Actores y acosadores. Por Javier Gómez Sánchez

 

Desde que la Televisión Cubana comenzó a transmitir un spot contra la Ley Helms-Burton protagonizado por los actores Fernando Echevarría y Jorge Enrique Caballero, en las redes sociales – especialmente en Facebook- han aparecido una avalancha de insultos y ofensas hacia los dos artistas cubanos.

El spot en cuestión, de factura bastante fresca y con un valor comunicativo renovado- que nos hace rememorar aquella campaña Lazos Amarillos por la liberación de los Cinco Héroes- es parte de una acción comunicativa para recordarnos la raíz anticubana del bloqueo estadounidense.

Es que a los cubanos se nos había olvidado lo que era la Helms-Burton, o casi. En los últimos años apenas la mencionábamos y si hablábamos del Bloqueo, era como algo que parecía que disminuía cada día, o persistía, pero que parecía que dejaría que existir más temprano que tarde. Ahora no estamos tan seguros. Ya no estamos en aquellos tiempos en los que en nuestra relación con los Estados Unidos una buena noticia parecía destinada a ser seguida por otra mejor.

Realmente molesta, molesta mucho, porque ya habíamos adaptado nuestras mentes y nuestra visión al horizonte de Cuba en aquella situación mucho más positiva que esta. Porque además, nos ha sacado de lo concentrados que estábamos en solucionar nuestros problemas nacionales más complejos y nos ha vuelto a situar en conseguir lo más básico. Ha vuelto a traer la palabra ¨Bloqueo¨ tanto a la boca de aquel que es sincero, como a la del que se aprovecha de ella para justificarse.

El cierre de los servicios consulares en La Habana y los tumbos que han tenido que dar por varios países -México, Colombia, Guyana- los que desean viajar a Estados Unidos para mantener vínculos con su familia, más la eliminación del visado por 5 años; el desplome de un turismo estadounidense que iba en aumento y que ha sido devastador para el sector privado cubano, especialmente para el de hospedaje; la anulación del acuerdo entre las Grandes Ligas y la Federación Cubana de Béisbol; la cancelación del contrato de servicios médicos entre Brasil y Cuba (por el presidente brasileño pero con el respaldo sonriente del senador Rubio). Así mismo muchos proyectos artísticos se han frustrado por el ambiente de retroceso.

He trabajado con Fernando Echevarría y Jorge Enrique Caballero en varias ocasiones. Sé que tienen tantos motivos- sociales y personales- para estar molestos como los tenemos todos.

Uno pudiera decir que los insultos eran de esperarse, que siempre es igual, que son los mismos. Los que no rompieron discos en la Calle 8 porque tenían que trabajar ese día o estaban cansados de trabajar toda la semana, entonces los rompen en Facebook. Pero no dejo de pensar que en el odio que se ha vertido en estos días sobre esos actores de Cuba, hay cierta dosis de venganza. La que fue destilada con aquel veneno que tuvieron que tragar cuando el llamado ¨Intercambio Cultural¨, hace algunos años, cuando muchos músicos, humoristas y actores de la isla comenzaron a viajar con frecuencia para actuar en Miami. En aquel entonces los programas de la televisión miamense competían por lograr la exclusiva, o al menos ser el primero, en poder subir su rating apelando a la nostalgia presentando una entrevista con alguno de ellos. Pero a veces a los invitados les era difícil mantener la tabla, fue incómodo para los primeros. Aunque algunos programas fueron más respetuosos que otros, varias preguntas parecían encaminadas a satisfacer una morbosa necesidad, cierta tensión podía notarse en el ambiente, y un desconcierto mantenido con cada respuesta parecía que iba a estallar en una explosión desesperada del entrevistador: ¨!!¿¿Chico, pero tú me vas a decir que no te estas muriendo de hambre en Cuba??!!¨

Porque si algo podía notarse en aquellas entrevistas, era cómo cada vez que un artista decía: ¨Yo estudié en la ENA¨,… ¨En el ISA¨,… ¨Me formé en el grupo de teatro tal o más cual¨,…¨Descubrí mi vocación cuando estudiaba ingeniería en la CUJAE¨, cada vez que comentaba que su obra se estrenó en un teatro de La Habana y ahora la ponían en Miami, o acababa de trabajar en una película, en una teleserie, de dar un concierto o una gira en Cuba, mucha gente en Miami se alegraba, pero no era difícil imaginar la cara de otros y de cómo les hervía la sangre.

Esa es la bilis acumulada que se ha descargado sobre Fernando Echevarría y Jorge Enrique Caballero por haber hecho un spot contra la Ley Helms-Burton. Ahí están El Nuevo Herald y Cibercuba, revolviendo a la chusma que los insulta. Los mismos que celebran cuando les resulta conveniente lo que algún que otro actor publica en su muro de Facebook. ¡Qué poca cosa parecen ahora esas publicaciones de moda!

Personalmente me era difícil quedarme callado ante los insultos, porque el que calla otorga ¿Dónde están ahora los ¨defensores de la libertad de expresión¨ para defender a Fernando y a Jorge Enrique.

Hay una diferencia entre ser un actor y ser un bufón. Pobre de aquel que habiendo entregado su talento, se crea que quienes le dan ¨like¨ y comparten lo que con dudosa inteligencia publica, lo celebran por el actor que ha sido, y no por lo útil que les resulta como bufón del momento.

javiergosanchez09@gmail.com

 

This entry was posted in Cuba, Estados Unidos, Internet, Mentiras y medios and tagged , , . Bookmark the permalink.

12 Responses to Actores y acosadores. Por Javier Gómez Sánchez

  1. Abel E. Mejías Padrón says:

    Triste y odioso oficio de pirañas en redes sociales, mi respecto a los actores y los realizadores del material y ojalá se hicieran muchos mas con ese corte minimalista y esencial, breve pero contundente! tienen mi simpatía militante y comprometida.

     
  2. Any says:

    El artículo no abre. Cómo acceder para leerlo ?

    Cuando se resumen los artículos y dice Leer más de esta entrada, casi nunca se pueden abrir desde el servicio conmutado.

    Gracias Saludos ania ortega

     
  3. Rey says:

    Fernando y Jorge Enrique son excelentes actores, excelentes personas y excelentes cubanos. Aquí los queremos y los respetamos por su trabajo y entrega de años.
    La asquerosidad Helms Burton daña a todos los cubanos de la isla, sea cual sea su posición política o estatus económico. Daña también de uno u otro modo a la mayoría de los cubano-americanos y daña al pueblo norteamericano, incluyendo a sus empresarios.
    Si una minoría de anti-cubanos, mal nacidos en esta isla y que se fueron a los USA o peor aún, están aquí haciendo daño, los insultan o los critican, bienvenidos sean esos insultos, porque los insultos y los desplantes de cobardes alimañas, con las cuales solo dialogaremos a balazos, son el mejor reconocimiento a la honestidad, el humanismo y la decencia de los buenos.
    Y Fernando y Jorge Enrique, son de los buenos.

     
  4. Carlos Luque says:

    De los claros e indudables enemigos, qué esperar…Daño de otro tipo hacen medios autodeclarados revolucionarios donde desde hace un tiempito a la fecha se vienen escuchando ciertas voces que han insistido en minimizar las consecuencias del bloqueo.
    Más allá de opinar que el bloqueo puede ser utilizado por algunas personas para
    justificar sus errores, negligencia o falta de talento, que sin dudas ocurre, estos personajes han insistido en una propaganda muy conveniente para los claros e indudables enemigos: que el bloqueo no es la causa principal de esenciales problemas en los intentos de construir plenamente un modo de vivir no capitalista…Recuerdese cómo ayudó a Occidente y CIA ese tipo de opiniones
    y campañas para empujar a la antigua URSS a su disolución, aunque allá los factores internos fueran determinantes…

     
  5. Pero ambos actores le contestan desenfadadamente:¡No, no nos entendemos! Jajajajajaja.

     
  6. Julian rizo niño says:

    Mi solidaridad con esos magníficos actores. Todo cubano que se respete.apoya el mensaje qué grabaron, para denunciar una ley que afecta a todo el pueblo cubano.desprecio merecen los cipayos que los criticaron

     
  7. Sin-permiso says:

    Entender la sinrazón y la barbarie, podría ser posible. En las sociedades complejas, siempre existió una clase dominante que intentó, con mayor o menor éxito, una revolución ontogenética hipertrófica, que hiciera girar el mundo a su alrededor y ponerlo a su servicio. La Cuba anterior a la revolución formaba parte de este puzle. Lo que no es posible es que, además de entender las bajas pasiones humanas y el grado de perversión que pueden alcanzar cuando se dan las condiciones, tras la revolución de 1959, se tenga que aceptar que este siga siendo el destino del pueblo cubano. No existe ninguna ley divina ni humana que no se pueda rebatir con los argumentos de estos dos brillantes y honestos actores cubanos, que son las señas de identidad de la más digna de las revoluciones.

     
  8. María Ramos says:

    Ese spot está buenísimo, me encanta como lo interpretan los dos actores y el mensaje que trasmiten.
    Definitivamente no podemos entendernos con la ley Helms Burton, ni con quienes la apoyan e insultan a dos cubanos, respetados y admirados actores.

     
  9. Pingback: Actores y acosadores |

  10. Pingback: Actores y acosadores – El blog de la TV Cubana

  11. gloriaalicia says:

    Desde que vi este spot los admiro más como actores y como cubanos de pur cepa. !Abajo el bloqueo!

     
  12. Victor Soler says:

    Eto fue lo que escribí en el face del Porfesor Toledo: Hay cubanos que han perdido la dignidad, y solo viven de negocio de la contrarrevolución; pero somos más lo que en Cuba y fuera de ella la cuidamos y defendemos. Nuestros actores Fernando Echevarría y Jorge Enrique Caballero pertenecen al bando de los AGRADECIDOS y para ellos MARTÍ TAMBIÉN DIJO: ¨El deber que deleita, rija a los hombres. Él guía, él salva, y él basta¨ OC, t. 10, p. 25. Gracias profesor Toledo!!!; y agrego: GRACIAS Javier!

     

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos necesarios están marcados *

Puedes usar las siguientes etiquetas y atributos HTML: <a href="" title=""> <abbr title=""> <acronym title=""> <b> <blockquote cite=""> <cite> <code> <del datetime=""> <em> <i> <q cite=""> <strike> <strong>