pandemia en algún momento tendremos que hacer algunos ejercicios, algunas actividades de fortalecimiento del Día de la Defensa, por las afectaciones que hemos tenido en estos tiempos. Hay que seguir consolidando la concepción estratégica de la Guerra del Todo el Pueblo. Y hay que estudiar para proponer elementos que están relacionados con lo que alertó el General de Ejército, a la luz de la tendencia del envejecimiento, la afectación que podemos tener en cubrir las demandas de la Defensa. De qué manera vamos a ir incorporando a todos los estudiantes de la Educación Superior, en qué medida pueden participar también las mujeres en las tareas de la defensa en una magnitud más creciente que la que tenemos hoy en día. Esas son tareas en las que ya debemos estar pensando y que debemos tener una discusión y una implementación en función de cuando vayamos saliendo de esta situación.
Política de Cuadros. El debate de Política de Cuadros en el Congreso fue muy aportador. Tenemos la Estrategia, tenemos un modelo de tránsito de los cuadros, que ahora hay que aplicarlo de una manera flexible, inteligente, apropiada a cada lugar y hay que implementar todo lo que aprobó el Congreso sobre Política de Cuadros que lleva capacitación, lleva preparación, lleva organización, lleva también elementos en la planificación que no son siempre como los que hemos trabajado, pero creo que hay un camino que se abordó y que ahora hay que implementarlo.
Vida externa. Si tenemos una vida interna más fuerte en el Partido, tendremos más capacidad para movilizar a las masas y para que todo el mundo participe con nosotros en las principales tareas de la Revolución.
Aquí volvemos al concepto de democracia que ha defendido el General de Ejército para el Partido, conscientes de que la democracia es más socialista en la medida en que es más participativa. Y a nosotros nos corresponde estimular la participación popular. Y vuelvo de nuevo: a cada cosa que hagamos hay que buscarle una salida en la participación popular. La participación popular es la que le da fuerza a las cosas.
Si nosotros ahora discutimos esto, damos la mejor de las orientaciones a este proceso y esto no llega a la gente, esto se quedó en la nada, se quedó aquí a nivel de los cuadros. Esto de verdad va a ser efectivo si en la implementación participa la gente, participa el pueblo, y teniendo en cuenta que aquí cada persona, cada colectivo, cada organización de masas cuenta, ¡aquí cuenta todo el mundo!
La batalla económica. Hay que romperle el exceso de burocracia a esta famosa lucha que tenemos contra las trabas e imprimirle mayor dinamismo al proceso de actualización del Modelo Económico y Social.
Antes del Congreso hicimos una ruptura del paso al que se venía, tal vez lento, en abordar y en implementar acuerdos de los dos congresos anteriores, y pudimos llegar al Congreso con el Plan Nacional de Desarrollo Económico y Social, con una Estrategia Económica y Social, implementados la mayor parte de los Lineamientos, el Ordenamiento que llevaba 10 años en diseño, eso requirió un trabajo y lo hicimos en medio de la situación más difícil, en el último año y medio o los dos últimos años con COVID-19 y con medidas de Trump. Entonces el tema es quitar trabas.
Ya en el Consejo de Ministros de esta semana se va a discutir el tema de los otros actores económicos y vamos a tener todo el espectro de actores económicos en el país, por lo tanto hay que seguir avanzando. Están las medidas de la Agricultura que se aprobaron, las medidas que se han aprobado para la empresa.
Nosotros tenemos que buscar que los tiempos de respuesta y de implementación sean más cortos, sean más efectivos. Y para eso hay que destrabar, hay que seguir analizando qué trabas quedan, qué cosas frenan el desarrollo de las fuerzas productivas. Combinar la centralización de la economía, de la planificación económica que necesitamos también con la descentralización. Fue un tema que discutimos recientemente: qué cosas se pueden descentralizar y cómo participan con adecuadas relaciones el sistema empresarial y los otros actores económicos.
Y hay que promover, compañeros, y aquí está el sector empresarial participando en esta reunión, terminar de estremecer el sector empresarial y que desempeñe de verdad el papel que le corresponde de principal actor económico en el Modelo Económico y Social nuestro.
Potenciar producción nacional, romper la mentalidad importadora, que la demanda interna que tiene el país, lo que demanda el país en materia de mercado interno sea lo que estimule producir más, producir con más calidad, dar servicios de más calidad y que de ahí salgan también propuestas de exportación y seguir abordando sin prejuicios los temas de la inversión extranjera.
Resistir creativamente sin renunciar al desarrollo, perfeccionando, actualizando sus conceptos y modernizando las maneras de hacer y de participar.
Al final, podremos tener un resultado en la batalla económica si logramos que en el horizonte de cuanto hagamos siempre esté la mayor felicidad posible de las cubanas y los cubanos defendidos desde las esencias de nuestro socialismo. Si nosotros alcanzamos logros económicos que contribuyan a la prosperidad y a la felicidad de las cubanas y los cubanos desde nuestro socialismo, ese es el éxito de la batalla económica; si no lo logramos, no hemos alcanzado logros en la batalla económica y a eso es a lo que hay que orientarse, ¡a eso es a lo que hay que orientarse!
Si implementamos bien esto, si lo desarrollamos con toda coherencia, más que un proceso lo que vamos a conformar es un sistema de trabajo coherente, integral que nos va a permitir pensar y actuar para Cuba. Y con eso entonces vamos a garantizar unidad, y vamos a garantizar continuidad, y a eso es a lo que los convocamos.
Muchas gracias (Aplausos).
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