El tránsito socialista: rumbo estratégico al comunismo. Unas primeras notas reflexivas inconclusas. (1ra parte). Por Orlando Cruz Capote

 

I

El proyecto de la Constitución de la República de Cuba (1) está siendo sometido a una detallada, amplia y profunda discusión popular desde el 13 de agosto hasta el 15 de noviembre de 2018, porque es un ‘documento programático político’ de largo alcance para la vida presente y futura de la nación y el pueblo. (2)

De hecho, existen varias interrogantes acerca del proyecto de Constitución, pero tres preguntas fundamentales rondan alrededor de sus preceptos y artículos como ya sucedió con los documentos del VI, VII Congreso y la Primera Conferencia Nacional del Partido Comunista de Cuba:

La primera ¿Cómo combatir de manera certera al capitalismo, sin ser subsumidos/as por sus lógicas, reproducciones metabólicas y entramados de domesticación y manipulación en el tránsito socialista?

La segunda: ¿Cómo promover formas cada vez más socializadoras en la etapa del tránsito socialista, que impliquen mitigar la subordinación del trabajo al capital (el mercado, las relaciones monetario-mercantiles, el dinero, la enajenación en su vinculación con el trabajador asalariado), que fusione la política con la economía, supere las brechas entre el Estado y la sociedad civil y permita que el control en la producción y la distribución lo ejerzan los trabajadores / productores al integrarse a la administración estatal de forma articulada democratizadora, logrando de una vez la apropiación social colectiva e individual del plusproducto para reproducir sus formas de existencia material y cultura-espiritual?

Y la tercera: ¿Cómo se podrá en el actual tránsito socialista nacional lograr la restauración del consenso y la hegemonía del poder popular, que recorre perpendicularmente la reconstrucción y el fortalecimiento (estudio riguroso mediante) de las añejas, nuevas e imperativas alianzas socioclasistas y entre los diferentes grupos, sectores y estratificaciones sociales y, por ende, la recomposición del consenso nacional, social y popular, con el objetivo de recuperar y resignificar al unísono la hegemonía de la teoría y la práctica marxista y leninista -en plural-; así como el restablecimiento de la hegemonía socialista en el seno societario, con la recomprensión de la articulación ad infinitum del ideario y accionar martiano, marxista y leninista y fidelista con lo mejor de las tradiciones revolucionarias históricas, políticas y culturales de la nación, región latinoamericana-caribeña e internacionalmente?

Dando por fundado, que casi todas las posibles respuestas estén en lucha frontal contra cualquier manifestación de dogmatismo y sectarismo, modorra, indiferencia y acriticismo intelectual, apolitización, nihilismo nacional, desmovilización y desmotivación ideológica de las masas populares, desapego a la historia viva de la sociedad y, por ende, al anquilosamiento de la teoría revolucionaria, que significara la parálisis de la praxis revolucionaria.

Lo que sucede en la realidad es que hasta ahora, septiembre de 2018, las supuestas respuestas han sido disímiles y los disensos están pugnando su lugar por encima de los consensos. Hay evidentes falencias conceptuales con las que carga la redacción de la Constitución que embrolla sus formulaciones de acuerdo a los documentos aprobados por el PCC anteriormente. (Cruz Capote, Orlando (2018): ¿Hacia dónde conducen las falencias en el aprendizaje del marxismo revolucionario y el pensamiento social crítico?, La pupila insomne, La Habana, 10 de julio).

La agenda de los desafíos no es de puro carácter económico, técnico y jurídico, puesto que la recomposición del consenso nacional y social, a la larga popular, es una red de problemáticas políticas (en la esfera política que significa el conjunto de procesos políticos), ideológicas, éticas, estéticas y culturales, ‘económicas en última instancia’, que no abarcan un árido tratamiento meramente formal, lo que es también pertinente, sino que requiere de una mirada dialéctica recconfigurativa integral de toda la sociedad, cada vez más diversa, en conjunto con la naturaleza, además, con la consabida reinserción de la Isla en la convulsa América Latina – Caribe y el no menos conmocionado resto del mundo bajo la hegemonía (y dominio) de la transnacionalización capitalista neoliberal, las continuadas crisis del capitalismo global y sus repercusiones inmediatas en los países del Sur geopolítico. Y para Cuba la presión, el bloqueo genocida y el deseo del establishment estadounidense de ponerla de rodillas no es un reto menor en ese afán innovador socialista.

El serio ejercicio intelectual, teórico y práctico está implicando, e implicará, generar un renovado tránsito socialista, una reactualización de aquellas tradiciones y herencias que, lejos de recibirse de manera pasiva e inmutable urgen ser reinterpretadas, como escribía el Amauta Peruano José Carlos Mariátegui, en su papel dialéctico e histórico concreto, siempre remisas a dejarse aprehender en una fórmula impenetrable o a petrificarse en un estadio que ya no es similar a circunstancias históricas anteriores, salvo las herencias y legados que le son vigentes, por lo que se trata de un ejercicio herético de (re)-creación y reinvención, donde es necesario lograr la ‘traducibilidad de los lenguajes científicos y filosóficos’.

Condición sine qua non para, al decir de Gramsci, negar la copia mecánica de otras experiencias, y de paso, resolver la contradicción de que “…la realidad abunda en combinaciones de lo más raro, y es el teórico el que debe identificar en esas rarezas la confirmación de su teoría, ‘traducir’ en lenguaje teórico los elementos de la vida histórica, y no al revés, exigir que la realidad se presente según el esquema abstracto”. (3) Todas las realidades y verdades relativas, incluso si son universales, deben su eficacia porque son expresadas de forma mediada bajo el prisma de los lenguajes de las situaciones concretas particulares; y si no se logra esa expresión (traducción, interpretación y resignificación) en ‘lenguas particulares’, esas se convertirán en abstracciones bizantinas y escolásticas, que solo servirá de entretenimiento a los rumiadores de frases huecas (fraseología ideologizante) que no conllevarán a adecuaciones teóricas y realizaciones prácticas, auténticamente revolucionarias.

Justamente se considera al Comandante en Jefe Fidel Castro como el mejor traductor del marxismo y el leninismo para la realidad cubana, porque lo realizó creativamente, sin repetir incesantemente las frases de los clásicos, contextualizó históricamente sus conceptos en la realidad nacional, y lo hizo con una forma pedagógica sin rebajar el peso de las categorías y la propia historia del marxismo.

La Revolución cubana ha entrañado un singular proyecto de liberación nacional y social, ético, político y cultural en el cual el “…pueblo si de lucha se trata” (4) no incluyó a los grandes explotadores y si a grupos sociales o conglomerado de clases trabajadoras de variados grupos y sectores, que se despojó de los intereses corporativos o sectoriales, construyendo impenitentemente una Revolución para las mayorías, sin subestimar ni restar a las demás, a través del consenso y la disputa ideológico-cultural. Una construcción social que incluyó un liderazgo de carácter popular nacional el cual involucra a los anhelos y demandas del conjunto de las clases subalternas en su programa de acción. En esos propósitos, la clase trabajadora no puede ser ignorante, tampoco ignorada, bajo ninguna circunstancia -según Gramsci- por lo que debe ser dirigente antes de lograr ser dominante y, por lo tanto, ejercer su hegemonía en conjunto con las demás clases, capas, grupos y sectores, lo que incluye las diversas estratificaciones sociales.

La superación de una concepción minoritaria de la Revolución, como proceso destructivo / constructivo, este más allá del capital, tiene de base la creación de una organización política, con el método de ejemplaridad / selectividad de las masas, profundamente enraizada con los sectores populares y no ubicada por fuera y encima de ellos como si fuera una élite etérea. Ese es el partido de vanguardia, el Partido Comunista de Cuba y de la nación cubana, surgido después del triunfo revolucionario, que no se aísla del resto de los componentes de poder que son conformados por las demás organizaciones de masas y sociales que ejercen, mancomunadamente, la dirección, conducción y el control colectivo y, por lo tanto, el ejercicio en el dominio y gobierno de la sociedad para la cual se requieren el conjunto de las instituciones de poder correspondientes, a través de las cuales las masas trabajadoras hagan válido ese derecho y puedan expresar y hacer valer su voluntad. (5)

Entonces, “el socialismo [afirma Gramsci] es una visión integral de la vida”, en el que se requiere conjugar el sentir con el pensar-hacer en un plano macrosocial y microsocial, personal y colectivo, y antecede como al momento más estrictamente de asalto para la conquista del poder político -elemento primario necesario-, y la desarticulación de las estructuras institucionales donde se materializa y concentra el anterior poder y sus secuelas en el nuevo, entendido éste en su faceta restringida porque el socialismo domina pero más que todo hegemoniza, como conjunto de aparatos burocrático-represivos, lo que hace urgente la construcción de los gérmenes de las relaciones sociales comunistas en una ciclópea misión de largo aliento estratégico donde prime la democracia más plena.

La capacidad de dirección política del Partido, su autoridad moral, apoyada críticamente por los conocimientos y saberes de las ciencias sociales, la filosofía y las humanidades, nos remite a la negación de la función tradicional de mando-obediencia y los verticalismos de arriba hacia abajo, y nos impele a la conformación de un proyecto civilizatorio de nuevo tipo, contracultural, antisistémico al capital y de emancipación humana pleno, que se nutra y arraigue en la cotidianeidad de las iniciativas de los sectores populares, que prepare a la organización de vanguardia -o intelectual político colectivo- en brindar una educación político ideológica y orientación general a las prácticas concretas del pueblo, capaz de hacer esa ciencia social ‘en acto’ y pueda irradiar, en tanto revolución educacional, intelectual-moral y cultural, ese espíritu sentipensante y hacedor hacia el conjunto de la sociedad, como concepción del mundo y modo de vida poseedor de una potencialidad de combate frontal contra el patriarcado, el machismo, la xenofobia, la homofobia, el racismo, la discriminación, la guerra y el armamentismo, la violencia contra la mujer, el derroche de los recursos humanos y naturales, la depredación de la naturaleza y la colonialidad del poder, saber y de los valores.

II

Las posiciones que se han asumido y se dirimen ante el proyecto constitucional han sido variopintas tanto al interior como al exterior del país. Junto a las visiones interpretativas que la analizan desde la totalidad e integralidad del proyecto y sus aciertos indiscutibles, existen algunas opiniones que pecan de apreciarla con reduccionismos jurídicos y economicistas; terceras visualizaciones sesgadas que sólo valúan ‘cambios cosméticos’ en la política, las relaciones de poder y la democracia popular; otras que la perciben como el equilibrismo inestable y efímero entre representantes de un cierto “reformismo político” cauteloso -catalogado de social-liberalismo y socialdemocratismo ingenuo e intencionado-, proclives a un postcapitalismo al estilo chino y vietnamita; así como aquellas que la asumen como el ariete de los revolucionarios (conservadores) que defienden el modelo de ‘socialismo de Estado’; (6) y los que, supuestamente, propugnan un realismo político -una ‘realpolitik’ cercana al pragmatismo- acerca de las políticas económicas de transformación, que serían las capaces de impulsar la actualización de Modelo Económico Social, con un rápido crecimiento y desarrollo de las fuerzas productivas a través del tecnologicismo económico, inversiones de capital y elementos de un capitalismo light, sin alterar la estructura del poder político en la Isla, es decir el partido comunista único. (7)

Estas divisiones esquemáticas y arbitrarias, porque subjetivamente todas lo son si no poseen un sólido aparato de investigación sociológico-político demostrativo, (8) inviste cierta semejanza con las preanunciadas en el 2012, por la estudiosa Camila Harnecker Piñeiro, profesora, investigadora y consultora de empresas, del Centro de Estudios de la Economía Cubana (CEEC), quien identificó las tres supuestas principales visiones del socialismo en Cuba que están influyendo en los cambios actuales: la estatista (estadocéntricos versus descentralizadores), la economicista (reduccionismo económico y tecnocrático versus la integralidad política, económica, social, jurídica, estética, ética y cultural de los cambios) (9) y la no aceptada, para el caso cubano, de autogestionaria, que comprende a las variadas formas cooperativas, instituciones, organizaciones y asociaciones más autónomas, democráticas, socializadoras y solidarias, con mayor transparencia informativa y comunicacional, que proponen el establecimiento de modelos de autogestión, gestión y cogestión popular, sin desestimar la propiedad y gestión estatal, y que implícitamente conllevan relaciones sociales menos alienantes / enajenantes, ya que permiten un sentido mayor de pertenencia y liberan las iniciativas y capacidades creativas de los individuos y colectivos en sus lugares de trabajo, comunidades, seno familiar, en fin, abarcando a toda la ciudadanía, sin verticalismos, ni ordeno y mando excelsos.

Por nuestra parte, no tenemos dudas, que se debe incluir, con énfasis y paulatinamente formas de autogobierno, autodirección, auto-organización y autorregulación desde los ‘poderes desde abajo’ y redes horizontales, (10) que son los más propensos a combatir los vicios de los burocratismos y tecnocratismos en la sociedad y que, además, propician el empoderamiento efectivo y eficaz de las masas trabajadoras y populares. Sin absolutizar que esta sería la pócima alternativa y la panacea de solución a las complejas problemáticas en el tránsito socialista nacional.

Aunque, explica la investigadora Piñeiro, estas posiciones o corrientes de pensamiento, por lo general, coinciden en que el principal objetivo a largo plazo debe ser una sociedad más justa y liberada de las dificultades económicas que enfrentamos, difieren marcadamente en su manera de entender la justicia y la libertad, y, por lo tanto, cómo realizar la construcción del socialismo. Por eso, no varían en mucho en cuanto al diagnóstico sintomático de la situación actual -salvo algunas quiebras estructurales y de valores en la sociedad cubana, que, aun siendo moderadamente detectadas, no son calculadas en su profundidad, como consecuencias primordiales, pero no únicas, del Periodo Especial en Tiempos de Paz comenzado en septiembre de 1990-, sin embargo, identifican distintas causas estructurales de fondo, así como proposiciones alternativas para superar las problemáticas que han ralentizado los cambios.

Asimismo, tienden a establecer heterogéneos puntos de partida, distintas metas a corto y mediano plazo, diferentes ritmos en la aplicación y cumplimiento de los documentos del VI y VII Congreso y su Primera Conferencia Nacional del PCC, (11) y, más importante aún, proponen diversos medios para alcanzar los objetivos, por lo que -aunque no siempre se reconoce- nos conducen hacia disímiles puntos de vista acerca de los estadios en la construcción socialista.

Sin embargo, en su texto, Camila Piñeiro advierte que, tales corrientes de pensamiento no se dan puras, y pueden, en realidad, que los grupos y personas que la componen compartan puntos comunes y que sea posible imbricarlas unas con las otras. (12)

Por otra parte, el Premio Nacional de Ciencias Sociales, el politólogo Juan Valdés Paz plantea otro encasillamiento, que no se distancia en mucho a la anterior, pero que lo amplía y titula de otra manera. Sin embargo, advierte que tales tendencias: “…No son puras, están muy confusas y a veces los propios sujetos sociales no están totalmente conscientes de que sus posicionamientos y propuestas clasificarían, para un observador distante, como más socialdemócrata, social-liberal, soviética, guevarista, socialista crítico, etc. En un trabajo reciente clasifiqué algunas corrientes sociopolíticas, no en abstracto sino frente a los Lineamientos, para hablar de la estrategia de reformas en curso. A una la llamé convencional, que es una mezcla de muchas cosas, un poco como ha sido la Revolución cubana; también está la guevarista; otra que llamo socialista crítica, es decir, los que critican al socialismo real cubano desde la izquierda, por estatista, y le reclaman que sea más socializante, que sea más autogestionario, que desarrolle más el autogobierno; esta corriente incluye las propuestas libertarias y comunalistas, que apuestan por centrar localmente la organización social, etc. Y están más claras las corrientes socialdemócratas y las social-liberales a las que ya me he referido; en estas dos la influencia china es distinta, pero está presente como referencia a sus reformas (…) Cuando digo que hay que construir consenso, debatir y ser inclusivos, no es una cosa abstracta, no estoy hablando de individuos demográficos, sino de personas comprometidas con algunas de estas corrientes o con una combinación de ellas, porque no todos racionalizan exactamente lo que están pensando.” (13)

El propio Valdés Paz ya refería en el 2014: “…El régimen cubano enfrenta la oposición política e ideológica de personas, grupos y gobiernos, particularmente el de EEUU. Esta oposición se ubica doctrinalmente desde el neoliberalismo [también los hay más o menos liberales, sin saber que asumen esa posición], hasta una cierta socialdemocracia, pasando por todos sus matices. Un aspecto compartido por todos ellos, aun que, con diferentes argumentos, es su anticomunismo [maledicente]. Aunque esta es fundamentalmente una oposición externa, también tiene alguna representación interna. …Del lado del régimen socialista “realmente existente” en Cuba hay también personas y grupos con posiciones críticas, algunas de los cuales le pasan por la izquierda y otras por la derecha. Doctrinalmente, estas corrientes se ubican desde posiciones libertarias hasta socialdemócratas de izquierda, pasando por el guevarismo, el fidelismo y el sovietismo. La prioridad absoluta atribuida a la unidad política de las fuerzas de la revolución ha propiciado una cultura, un estilo y una práctica políticos -tanto en el Partido dirigente como en la sociedad- que lleva a “opinar de la manera adecuada, en el momento oportuno y en el lugar conveniente”. Ello hace que la crítica sea un insumo de poco peso en el diseño e implementación de las políticas.” (14)

Como el debate endógeno cubano sobre problemáticas pendientes (y las nuevas) acerca de cómo enfocar teórica y metodológicamente las problemáticas del tránsito socialista no se origina y propicia en todos los espacios públicos posibles y necesarios, por lo que no resulta amplio y profundo para búsquedas de consensos, convirtiéndose muy espinoso y, a veces, ininteligible, por incomprensiones, excesos de etiquetas y acusaciones entre los que discuten (carencia de saber escuchar, dialogar e intercambiar, rsumiento de cultura del debate), lo que tiende a complicarse más cuando se expande e intervienen los observadores e interpretadores foráneos, algunos de ellos cubanos en el exterior (lo que está sucediendo en el actual proyecto de Constitución), también los llamados cubanólogos, que tratan de explicar de forma diáfana o extraña, según los casos, tergiversando conciente e inconscientemente (15) lo que se plantea en cualquiera de los círculos donde se establecen las polémicas. (16)

El proyecto de Constitución de la República de Cuba, si bien tiene un asidero jurídico (expresión del Derecho), (17) normativo (mínimo y máximo), axiológico y de ordenamiento, no exclusivamente técnico, profesa la necesidad de redefinir filosófica, teórica-política y en la praxis, de forma crítica, sobre las nuevas realidades cubanas -con respecto a la aprobada en 1976, reformada en 1992 y el 2002-, (18) así como de readecuarse al vigente y mutante orden jurídico internacional, por lo que reúne los principales y generales preceptos y prácticas constitucionales que tienen numerosas articulaciones e interrelaciones, directas / indirectas y mediadas, las cuales repercuten indistintamente en todas las esferas del cuerpo societario, especialmente en la estructura del sistema de las relaciones sociales, las relaciones de poder, en la democracia popular que se debe practicar sin extraviar los acumulados y experiencias vividas, en las formas de hacer política con ética revolucionaria y el método de masas,; en cómo se asume la conciencia y cultura política; en el pensamiento, comportamiento y la acción política de los ciudadanos; en el consenso social -ese novedoso ‘Pacto Social’ que coadyuvará al reforzamiento de la urgente Unidad nacional y social- que debe lograrse en la práctica cotidiana, lo que incidirá en el apoyo o no al proyecto político socialista que refrende la Constitución, y en cualquier otro proceso que ataña a la sociedad como totalidad, o sea en las esferas económicas, políticas, sociales e ideológicas, estéticas y culturales. (19)

La nueva Constitución significará, no hay dudas, la modernización y evolución de los preceptos humanistas defendidos por la revolución socialista, refrendados históricamente por las cubanas y los cubanos en estos casi sesenta años de proceso revolucionario, así como, en la búsqueda incesante de esa emancipación humana plena y de nueva índole civilizatoria, antisistémica, contracultural y antihegemónica al Sistema de Dominación Múltiple del capital al que se somete la mayoría de los países en el orbe.

Porque, para que el país se encamine por la legalidad y la civilidad, aumente su legitimización y adquiera superior credibilidad, a lo interno y externo, necesita leyes fuertes y justas y, desde luego, la ley fundamental debe ser clara, comprensible y bien comprendida por toda la ciudadanía, incluso por los cubanos que residen en el exterior, para que luego sea acatada y se cumpla en su letra viva y espíritu. (20)

Como expresó la doctora y profesora Martha Prieto, especialista en Derecho Constitucional: “…Un día en un debate me decían: No, el Partido no se subordina. Pero no es tal. Si estamos hablando de que la Constitución es la expresión de la voluntad soberana del pueblo, por encima del pueblo: el pueblo. Ahí está el qué y el cómo, la base y el tope ¿Hasta dónde se puede actuar? Hasta donde lo permita la Constitución. …desde esta perspectiva se ha de ver la Constitución como garantía, y acabar de entender que la Constitución es jerarquía superior, por encima de ella nadie salvo el pueblo en referendo popular.” (21)

En la Constitución, sumun del cuerpo legal de la nación cubana, la filosofía (filosofía de la praxis) y, en especial, la política resulta la forma predominante de la conciencia social, la que desempeña un papel decisivo sobre las demás formas, especialmente en el socialismo, ejerciendo por tanto una creciente influencia sobre todas las esferas de la vida social, mediante la regulación objetiva / subjetiva -sin dicotomías, atomizaciones y separaciones infértiles- de las relaciones políticas a través de las políticas públicas, estatales y de gobierno.

La Constitución es la ‘Ley Fundamental’ o ‘Suprema’, la ‘Carta Magna’, la ‘Ley de Leyes’, sobre la que se asienta un Estado-Nación moderno, contemporáneo, más si este resulta socialista en el maremagnum de capitalismo que lo rodea, es la que establece los fundamentos de la nación, la nacionalidad, identidad y cultura nacional; el caracter del régimen sociopolítico que asume el país como consecuencia de la voluntad y convicción popular; la estructura de los poderes y los alcances (límites y ampliaciones posibles) de estos, y que, a la vez, garantizan los diversos derechos y deberes de los ciudadanos; traza las líneas legislativas para el resto de las normas que involucran a todos las clases, capas, grupos, sectores, estratos, segmentos, sociales de la sociedad; contemplando la inmanencia y trascendencia de la democracia popular directa y protagónica en su realización no sólo normativa sino práctica.

Sin embargo, ¿el pueblo interviene, cuestiona / interpela, participa, aporta, apoya y decide de manera activa, protagónica y responsable en el Estado y gobierno de la sociedad socialista?

¿Hay mayor socialización del poder, la propiedad y las ideas?

¿No se ha reforzado en demasía los aparatos del Estado, que debe cumplir con las perspectivas de ser un Estado social ampliado, fortalecido relativamente, más democrático y en vías de su extinción?

¿No se han expandido los representantes del Gobierno que, en la mayoría de los casos, son designados a dedo -o con una débil consulta popular como será en el caso de los gobernadores e intendentes- lo que puede traducirse en una democracia formal rutinaria si no se es capaz de cambiar los métodos de elección, que signifique superior validez a la iniciativa, participación y motivación ciudadana?

¿Estos gobernadores (e intendentes), al fin de cuenta, gobernantes y dirigentes, estarán dispuestos a escuchar las demandas de la población y, más que todo, permitir que los núcleos de ciudadanas y ciudadanos en sus provincias comiencen el proceso de (auto)-gobernarse, tomando parte proactiva en las decisiones propias, que permita encaminar, en el proceso de tránsito socialista ‘al pleno y libre desarrollo de cada individuo’ y que el objetivo estratégico sea la obtención del ‘reino de la libertad’ de todos?

Porque el Estado socialista, el de la transición, no puede pretender el congelamiento de los tiempos sociales, que de por si accionan con cierta espontaneidad y asimetría -esta acción espontánea siempre se despliega con flujo y comunicación de ideas, propuestas, y mediaciones organizativas-, y tampoco frenar a la democracia popular con un corte socioclasista estrecho que no sea capaz de cuestionar la forma de pensar y hacer el poder, la política económica-social y cultural dentro de ciertas reglas responsables y comprometidas, porque a fin de cuentas si es un Estado de Derecho Socialista, la política, democracia y la libertad que practica asume con naturalidad los conflictos inevitables que se producen en una sociedad en germen de socialización in crescendo.

La nueva estatalidad -en este caso transitoriamente socialista- es, además, de poder dominante y hegemónico, un proceso de extinción de sí misma, por lo que se transforma en un vehículo de involucramiento y empoderamiento popular democrático, nunca un simple administrador de la sociedad, tampoco con la unidireccionalidad esquemática de los dirigentes / dirigidos, gobernantes / gobernados, sino de superación del momento de estar por arriba de la sociedad, aunque siga siendo una necesidad primaria de intermediación, y, por lo tanto, se transforma en un largo proceso de autodirección social y de producción y reproducción de la vida de los trabajadores y la sociedad.

Si hiciera lo contrario, ese Estado socialista confiscaría el derecho del pueblo a vivir sus contradicciones de toda índole y, por tanto, embargaría la política de los trabajadores manuales e intelectuales, su razón de ser, y también su poder de representación -hasta la delegación- de las masas populares, de facilitador de sus iniciativas, habilidades y capacidades de participar en las soluciones de sus problemáticas, que le atañen más que nadie. Entonces, en ese tránsito, la política como expresión del ‘poder público, -como le denominaba Marx- prosigue el sendero a la política como poder socializado, y por ese rumbo, el encausamiento de la contradicción dialéctica entre lo individual y lo social, hacia la política como expresión del poder social. (22)

El marxista húngaro Istvàn Mészàrov, lo explica de manera magistral: “…la política (con particular peso en su versión que la limita al Estado moderno) usurpa los poderes la totalidad del proceso de toma de decisiones poniéndose a sí misma en esta condición”, por lo que “…la política socialista tiene que consistir en todos sus aspectos, incluso en los más insignificantes, en la tarea de restituir al cuerpo social los poderes usurpados”, porque de lo contrario “…se priva a la política de la transición de su orientación estratégica y su legitimación, reproduciendo entonces necesariamente en otra forma el “substitucionismo burocrático” heredado, antes que creándolo de un modo nuevo sobre la base de un cierto mítico “culto a la personalidad”.

Por lo que, en consecuencia, la política socialista del Estado, con la orientación y conducción del Partido, tiene que recorrer, tal como lo indicó Marx, del sustitucionismo a la restitución o abandona la senda de ser política socialista y, en lugar de “abolirse por sí misma debidamente, [como la extinción de las clases, su lucha y del Estado] se convierte en una autoperpetuación autoritaria.” (23)

Por lo tanto, nuestro sistema y subsistemas políticos, el Partido y la Unión de Jóvenes Comunistas, tienen que aspirar a representar con amplitud y profundidad a la sociedad contemporánea, partiendo que ésta es más plural, diversa y heterogénea.

Debemos comprender que cada grupo y sector social, incluso los nuevos agentes sociales -ya sean privados, cooperativos y estatales, también mixtos-, van creando sus propios intereses, resultando urgente consolidar que existan oportunidades similares para que todos vean representados sus deseos y aspiraciones, a través de controles y equilibrios con contrapesos, que limiten el poder desproporcionado de algunos de estos grupos que puedan ser dañinos a la revolución de forma mediata y a largo plazo. Si no lo hacemos, ese espacio supuestamente social provocará el incremento de la enajenación, la ausencia de un poder político de carácter patriótico, revolucionario y socialista en el seno del pueblo y, lo peor, ese espacio lo podrá ocupar el enemigo de clase interno y externo.

III

La lucha de ideas alrededor de la Constitución, así como los ataques contra los núcleos duros de la Revolución Cubana en la contemporaneidad, comenzaron desde mucho antes que este anteproyecto se discutiera en la Asamblea Nacional del Poder Popular. La andanada de elaboraciones realizadas por cuenta propia o encargos, interpretaciones malintencionadas, confusiones veladas y descubiertas, con neolenguajes acerca de lo que es políticamente correcto y el que no lo es, las posverdades y las ‘fakes news’ o falsas noticias, ha sido incesante desde los años de la década del 90 y se han recrudecido en el siglo XXI y, en especial, luego del inicio de la actualización, que casi todos coincidimos en nombrar como reformas. No porque tales cuestionamientos, críticas e hipercríticas, fueran totalmente novedosos, sino que ahora poseen algunas características singulares, por las circunstancias por las que atraviesa el país y su socialismo. (24)

Algunos, incluso, elaboraron digitalmente plataformas políticas, económicas, sociales, jurídicas y culturales -según ellos sin “pretensiones” de convertirlas en programas de futuros partidos políticos, apostando por el pluripartidismo-, donde lo estético y lo simbólico tampoco fueron simulados, (25) probando persuadir con centrismos inexistentes, convergencias imposibles y nuevas terceras vías ilusorias entre los saberes y las prácticas socialistas con el propósito de retornar ‘suavemente’ al capitalismo ‘con rostro humano’, que nunca se ubicaría igual al de los países escandinavos (estos en su desmontaje actual del ‘Estado de Bienestar Popular’ debido al neoliberalismo), sino acaso muy similar a un país de Centroamérica y, para peor de los casos, con Haití.

Los errores, confusiones y desatinos -claro que también aciertos- de la parte patriótica, revolucionaria, socialista / comunista proviene de cómo se ha aprehendido y comprendido el desarrollo del marxismo y los marxistas en nuestro país. Marx determinó que el primer paso de la ciencia social había de ser la crítica de la crítica, esto es, la crítica de la literatura científica, en otras palabras, la crítica de la ideología subyacente a las formulaciones científicas, valorando donde se encuentra la ‘falsa ideología’, la inversión idealista de una realidad, en la que la “cadena” real y sus “flores imaginarias” deben ser arrancadas, destruidas, para capacitar a los revolucionarios del mundo en el cómo, por qué y para qué emanciparlos de la atadura y recobrar las `flores vivas´, y con ello, entroncar con las corrientes cálidas del marxismo; (26) por lo que el primer paso de la investigación científica ha de ser descubrir las intenciones con las que una teoría se postula como explicación / comprensión de la realidad, para luego corroborarla, o no, en la práctica social concreta.

Por ello, la ciencia social marxista es holista, se basa en la idea de que la totalidad social es una concreta realidad histórica con su propia dinámica de desarrollo.

Como escribiera el filósofo español-mexicano Adolfo Sánchez Vázquez “…la teoría no es sólo lenguaje de la práctica o espejo [crítica al reflejo ‘exacto’ de la realidad] en el que podemos contemplar su rostro; es asimismo un indicador en medio de la marea que apunta a tierras inexplorables de la unidad de la teoría y la práctica”. (27) La teoría no es una variante de la práctica y no se reduce a ella como podría sustentar un practicismo infértil, o un teoricismo mediocre divorciado de la praxis.

Porque muchos autores, concientes e inconscientemente, escriben, leen mal e interpretan peor, porque han traducido el marxismo y leninismo con sesgos e incomprensiones, contaminaciones y simplificaciones, lo que ha conllevado a su vulgarización escolástica, que lo anquilosó y lo declaró cerrado, anti-autocrítico y contrario a la autosuperación. Ese nunca fue el marxismo. Este definivamente, hay que abordarlo con el rigor filosófico y lingüístico, semántico y simbólico, con la prestancia de un aporte teórico – práctico no finiquitado, poniendo atención a los contextos históricos y la total ausencia de religiosidad con respecto a la ideología y la política social, económica y cultural marxista, y también en lo que atañe a la historia del socialismo y el comunismo.

Han sido, en la mayoría de los casos, lecturas incompletas, porque las obras del marxismo en su totalidad no han sido conocidas hasta hoy, y porque casi nadie lo leyó a ciencia cierta con profundidad. Y han predominado las lecturas de pedazos, fragmentos, muchas veces, entrecortadas y discontinuas de sus innumerables textos y autores; así como lecturas instrumentales desde el ángulo de la razón utilitaria del capitalismo -con la preponderancia de un pensamiento reificador que se representa la realidad a través de imágenes cosificadas, deformando el carácter de las relaciones sociales al metamorfosearlas en relaciones entre cosas, como también la instrumentalización del individuo-, y no de aquel que lo percibe, como lo que es, en un proyecto civilizatorio de emancipación humana, racional y ética, contracultural y contrahegemónico al capital; otras lecturas hechas han ido a la búsqueda de citas convenientes para apoyar ideas esquemáticas, fórmulas y consignas pétreas, andialécticas, y realidades a priori, predeterminadas que, muchas veces no podían ser auténticas ni reales; lecturas concebidas para someter a los demás con interpretaciones ideologizantes estériles y fatuas, que conllevaron a su no comprensión y realización plena.

El marxismo y los marxistas auténticos, incluyendo a Marx, Engels, Lenin, sus coterráneos, continuadores y contemporáneos, originales y creativos, constituyeron -y reconstruyen cotidiamente- una filosofía transdisciplinaria, si se quiere una antifilosofía que se contrapuso a las reglas dogmáticas del anterior quehacer filosófico anterior, desde los inicios de la historia de la filosofía, porque resultó mundana (terrenal y cosmopolita, sinónimo de universal, pero sin ser una metateoría metafísica), poseyendo dentro de sus virtudes e irreverencias una cosmovisión crítica de la historia como totalidad; con ideas novedosas como la lucha de clases, motor impulsor del desarrollo, en la cual se inmiscuye radicalmente; siendo al mismo tiempo, una ciencia investigativa poderosa porque es diagnosticadora y propositiva; siendo también una sociología no empírica, positivista y especulativa, sino que adquiere un fundamento teórico y científico indudablemente reforzado con la actividad práctica de los sujetos históricos, sociales y políticos del cambio revolucionario en contextos históricos concretos; concluyendo que es necesaria la crítica de los textos científicos, racionales e irracionales, sucediendo otro tanto con la teoría política que enarbola con punto de vista, concepción estratégica y pluridimensional de la materialidad de la historia, de la praxis y de la historia de las ideas y mentalidades.

Y, sobre todo, es una filosofía novísima de la economía política que no es crematística, administrativa, tecnocráticamente aplicada, tampoco exacta, ni siquiera con la supuesta pureza de la econometría. Por eso, el marxismo continuó el programa crítico al destacar, además del carácter histórico, el social del condicionamiento objetivo de la actividad subjetiva. Habrá que desbaratar la fábula de que no fue el marxismo quien exaltó el papel esencial de lo económico en el mundo moderno, sino que fue el resultado de las elaboraciones oportunistas y revisionistas de algunos de sus paisanos, opositores, adversarios, detractores y enemigos.

Si hubiera sido de esa forma no podía haber sido elaborado el texto más connotado, ‘El Capital’, que comprendió no sólo al capitalismo del siglo XIX, sino que sentó las bases socioeconómicas, políticas y culturales de las leyes o tendencias del desarrollo del capitalismo, sus crisis y las vías de su destrucción. A pesar de las lecturas nada fáciles, fue el marxismo quien advirtió la urgencia de la rebelión contra las determinaciones de lo económico (siempre las consideró ‘en última instancia’), porque tal enfoque unilateral reducía su alcance y posibilidades de hacer la Revolución Social y Política.

De la misma manera, llamó la atención acerca de la cosificación, la fetichización y acerca de las enajenaciones / alienaciones implicadas en la mercantilización de todo lo humano, encontrando en el proletariado industrial, luego la clase obrera, los trabajadores asalariados los nuevos actores de la transformación. Quizás, se hizo, así mismo, restricciones en lo que a las clases parteras de la revolución se refiere, pero hubo otros, como Lenin, que confirmaron la alianza obrera – campesina, con marinos y solados, con las clases subalternas, los intelectuales y los pueblos oprimidos y explotados, primero del Oriente y, luego, de todo el Sur geopolítico. Por eso hoy se habla del sujeto múltiple histórico-social y político de la transformación.

El marxismo no debía convertirse en una filosofía suprahistórica, porque sus fundadores nunca lo pretendieron, ni siquiera en ‘El Capital’ era posible encontrar “…una teoría filosófico-histórica sobre la trayectoria general a que se hallan sometidos fatalmente todos los pueblos, cualesquiera que sean las circunstancias históricas que en ellos concurran”, (28) no obstante, propuso hacer de un movimiento y un ideal justo, una ciencia, el socialismo científico -sin negar la utopía-, que condujera hacia el comunismo. Porque este “…no es un estado que debe implantarse, un ideal al que deba sujetarse la realidad. Nosotros llamamos comunismo al movimiento real que anula y supera al estado de cosas actual. Las condiciones de este movimiento se desprenden de la premisa actualmente existente.” (29)

Postulando que la libertad consiste en que el Estado -el socialista en construcción con nuevas relaciones sociales- deje de ser un órgano superpuesto a la sociedad para convertirse en órgano subordinado a ella, proclamando, sin embargo, la necesidad de la autoridad de las mayorías sobre aquellas minorías que las colonizan, someten y ocluyen, con – la ‘dictadura del proletariado’, con la que se libera él, y con él a las grandes mayorías -, que no era más que el comienzo del fin de la lucha de clases y del Estado, para llegar al comunismo, a la sociedad de iguales.

El objetivo final del socialismo, como etapa de transición, tal como lo concibieron Marx, Engels, Lenin y otros continuadores marxistas creativos, consiste en la gradual extinción del Estado, gracias a la necesaria implantación del poder real del pueblo trabajador como sujeto histórico-político, que emanciparía al resto de la sociedad, y, por supuesto, el tránsito hacia la abolición de todas las clases y a una sociedad sin clases, que también conllevaría a la revocación de la propiedad privada.

Ello conllevará a la formación de una sociedad comunista de ‘productores libres asociados’ en donde “surgirá una asociación en que el libre desenvolvimiento de cada uno será la condición del libre desenvolvimiento de todos”. (30)

En este proceso de tránsito hay que conjugar, en la política revolucionaria – comunista, el arte de lo posible con el arte de hacer posible lo que parece imposible. No bastando con que se busquen formas de resistencia, sino que se tiene que hallar alternativas válidas, por imaginativas y creadoras, en un mundo en el que el cambio no es una opción sino una exigencia. El comunismo, una utopía realizable, es bastante trabajoso y lejano.

En la actualidad, percibiendo que el triunfo del socialismo se conquistó, con éxitos y derrotas, en los países subdesarrollados, se trata de hibridar la cuestión leninista del poder político como elemento clave para la interpretación ejecución de la práctica social, y deconstruir, a la vez, ese poder político en el tránsito socialista desde una democracia radical participativa para optarse por una práctica política fundada en la participación de los movimientos sociales, fuerzas políticas diversas y los demás componentes de la sociedad civil, preocupados por el control y regulación del poder estatal, con la comunidad esencialmente autogestionada, autogobernada y auto-organizada.

Pueblo, cuando de lucha se trata, que sea capaz de potenciar esa descentralización, la planificación económica democrática y socializada, con el debilitamiento y superación del sistema de competencia mercantil, el predominio del mercado y el dinero, pero sin prescindir de estos factores por largo tiempo, en conjunto con un fortalecimiento relativo del Estado dentro de los marcos democráticos respetuosos y razonables del consenso social alcanzado entre todos los miembros de la sociedad. Sin dejarnos arrastrar a la idea, que predominó en el socialismo real, de que un autoritarismo-totalitarismo de Estado sirve para superar el totalitarismo del mercado.

Para ello debe también implicar la valoración de políticas culturales acerca de la urgencia de la paz interna y externa, la solidaridad nacional e internacional, la defensa del medio ambiente, la lucha contra la carrera armamentista y las guerras, así como los avances feministas que coadyuven a la emancipación de las mujeres y, con ello, en la plena emancipación humana. Lo que incluye al antirracismo, anticolonialismo, antimperialismo, antipatriarcalismo, la batalla contra la xenofobia, la igualdad de género, el fin de la violencia contra la mujer y los niños, la misoginia, el respeto hacia la orientación sexual, etc.

Continuará…

Dr. en Ciencias Históricas Orlando Cruz Capote

Investigador Auxiliar

Instituto de Filosofía

CITMA, Cuba.

6 de noviembre de 2018.

Notas y Bibliografía:

(1) Proyecto de Constitución de la República de Cuba, Tabloide, Impreso Empresa de Artes Gráficas Federico Engels, 2018.

(2) Anteproyecto de Constitución. Visión hacia el presente y el futuro de la Patria. Aspectos principales del Anteproyecto de Constitución (2018): periódico Granma, internet@granma.cu, La Habana, 13 de julio; Acosta, Homero (2018): Principales elementos del Proyecto de Constitución: Síntesis de la intervención del diputado Homero Acosta, Granma, La Habana, 24 julio; Machado Rodríguez, Darío (2018): La reforma constitucional, Cuba Debate, La Habana, 29 julio; Romeo, Charles (2018): Como quisiera que la Constitución defina lo que es humano en Cuba, (1), Blog Segunda Cita, La Habana, lunes, 2 de julio; (2018): El proceso de cambiar todo lo que debe ser cambiado, Segunda Cita, La Habana, Jueves, 2 de agosto; Sánchez, Iroel (2018): Nueva Constitución cubana Por una sociedad sin perdedores, La pupila insomne, 2 agosto; Colussi, Marcelo (2018): Transformaciones en Cuba. ¿Socialismo a la china para todos?, Rebelión, 02-08.

(3) Gramsci, Antonio (1997): De “Cuadernos de la Cárcel” (1931), en Portantiero, Juan Carlos Los usos de Gramsci, 54 Cuadernos de Pasado y Presente, Editorial Galache, s. a., México, p. 330.

(4) El Comandante en Jefe Fidel Castro Ruz, en su alegato de defensa “La historia me absolverá”, proclamaría, “…nosotros llamamos pueblo si de lucha se trata”, como concepto y artífice práctico de la Revolución Cubana. Castro Ruz, Fidel (1993): La historia me absolverá. Edición anotada, Oficina de Publicaciones del Consejo de Estado, La Habana, pp. 53-55.

(5) Castro Ruz, Raúl (1973): La nueva estructura del aparato del Comité Central del Partido Comunista de Cuba. Intervención, 4 de mayo, La Habana, en: Castro Raúl (1988): Selección de discursos y artículos 1959-1974, en dos tomos, T. I., Editora Política, La Habana, pp. 213-243.

(6) El debate ha tenido muchas aristas. Hay muestras diáfanas de los que optan abierta o subrepticiamente a favor de las relaciones de mercado, la propiedad privada y a favor del pluripartidismo; otros que pugnan por posiciones diversas y favorables a un socialismo diferente al que se ha construido hasta hoy, así como los que critican duramente al proyecto. Fernández Estrada, Julio Antonio (2018): Una Constitución a la medida del futuro con nuevos derechos, nuevas instituciones y nuevas utopías, Dossier “Por una reforma constitucional con todos y para el bien de todos”, entrevista Julio Antonio Fernández Estrada y Rafael Rojas, Cuba Posible, 02-01; Fernández Estrada, Julio Antonio (2018): No pude pasar mi papelito mis dudas sobre la nueva Constitución, Blog El Toque, 08-06; Almeyra, Guillermo (2018): Una Constitución conservadora, Rebelión, 13-08; Gallego Ramos, José Raúl (2018); Cinco factores que atentan contra el debate del anteproyecto constitucional, Cuba Posible, 08-12; El debate de la Constitución según la prensa oficial: radiografía temprana, Cuba Posible, 08-21; Avivar Cobas, Roberto (2018): Hacia la constituyente socialista, Rebelión, 17-07; Constitución socialista o contrarrevolución capitalista, Rebelión, 16-08; Amuchástegui, Domingo (2018): Domingo Amuchástegui: mis tres propuestas para la nueva Constitución de la República de Cuba, Cuba Posible, 08-06. Pérez, Humberto (2018): Reflexiones y sugerencias acerca del Proyecto de Constitución (II), Segunda Cita, martes, 4 de septiembre; Reflexiones y sugerencias acerca del proyecto de constitución. (I) Sobre el papel dirigente del Partido, El Estado como tal, 06-09, http://elestadocomotal.com/2018/09/02/humberto-perez-reflexiones-y-sugerencias-acerca-del-proyecto-de-constitucion-sobre-el-papel-dirigente-del-partido/; Romeo, Charles (2018): Como quisiera que la Constitución defina lo que es humano en Cuba, Segunda Cita, lunes, 2 de julio; El proceso de cambiar todo lo que debe ser cambiado, Segunda Cita, Jueves, 2 de agosto; Consecuencias a tener en cuenta de una Nueva Constitución Nacional, Segunda Cita, 05-09.

(7) Guanche Saldívar, Julio César (2017): República y socialismo, aquí y ahora: introducción a un dossier, Cuba Posible, 02-20; Fernández Estrada, Julio Antonio y Fernández Pérez, Michel (2017): Informe Cuba Posible: “La institucionalidad del gobierno local después de 2018: gobernabilidad y descentralización”, Cuba Posible, 07-03; Fernández Estrada, Julio Antonio (2017): Reforma constitucional en Cuba. Oportunidades y encrucijadas hacia un nuevo pacto social, Cuba Posible, 28-03.

(8) La economista Piñeiro lo afirma cuando escribe: “…Las observaciones expuestas aquí se basan en el análisis desprejuiciado del discurso público —declaraciones oficiales, debates formales e informales, afirmaciones en medios de comunicación— y publicaciones —académicas, periodísticas— de cubanos en los últimos años.” Piñeiro Harnecker, Camila (2012): Visiones sobre el socialismo que guían los cambios actuales en Cuba, Temas, No. 70, abril-junio de 2012, http://www.temas.cult.cu.

(9) De acuerdo con los economicistas -simples estructuralistas-, el objetivo principal -y lamentablemente el único determinante- del socialismo debe ser el desarrollo de las fuerzas productivas (no como Marx la comprendía, es decir, las clases revolucionarias en el socialismo), entendidas como la capacidad tecnológica para crear más riqueza material, es decir, crecimiento económico, por lo que debe ser entendido como redistribución de la riqueza y sostienen, por ende, que la construcción del tránsito socialista no es posible hasta que las fuerzas de producción se hayan desarrollado lo suficiente: si no hay riqueza no hay nada que distribuir. De ahí que los actuales cambios en Cuba deban buscar, sobre todo, un mejor desempeño de la economía cubana con el fin de poner al país en una senda de desarrollo capaz de satisfacer las necesidades materiales crecientes de la población, argumentando además, que, con una redistribución efectiva -sin percatarse de la interrelación con el modo y las relaciones de producción- de la riqueza, todas las instituciones y modelos de gestión eficientes y productivos son útiles para la construcción del socialismo: «no importa el color del gato mientras que cace ratones». Según las visiones de los economistas más recalcitrantes, la privatización y mercantilización, el mercado y el dinero, claro que con una planificación centralizada y flexible, son esenciales e imprescindibles para el desarrollo económico de cualquier sociedad, socialista o no; mientras que, para los estatistas las empresas privadas y las relaciones de mercado son males riesgosos pero necesarios, que pueden ser domesticados por el Estado socialista fuerte, lo que es una mirada ingenua de la realidad. Los economicistas, con tendencias al poscapitalismo, identifican que las principales causas del bajo rendimiento de la economía cubana radican en la centralización, el monopolio estatal del comercio y la producción de bienes y servicios, las restricciones blandas de presupuesto y la ausencia de incentivos materiales resultantes de la iniciativa privada y las relaciones de mercado. Aunque no siempre lo expresan públicamente, consideran que el modelo de gestión privada capitalista (empresa autónoma, autoritaria, guiada por intereses privados) es la forma más efectiva de dirigir una empresa, y que los mercados son la más eficaz de coordinar las actividades económicas, subrayando, asimismo, la importancia de la eficiencia, argumentan, con cierta razón, que la ineficiencia del sector empresarial estatal, al hacer insostenible las conquistas sociales alcanzadas por la Revolución, afecta a todos los cubanos. Piñeiro Harnecker, Camila (2012): Visiones sobre el socialismo… Ob. Cit; Pérez-Villanueva, Omar Everleny (2010): Notas recientes sobre la economía cubana, Espacio Laical, No. 3, La Habana,;
Díaz Vázquez, Julio A. (2011): Un balance crítico sobre la economía cubana. Notas sobre dirección y gestión, Temas, No. 66, La Habana, abril-junio; Márquez, Orlando (2011): Sin miedo a la riqueza, Palabra Nueva, La Habana, No. 203, a. XIX, La Habana, enero; Vidal Alejandro, Pavel (2011): Desarticular el monopolio de la centralización estatal, Espacio Laical, No. 2, La Habana; López, Félix (2011): Burócratas vs. cambios, Granma, La Habana, 30 de septiembre; (2011): Paisaje urbano y desafíos futuros, Granma, La Habana, 23 de septiembre; Rodríguez, J. A. (2011): Casi se duplican los trabajadores por cuenta propia, Juventud Rebelde, La Habana, 4 de abril; Hautrive, Iliana y Rodríguez Cruz, Francisco (2011): Seriedad define éxito en empleo no estatal, Trabajadores, La Habana, 12 de junio;
Fernández, Oscar (2011): El modelo de funcionamiento económico en Cuba y sus transformaciones. Seis ejes articuladores, Observatorio de la Economía y la Sociedad Latinoamericana, No. 154, Málaga, agosto; Laboratorio Casa Cuba, “Cuba soñada – Cuba posible – Cuba futura: propuestas para nuestro porvenir inmediato”, (2013): Espacio Laical, Suplemento Digital, No. 224, marzo, https://blu162.mail.live.com/default.aspx?id=64855.

(10) Rauber, Isabel (2015): Hegemonía, poder popular y sentido común. Subjetividades e imaginarios interculturales para un nuevo mundo.
El debate cultural alter-hegemónico de nuestro tiempo
, “Diálogos Culturales de Invierno”, El Salvador, 21 de Julio; Valdés Paz, Juan (2015): Desafíos culturales en la realidad actual, Entrevista llevada a cabo por Clara G. Mayra Segura, coordinadora de Comunicación y Eventos de la Oficina Regional Rosa Luxemburg Stiftung, en ocasión del VII Taller Regional de Intercambio de Experiencias organizado por el Centro de Intercambio y Referencia Iniciativa Comunitaria (Cieric), México, 24/10/, http://www.rosalux.org.mx/articulo/los-desafios-culturales-en-la-realidad-actual-de-cuba-entrevista-con-juan-valdes-paz.

(11) “Lineamientos de la Política del Partido y la Revolución para el período 2016-2020”, “Conceptualización del Modelo Económico y Social Cubano de Desarrollo Socialista” y la “Acepción de algunos términos utilizados en la Conceptualización del Modelo Económico y Social Cubano de Desarrollo Socialista y en las Bases del Pan Nacional de Desarrollo Económico y Social hasta el 2030”, El “Plan Nacional de desarrollo económico y social hasta 2030: propuesta de visión de la nación, ejes y sectores estratégicos, Granma digital, 2017, Tabloide, 2017.

(12) Piñeiro Harnecker, Camila (2012): Visiones sobre el socialismo… Ob. Cit.

(13) Valdés Paz, observa con detenimiento y considera que, “…fue muy atrevido, objetivo, justo y político, que Raúl Castro en sus primeros discursos rechazara el unanimismo. Todo el mundo sabe que en ninguna sociedad hay unanimidad. La pretensión de que todos vamos a pensar y a actuar igual era de por sí no solamente una consigna burocrática, sino bastante poco socialista, además de mentirosa, porque no daba cuenta de la realidad. Entonces, ha sido muy importante reconocer que no hay unanimidad, que hay diferencias; porque le plantea al político el desafío de tratar con ellas, de administrarlas, de hacer propuestas y desarrollar estrategias que las incluyan (…) Ahora bien, después de que se reconocieron las diferencias, no avanzamos más, ni siquiera en el sector intelectual. Las aceptamos, pero no nos hemos dedicado a identificarlas, explicitarlas. Los científicos sociales sí han dado cuenta, por ejemplo, de que, bajo el impacto del Período Especial, de las estrategias de salida de la crisis y de las reformas en curso, se está imponiendo en la sociedad cubana un patrón de mayor desigualdad. Es decir, está más o menos claro que somos cada vez más desiguales en términos económicos, posicionales, de oportunidades, etc. Ese puede ser un costo inevitable, son procesos perfectamente observables y pueden ser descritos. Pero tenemos una mayor oscuridad en las diferencias político-sociales, también sabemos que las hay, pero hemos avanzado menos, tal vez porque las ciencias políticas han sido siempre “la Cenicienta” de las ciencias sociales cubanas (…) No hemos dado cuenta de que hay corrientes político-sociales diferentes y de que, incluso, no es solo en el espacio de la sociedad donde obviamente debe existir algún nivel de oposición sistémica, sino que existen también en el seno de la Revolución, en el sector de la población que apoya a la Revolución. Hay diferencias, algunas observables, otras de auto identidad.” Valdés Paz, Juan (2016): El socialismo no puede posponer la democracia que ha prometido, Entrevista concedida a Carolina García Salas y Fernando Luis Rojas, Catalejo, La Habana, 15/4/; Valdés Paz, Juan y Capote Cruz, Zaida (2016): VII Congreso del PC de Cuba Democracia República y Socialismo, Sin Permiso, 17-04; Capote Cruz, Zaida (2016): Me dicen Cuba: A propósito del próximo congreso del PCC, Catalejo, La Habana, 17-04, https://negracubanateniaqueser.com/2016/04/16/me-dicen-cuba-a-proposito-…

(14) En una parte de la entrevista a On Cuba, del 2014, el autor plantea: “…habría que distinguir la oposición ideológica y programática que existe independientemente de intereses foráneos, de aquella vinculada de manera directa o indirecta a la política de otras potencias, principalmente de EEUU. En mi opinión, ambas oposiciones son minoritarias y disponen de escasa legitimidad.” Valdés Paz, Juan (2014): Entrevista a Juan Valdés Paz por Redacción On Cuba, On Cuba, junio.

(15) Recién, el sociólogo y politólogo cubano, Rafael Hernández, ofreció una entrevista a la especialista francesa, Christine Arnaud, publicada en el TopoExpress, que se tituló: Por un socialismo sin miedo, en tres partes, y al mes, el periodista mexicano Guillermo Almeyra, trotskista por más señas, hizo una interpretación libérrima y libertina de ese largo artículo. Ello conllevó que Rafael publicara una ‘apostilla’ en el diario digital Rebelión, para responder y aclarar “…un par de puntos, en un espíritu de diálogo y entendimiento.” La cuestión era seria, porque Guillermo Almeyra había circulado su artículo “Cuba en la encrucijada”, donde el periodista, “…mezcla a lo largo de su comentario lo que digo yo [escribe Rafael] con su propia cosecha, al punto de hacer inextricable lo uno y lo otro.” Con un fino estilo diplomático y de riposta, Hernández expone que “…Reconozco el derecho de cualquier autor a decir lo que le parezca sobre el proceso político cubano, su sistema y su circunstancia actual. De hecho, la mayor parte de lo que se puede leer sobre Cuba, no importa su signo ideológico, goza de esa prerrogativa, reflejo de opiniones y preferencias soberanas, aunque no siempre de dominio y análisis fundamentado sobre el complejo proceso político cubano (…) Como tengo la impresión de que Almeyra, a pesar de las citas indicadas arriba, se propone a veces argumentar en defensa de Cuba y su socialismo, agradezco la oportunidad de aclararlo al autor y sobre todo a los lectores, en un ánimo fraterno, y como diría Inodoro Pereyra (el renegau) a su fiel Mendieta, “para evitar entreveros.” En realidad, la lectura e interpretación de Almeyra fue un disparate y puso en la pluma de Rafael criterios que este nunca vertió. Arnaud, Christine (2018): Por un socialismo sin miedo. Entrevista a Rafael Hernández, director de la revista Temas (en tres partes), TopoExpress, 29-03, 30-03 y 03-04, http://www.elviejotopo.com/topoexpress/cuba-socialismo-sin-miedo-i/, -ii y –iii; Almeyra, Guillermo (2018): Cuba en la encrucijada, Rebelión, 1 de abril, http://www3.rebelion.org/noticia.php?id=239709; Hernández, Rafael (2018): Apostilla a la lectura de una entrevista de Rafael Hernández. Para entender a Cuba: entre la encrucijada y el entrevero, Rebelión, 04-04.

(16) Entre esos autores, los hay quienes realizan entrevistas personales y los citan en sus textos lo que no lo hace fiable científicamente, asimismo, también elaboran sus artículos de forma mezclada, citando trabajos de personalidades científicas y políticas, pero a su vez, con figuras que no son del mundo científico y político nacional, que les restan credibilidad en sus argumentos e interpretaciones, porque no están precisamente en el espectro de la izquierda, además de moverse en terrenos tendenciosos malintencionados. Bayo, Francesc (2010): Transformaciones limitadas y desafíos persistentes en Cuba, © Fundación CIDOB, de esta edición, Barcelona, abril, ISSN: 1697-7688, Farber, Samuel (2014): Tendencias políticas en la Cuba de hoy, Movimento Operario. La página di Antonio Moscato, 07 noviembre; Uharte, Luismi (2015): Cuba: Grupos de poder, estratos sociales y orientación del cambio económico, Alainet, 30/10/, https://www.alainet.org/es/articulo/173332; Keeran, R. y Kenny T. (2015): ¿Vuelve Cuba al capitalismo?, Rebelión, 27 de mayo; Uharte Pozas, Luis Miguel (2016): El cambio económico en Cuba: las bases del nuevo modelo, Revista Electrónica Iberoamericana, Centro de Estudios de Iberoamérica, http://www.urjc.es/ceib; Proyectos contrarrevolucionarios dirigidos a las elecciones en Cuba en el 2018, lunes, 10 de abril de 2017, http://ichef.bbci.co.uk/news/ws/1024/amz/worldservice/live/assets/images/2015/04/23/150423161335_cuba_blog_640x360_epa_nocredit.jpg; Carmenaty Sánchez, Aileén (2016): La subversión político ideológica de Estados Unidos hacia el sistema económico, político y social de Cuba luego del restablecimiento de las relaciones diplomáticas entre ambos países, Tesis de Diplomado, Tutorada por el Dr. Néstor García Iturbe y el Héroe de la República de Cuba, Gerardo Hernández Nordelo, Inédito. Injerencia de los EE.UU. en Cuba, Los dineros del Tío Sam (2017): La pupila insomne, 18 de diciembre, https://lapupilainsomne.wordpress.com/, Grogg, Patricia y González, Ivet (2017): Cuba inicia el conteo regresivo hacia una transición política, Rebelión, IPS, 29-11, http://www.ipsnoticias.net/2017/11/cuba-inicia-conteo-regresivo-hacia-una-transicion-politica/; Alvarado Godoy, Percy (2017): La CIA inicia proyecto contra diplomáticos cubanos, Blog Descubriendo verdades, 17 de noviembre; (2017): Alerta!! Proyectos contrarrevolucionarios dirigidos a las elecciones en #Cuba en el 2018, Descubriendo Verdades, La Habana, Posted by Santiago Arde in Mercenarios, miércoles, 12 de abril; (2018): Propuesta 2020 otro vano intento contra la constitucionalidad en Cuba, Descubriendo verdades, 20 de junio; Sánchez, Iroel (2018): Breve e incompleta cronología de un fracaso, La pupila insomne, 17 mayo, 2018; Rojas Ferro, Diosdado (2018): Cronología o coñología de hechos, o el comienzo de una nueva etapa en la lucha entre comunistas y socialdemocracia/neoliberalismo en el debate político actual, Rebelión, 26-05, https://elestadocomotal.com/2017/12/23/debatiendo-sobre-la-economia-cubana-el-olvido-de-la-reflexion-en-la-critica-politica/; Alvarado Godoy, Percy (2018): Reforma Constitucional y contrarrevolución, Descubriendo verdades, La Habana, miércoles, 1 de agosto de 2018; Monreal, Pedro (2018): Los ciber-inquisidores, el protocolo de la hoguera, y una trompetilla apresurada y seguramente incompleta, El Estado como tal, 05-11, https://elestadocomotal.com/2018/05/11/los-ciber-inquisidores-el-protocolo-de-la-hoguera-y-una-trompetilla-apresurada-y-seguramente-incompleta/; Lagarde, m. H. (2018): Los nuevos revolucionarios de la internet en Cuba, Cuba sí, Sábado, 14 de julio; González García, René Fidel (2018): Los nuevos contrarrevolucionarios, Rebelión, 18-07; Cárdenas Lema, Harold (2018): Los hijos bastardos de la Revolución, Joven Cuba, Julio 17, haroldcardenaslema@gmail.com; Lagarde, M. H. (2018): Harold Cárdenas: El “nuevo revolucionario” confeso, Cambios en Cuba, 20 de julio; Elizalde, Rosa Miriam (2018): EEUU utiliza Facebook para difundir “fake news” de Cuba, Cuba Debate, La Habana, 22 agosto, (Tomado de Desbloqueando a Cuba).

(17) Valdés Prieto, Marta (2018): Constitución, Estado, individuo y sociedad en la Cuba actual, Intervención en el Panel “La prensa cubana en la encrucijada de la reforma constitucional”, Dialogar, Dialogar, Redacción Cubaperiodistas, 29 de agosto.

(18) Constitución de la República de Cuba, Edición Oficial. Ministerio de Justicia. Febrero 1976, Editorial Orbe, Instituto Cubano del Libro, La Habana, febrero 1976; Constitución de la República de Cuba. Nuestras reformas ratifican el rumbo de nuestra Revolución democrática y socialista, Granma, 22 de septiembre de 1992; Guanche, Julio Cesar (2013): Estado, participación y representación política en Cuba: diseño institucional y práctica política tras la reforma constitucional de 1992, CLACSO, Buenos Aires, Argentina; Aquino, Ulises, Cruz Orlando, Guanche, Julio César, Hernández, Rafael (moderador) (2015): Veinte años: la reforma constitucional (1992-2012), Panel realizado en el Centro Cultural Cinematográfico del ICAIC, el 25 de octubre de 2012, revista Temas, nos. 81-82, enero-junio, La Habana, pp. 111-123; Arcia Muñoz, Disamis (2017): Reforma constitucional y sistema político en Cuba, Temas, 29-07, http://www.temas.cult.cu/catalejo/reforma-constitucional-y-sistema-pol-tico-en-cuba; Valdivia, Amaury (2018): Cuba frente a sus debates políticos. Falsa unanimidad, Brecha, 13-03, http://brecha.com.uy/falsa-unanimidad/; Valdés Paz, Juan (2009). El espacio y el límite. Estudios sobre el sistema político cubano, Instituto Cubano de Investigaciones Culturales Juan Marinello / Ruth Casa Editorial. La Habana / Panamá;

(19) Legañoa Alonso, Jorge (2018): Diez puntos clave de la actual Reforma Constitucional en Cuba, internet@granma.cu, 5 de julio; Dacal Díaz, Ariel (2018): Lee estudia e interpela el proyecto de constitución desde tu propio sueño. Diez consejos para un debate constitucional, Blog La Tizza, La Habana, 02-08; Duharte Díaz, Emilio (2018): La nueva Constitución de la República de Cuba ¿solo jurídica? Anotaciones para un debate por la calidad de la consulta popular, Blog La Tizza, La Habana, Agosto 15.

(20) Valdés Prieto, Martha (2018): Constitución, Estado…, Ob. Cit.

(21) García Brigos, Jesús Pastor (2017): Construcción socialista y actualización del modelo económico, Editorial de Ciencias Sociales, La Habana, p. 62.

(22) Mészàrov, Istvàn (2000): Beyond Capital, K. P. Baghi and Company, T. 1, Calcuta, India, p.468.

(23) Toledo Sande, Luis (2018): Nueva Constitución para Cuba: luces y reclamos (I y II parte), Blog Cubarte, La Habana, 10 de agosto; Monreal González, Pedro (2015): Una lectura política del cambio económico en Cuba. ¿Actualización del modelo o reforma del Estado?, Cuba Posible, 01-06, http://cubaposible.net/articulos/actualizacion-del-modelo-o-reforma-del-estado-2-aa5-3-aa8-4-3; Monreal González, Pedro (2017): Un Programa de Estabilidad Económica para Cuba, El Estado como tal, 11-15, https://elestadocomotal.com/2017/11/15/un-programa-de-estabilidad-economica-para-cuba-2/; Pérez, Humberto (2017): Comentarios sobre la unificación de las tasas de cambio en Cuba, Segunda Cita, 20 de noviembre, https://elestadocomotal.com/2017/11/20/humberto-perez-comentarios-sobre-la- unificacion-de-las-tasas-de-cambio-en-cuba/; Carranza, Julio (2017): Sobre un debate reciente acerca de programas para la economía cubana, El Estado como tal, 09-12, http://elestadocomotal.com/2017/12/08/julio-carranza-sobre-un-debate-reciente/; Benavides, Joaquín (2017): Sobre un programa de estabilidad económica para Cuba, Segunda Cita, La Habana, 20 de noviembre; Grogg, Patricia (2018): Un año de incógnitas políticas en Cuba, IPS, 06-01, http://www.ipsnoticias.net/2018/01/ano-incognitas-politicas-cuba/; Veiga González, Roberto (2018): El futuro de la política: ¿incompatible con las plataformas políticas programáticas?, Cuba Posible, 06-03; Rojas Ferro, Diosdado (2018): El enigma Monreal: ¿por qué la empresa propiedad privada y no la empresa propiedad estatal?, Rebelión, 31-01; Guanche, Julio César (2018): Parlamento cubano algunos problemas frente a 2018. La sucesión del poder en Cuba conlleva también grandes desafíos en materia de funcionamiento institucional, IPS, 25-04, http://www.ipscuba.net/politica/parlamento-cubano-algunos-problemas-frente-a-2018-2/; López Velasco, Silvio (2018): El sistema político-electoral hoy en Cuba, Rebelión, 24-04; Guanche, Julio César (2018): Elecciones en Cuba necesidades más allá de los números, La Tizza, 31-01; López, Lennier (2018): Participación política en la sociedad cubana, Cuba Posible, 11-02;

(24) Algunos escriben en distintos espacios de internet -Facebook, blogs, páginas web, etc.,- y han ido derivando en opositores, adversarios y enemigos de la Revolución Cubana, como pueden ser: La Joven Cuba, Espacio Laical, Casa Cuba, Cuba Posible, OnCuba, Bloggers Cuba, El Toque, El Toque Cuba, Voces Cubanas, CiberCuba, Diario de Cuba, BBC Mundo, Havana Times, Voces desde Cuba, 14 y medio, La Chiringa de Cuba, Periodismo de Barrio, Salir a la Manigua, CubaDecide, El Nuevo Herald, Progreso Semanal, Cubanet, Otro 18, etc. Alonso Falcón, Randy (2018): ¿La era de la posverdad o de la multiplicación de las mismas mentiras?: Campañas mediáticas contra los procesos progresistas latinoamericanos, Cuba Debate, La Habana, 16 de julio; González García, René Fidel (2018): Los nuevos contrarrevolucionarios, Rebelión, 18-07; Cruz Capote, Orlando (2018): El mundo del capital en el cual Cuba intenta insertarse, La pupila insomne, 1ro de agosto. Ver cita número 16.

(25) Sánchez Vázquez, Adolfo (1971): “Prólogo”, en Karl Korsch, Marxismo y filosofía, Editorial Era, México, p. 17.

(26) Marx, C. y Engels, F. (1974): La Ideología Alemana, Coedición de Ediciones Pueblos Unidos, Montevideo, y Ediciones Grijalbo, (5ª edición), Barcelona, p. 25; Marx, Carlos (s/f): (s/f) Contribución a la crítica de la filosofía del derecho de Hegel, Obras filosóficas, Editorial Costes, T. I, p. 96; Introducción. Contribución a la crítica de la Filosofía del Derecho de Hegel, Editorial de Ciencias Sociales, La Habana, 1975, p. 14.

(27) Marx, Carlos (1877): “Carta a la redacción de “Anales de la Patria”, (a Vera Zásulich), en, Adolfo Sánchez Vázquez (1988): El marxismo en América Latina, revista dialéctica, Número Especial, Año XIII, No. 19, julio, Revista de la Escuela de Filosofía y Letras de la Universidad Autónoma de Puebla, México, p. 13.

(28) Marx, Carlos y Engels, Federico (1979): La Ideología Alemana, Editora Política, La Habana, p 35.

(29) Marx, Carlos y Engels, Federico (1965): Manifiesto del Partido Comunista (1848), Marx y Engels, Obras Escogidas, en dos tomos, T. 1., Editorial Progreso, Moscú, p. 39.

(30) Marx, C. y Engels, F. (1971): Manifiesto Comunista, Editorial de Ciencias Sociales, La Habana, p. 71.

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34 Responses to El tránsito socialista: rumbo estratégico al comunismo. Unas primeras notas reflexivas inconclusas. (1ra parte). Por Orlando Cruz Capote

  1. Pingback: El tránsito socialista: rumbo estratégico al comunismo. Unas primeras notas reflexivas inconclusas. (1ra parte). | argencuba

  2. Excelente, tanto que no me es posible comentar a priori sin pecar de heurístico. Hay que meditar. Algo si puedo asegurar, en mi opinión este blog esté majorando.

     
  3. Arturo Menéndez says:

    Desde ya espero ansiosamente la 2da parte. Sin duda, el embrollo ideológico y de posicionamiento político en nuestra realidad y, en concreto, alrededor del análisis y discusión del proyecto de Constitución, es muy difícil de desenrrollar. Lo más importante, entiendo modestamente, es que todos, o la inmensa mayoría, salgamos convencidos al final de estos ejercicios de que tendremos la constitución que nos merecemos, perfectible, por supuesto; que logremos enrumbar este proyecto por el camino correcto, contra viento, marea, bloqueos, estupideces … Si mi madre estuviera viva y me estuviera escuchando, seguro añadiría “Dios te oiga, mijo”…

     
  4. Antes de leer con detenimiento el texto, lamento que la vista se haya pirado hacia estas palabras: “Algunos escriben en distintos espacios de internet -Facebook, blogs, páginas web, etc.,- y han ido derivando en opositores, adversarios y enemigos de la Revolución Cubana, como pueden ser: La Joven Cuba….(sigue)”

    O sea, que La Joven Cuba, un blog revolucionario, parece ser que es un antro opositor o adversario o enemigo de la Revolución Cubana, a juicio del autor.
    Si todo el texto tiene ese nivel de veracidad, va a ser una pena que tanto trabajo de “documentación” no haya servido para nada porque me temo, hay errores de bulto.

     
  5. Arturo Menéndez says:

    Me detuve a leer de nuevo el texto y, sobre todo las referencias o comentarios adicionales y, efectivamente, el autor lamentablemente encabeza la relación de los que “han ido derivando en opositores, adversarios y enemigos de la Revolución cubana” con el blog La Joven Cuba. Ya comenté anteriormente que leo con interés ese blog, y aunque muchas veces no coincido con algunas de las valoraciones, no lo considero un blog contra la Revolución. Confieso que me resulta contraproducente esa aseveración con relación a varios párrafos muy interesantes, profundos, críticos, de este concienzudo análisis. No considero sano ese desgaste por controversias que se convierten en ataques, con juicios que pueden llegar a ser ofensivos de unos u otros. Lo sano, lo que necesitamos son estos análisis profundos que calan o tratan de calar en las esencias del marxismo y que nos ayudan a encontrar más luz por donde dirigir nuestros esfuerzos. Los enfoques, los criterios, las valoraciones pueden ser más o menos correctos, al menos sinceros y francos, con la vista fija en los objetivos supremos, si alguno se desvía o se deja adormecer por ciertos cantos de sirena, la fortaleza de los argumentos puede ayudar a despertarlos, si no despiertan seguirán siendo presa de sus errores y es posible que irremediablemente caigan en el lado equivocado. En el análisis franco y desprejuiciado hay más posibilidades de llegar a la verdad. A pesar de todo, sigo pensando que este enjundioso trabajo hace pensar y pronosticar que la segunda parte será aún más profunda. Así sea.

     
  6. Carlos Luis says:

    El amigo milblogs olvida que en LJC han existido no pocos ataques a este blog, no en una nota al pie (la 24 de 30) sino en el cuerpo de textos y él no se ha molestado.

     
  7. Carlos Luis says:

    Y aquí tenemos la oposición, enemistad o comentario adverso al que se refiere Orlando Cruz https://progresosemanal.us/20181108/fihav-y-la-nueva-apuesta-economica/
    palos porque bogas y palos porque no bogas.

     
  8. Rey says:

    Es positivo publicar ensayos en este blog, sobre el imprescindible e impostergable debate politico en torno a la nueva Constitución, que en definitiva, no es más que un debate sobre el rumbo político que tomará el país.
    Un país pequeño, subdesarrollado y de escasos recursos materiales, que lleva casi 60 años intentando crear SU socialismo, en medio de la más brutal agresión imperialista yanqui.
    Un país que SIN socialismo, perdería la soberanía y que tendría que pagar el inmenso precio de una vendetta imperial y una recolonizacion a la moderna.
    Por tanto, no hay espacio para errores.
    Vale y es importante el esfuerzo académico.
    Pero su mayor utilidad es cuando llega a la mayor cantidad de personas posible, sin demasiado rebuscamiento o referencias a lo que dijeron pensadores socialistas, por útiles que sean.
    Ciertamente, se hace imprescindible lograr consensos.
    En la época contemporánea es imposible y muy peligroso imponer políticas, criterios y soluciones, vengan de donde vengan.
    Sobre todo en el caso cubano, país en el cual durante más de 30 años, se desarrolló un auténtico socialismo, no exento de errores ni de copias en ciertos momentos, pero que llegó a mostrar logros concretos comparables a los de los llamados Estados de Bienestar en la desarrollada Europa, salvando lógicos niveles en cuanto al desarrollo.
    En Cuba, es un disparate permiitir de nuevo, como se está haciendo, el desarrollo de una nueva burguesía, mucho peor cuando ocurre en momentos en que la economía estatal centralizada es incapaz de ofrecer opciones más equitativas de vida a la inmensa mayoría de los trabajadores.
    Pero ni siquiera en mejores condicones de la economía estatal se justifica: salvo muy escasas excepciones.
    SIEMPRE la propiedad cooperativa resultará mucho más eficiente y socialmente útil que empresas privadas.
    Es imposible que coexistan en la Sociedad dos paradigmas contrapuestos éticos y económicos, dos maneras contrapuestas de considerar el éxito personal y el sentido de la vida.
    Mucho menos en un país pobre, bloqueado y bajo asedio.
    Tampoco la creación del Socialismo es una Tarea Administrativa que se ejecute por medio de decretos, reglamentos, funcionarios escogidos por otros funcionarios puestos por funcionarios designados por alguien.
    Ni basta controlar con otros funcionarios, mucho menos cuando se les paga tan poco a todos ellos. Sobra explicar por qué razón es una locura.
    La economía cubana y su organización y una parte importante de los actuales y propuestos mecanismoos de gobierno, son copia de lo que se hace en todo el mundo: como se gobierna en el Capitalismo.
    JAMAS saldrá un águila de un huevo de serpiente.
    Hallar el modo en que lo mejor de nuestro sistema, que es su origen en las bases populares, y que estas tomen control real de TODO, auxiliados por mecanismos administrativos, bajo la dirección política y unitaria del PCC y NO dejar a un lado la ideología ni las organizaciones revolucionarias de masas, como lamentablemente llevamos casi 20 años haciendo poco a poco, es buena parte del camino para entre todos, seguir adelante con NUESTRO Socialismo, e ¨impedir a tiempo¨, que el Imperio, con su terrible fuerza, se adueñe de nuevo de esta tierra teñida con la sangre de nuestros mártires por 150 años.
    Hace falta un poquito menos de academicismo y más toma de partido por los Humildes, que desde 1868, 1895, los años 30, la Revolución de Fidel, Girón y hasta hoy, han sido los verdaderos artífices, protagonistas y defensores de la Patria. Y quienes HOY, ahora mismo, esperan que quienes dirigen, los tengan en cuenta para hallar esas soluciones esperadas.

     
  9. Pingback: El tránsito socialista: rumbo estratégico al comunismo. Unas primeras notas reflexivas inconclusas. (1ra parte). – Tacón y Media suela

  10. orlando says:

    La izquierda dentro y fuera de Cuba se ha vuelto muy crítica con la Revolución, lo que no lo veo como un problema, es la contradicción lógica y dialéctica de la vida. Todo puede debatirse y las posiciones todas pueden ser más o menos validas. Y nadie tiene la verdad.

    Lo que sucede con algunos blogs cubanos y otros externos es que cambian su discurso, y a veces son más agresivos, otras veces menos. En esto influye como desean involucrarse en las polémicas y el cómo serán aceptados por un público más amplio o más estrecho. Si son abiertamente adversarios y pierden terreno, pues vuelven a las andanzas de la moderación, lo deliberativo y son pausados.

    La lista de publicacioens que puse no es descalificante. De hecho, tienen un público interesante. No soy un inquisidor, menos alguien que pueda censurar. Emito mis criterios siguiendo textos y autores por un tiempo.

    Tales medios siguen produciéndo, y uno los lee de manera crítica, que no quiere decir que los expulse de las lecturas, no.

    A veces la hipercrítica tiene aspectos que nos haen despertar de ciertas omisiones y errores.

    Por otra parte, el hecho de autodenominarse revolucionario, no quiere decir que lo sea. A veces, hasta páginas oficiales -y otras oficialistas- dicen y escriben cosas que rayan con posiciones liberales y socialdemócratas. Nadie está exento de deslices.

    La joven cuba, el progreso semanal y otros están en esa lista porque sus vaivenes, ambigüedades y vacilaciones, tanto ideológicas como políticas no me permiten ubicarlos dentro de lo que llamamos revolucionarios. Y soy yo quien asumo esa responsabilidad. He leído desastres en Rebelion.org., por lo que me doy cuenta que las porosidades son algo que permea los medios que se autonombran revolucionarios.

    Muchos integrantes de blogs han recibido becas en los EE.UU. y países europeos, latinoamericanos también, y por ahí desandan los descosidos y las paradojas de las variantes de como se escribe sobre Cuba. No digo que lo compren -aunque algunos lo son- sino que las influencias le hacen cambiar los caminos.

    Que nadie se sienta herido. Yo los leo, los busco todos los días. Y ni siquiera me detengo mucho en contestar todo lo que escriben.

    La cultura del debate es algo muy díficil, y no estamos exentos de dar portazos.

     
  11. @Carlos Luis
    El amigo milblogs, presenció a distancia, colaboró un poco, cuando en 2012, los chamas de LJC organizaron el evento “Matanzas, Cuba, los días 27 y 28 de abril de 2012 Encuentro de Blogueros Cubanos en Revolución” y asistí de alguna forma a la confección de listas de posibles invitados…. Comprobé cómo se trataba con respeto y compañerismo a personas como Iroel Sánchez, Enrique Ubieta, Rosa Cristina Báez etc… cómo se contaba con ellas, como…. etc.
    Es decir no me vengan con milongas porque de 2012 a hoy ha pasado mucho tiempo y hasta relativamente poco, no había ningún problema con LJC.
    Cuando Iroel Sánchez visita Alicante y lo acompaño durante bastantes horas, él sabe que soy compañero, amigo de los chamas de Matanzas y ¡ningún problema¡
    Pero…. llega Berlín y ¡Ay qué Cruz….¡ y en este blog, en los comentarios, se difama a miembros de La Joven Cuba y lo hacen personas tan poco cubanas como el canadiense Arnold August que habla de oídas.
    LJC no ha hecho más que defenderse de mentiras, difamaciones y bobadas. LJC era en 2010, cuando surge, un poco antes que este blog, un blog revolucionario, lo ha sido durante estos años y lo más importante, hoy lo es le pese a quien le pese.

     
  12. Santiago says:

    Tiene razón Carlos Luis y lamentablemente el Sr milblogs omite lo que pasó después de esas buenas cosas que pasaron… las cosas suelen transformarse al caminar, lo cuenta muy bien alguien que también estuvo vinculado a La Joven Cuba, llegó la nueva política de Obama…
    Aquí está contado
    https://lapupilainsomne.wordpress.com/2017/02/07/una-respuesta-para-la-joven-cuba-por-javier-gomez-sanchez/
    https://lapupilainsomne.wordpress.com/2018/05/03/la-cosecha-del-coqueteo-por-javier-gomez-sanchez/
    Y algunos cambiaron de senda.

     
  13. Anabel Madiedo Oropeza says:

    Este texto analiza a profundidad la situación actual de nuestro país y citando otros estudios y conceptos científicos nos alerta sobre lo que debemos hacer para mantener las bases de nuestro socialismo, no solo a la hora de plasmarlo en la Carta Magna que estamos debatiendo sino en su praxis, se hace difícil la tarea de encontrar todos los puntos contradictorios y llegar a un consenso que permita la transición hacia el socialismo cubano constantemente agredido por el poderoso imperialismo e insertarlo en el multilateralismo que impone el orden mundial actual, sin olvidar ninguna de nuestras conquistas ya expresadas en el amplio análisis del autor y evitando cometer errores que nos podrían llevar a perder la confianza del pueblo en su Revolución, proceso que en sus primeros tiempos no necesitó de muchas explicaciones teóricas y sí de hechos concretos que empoderaron al pueblo, que rompieron con la estructura capitalista pre-revolucionaria y dieron a los trabajadores las herramientas politicas y económicas para sentirse parte de la clase social proletaria a la cual debe responder siempre nuestro sistema social, no olvidemos lo que ya aquí se debatió… cuando hemos sido capaces de aplicar buenas fórmulas socialistas en determinadas áreas de la vida socio-económica de nuestro país hemos demostrado que nuestro socialismo si funciona, entonces aspiremos a hacerlo mejor, cuenten conmigo, pues la Revolución Cubana me ha dado la oportunidad de hacerlo y lo aprovecho al máximo, sin olvidar que esa misma oportunidad la hemos tenido todos, así de inclusiva ha sido nuestra sociedad socialista y eso no lo podemos perder, sería ‘traicionar la gloria que ha vivido’

     
  14. @Sr.Santiago
    No quiero polemizar respecto a si ignoro u omito esto o lo otro. Tengo la mala experiencia, legible, que si me pongo a tratar de debatir, argumentar, salen toneladas de comentarios y creo que esa etapa pasó. Que en 2012, me fajara con un puñado de contrarrevolucionarios, por ejemplo la impresentable Marlene Azor en el Observatori Crítico de Cuba, donde fui baneado, expulsado, no significa que ahora lo vaya a hacer con personas que defienden la Revolución Cubana, pero lo que no trago es que se falsee qué es, qué defiende un blog y poco más, como es La Joven Cuba.
    De Javier nada que decir. Todo el mundo tiene derecho a hacer muchas cosas, entre otras, comer chorizos uruguayos en casa de Fernandito Ravsberg, el difamador de la periodista Norelys Morales.

     
  15. Un comentario en moderación para responder mínimamente a Santiago.

     
  16. Moderación en línea. ¡Me alegro¡ Algo que no puede hacer La Joven Cuba, donde los comentarios quedan en un limbo digital horas y horas porque es todo lo contrario a los famosos moderadores 24 horas que tenía el contrarrevolucionario blog de la mercenaria Yoani Sánchez. Espacio donde en 2009 empecé a participar en el contexto de la solidaridad con Cuba, frente a la campaña mediática que se montó… y que tuvo en 2010 su punto más problemático.Naturalmente, “los equipos de la Chica Lista” me banearon tanto de GY como del blog que se montó en El País/Internacional…y al que llamó “Cuba Libre”. Ese blog, desapareció, como espero lo haga más pronto que tarde, ese engedro de Kakita 14 y medio.

     
  17. Carlos Luis Hernández says:

    Gracias, Santiago, por refrescar la memoria que a veces se pierde y me animas a recordar que según se comentó por aquellos tiempos fue Harold Cárdenas el que llevó a Javier Gómez a comer chorizos en casa de Ravsberg pero parece que eso tampoco lo recuerda el amigo milblogs que se acuerda de que Javier estuvo allí pero omite que Harold lo llevó. Mala memoria que tienen algunos.

     
  18. Mi último comentario de este jueves 8 de noviembre.
    Señor Orlando Cruz: una cosa que genera confusión es tratar de meter en el mismo saco a medios tan radicalmente distintos como La Chiringa de Cuba y cubanet.org por poner dos sitios totalmente opuestos: el primero es un blog cubano más, un blog que defiende el socialismo cubano y el segundo un sitio financiado por el gobierno de los EEUU con el objetivo de todos conocidos.
    No entiendo bien qué puede justificar mezclar churras con merinas.

     
  19. Era el último comentario, pero parece que no es así.
    Señor Carlos Luis: obviamente mucha información la desconozco, pero eso que usted dice, claro que sí lo tenía presente, pero que fuese Harold quien mediara no significa que la realidad es que esa “foto” de enorme satisfacción, por haber sido invitado, uno más porque son más los de la merendola, muestra que cuando se produce esa jamadita, hay sintonía entre “colegas” y resulta que en ese momento, había llovido mucho…¡mucho¡ desde que Fidel avisó tras la polémica por los apagones, de que el hoy desaparecido Fernandito era el …¡no recuerdo¡ Por cierto, Fernandito, junto con Yoani Sánchez y los chamas Protagónicos, son los únicos editores de medios cubanos que han tenido la gentileza de censurar mis comentarios. No lo hizo ni El Pequeño Hermano, el inmaduro Esteban Morales Licea.

     
  20. Carlos Luis Hernández says:

    Creo que el comentario orlando del 08/11/2018 a las 12:37 pm le lleva la escalera con brocha todo, a quien quiso desacreditar su texto por una nota al pie, lo de ja al pie de la escalera. https://lapupilainsomne.wordpress.com/2018/11/07/el-transito-socialista-rumbo-estrategico-al-comunismo-unas-primeras-notas-reflexivas-inconclusas-1ra-parte-por-orlando-cruz-capote/ Le recuerdo a milblogs que hay muchas formas de financiar, incluyendo becas en EEUU como la recibida por uno de sus amigos de LJC. Orlando lo dice muy bien pero parece que el amigo milblogs no leyó: “Muchos integrantes de blogs han recibido becas en los EE.UU. y países europeos, latinoamericanos también, y por ahí desandan los descosidos y las paradojas de las variantes de como se escribe sobre Cuba. No digo que lo compren -aunque algunos lo son- sino que las influencias le hacen cambiar los caminos.”

     
  21. En internet, en la blogosfera cubana, en otros medios.. hay toda una caterva de personajes que pagados o no, se desempeñan para favorecer los mezquinos proyectos de EEUU de cambio de régimen en Cuba y se manifiestan con más vehemencia o con menos, con torpeza o con sutilezas.
    Frente a esa contra, esa contrarrevolución, están los medios, las personas, las acciones que sin medias tintas defienden el socialismo cubano y uno de esos proyectos se llama La Joven Cuba blog.
    No hay más cera que la que arde.

    Tratar de meter historias como las de disfrutar de una beca, una invitación, asistir a una Conferencia en Marruecos, sin mencionar otras asistencias y sobre todo, lo más importante, los cientos de artículos que defienden el socialismo cubano, es sencillamente tragicómico por no decir algo más fuerte.

    Los mercenarios, los “pagaditos” como me dijp Zenia Regalado de Pinar del Río en 2007 acerca de la sinvergüenza de Yoani Sánchez, son personas perfectamente identificables y les une su interés por defender el acoso y derribo de EEUU respecto de Cuba.

    ¿Influencias? Uffff eso es cierto. Dentro de unos días, Cuba va a recibir al presidente español, un socialista, que posiblemente sea una mala influencia porque en su partido, son muchos los que se llevan no mal, peor, con las personas de ideología comunista y sin embargo, Cuba va a recibir al joven socialdemócrata, progresista o no se sabe qué es el PSOE y nadie va a poner el grito en el cielo por ese encuentro y por las “lecciones” que el gallego pueda dar en La Habana o por el precio de “la financiación” que España trae en la cartera.

     
  22. Tres veces leí el artículo publicado aquí… He hecho un esfuerzo tratando de armarlo como el rompe cabezas en que sus piezas sabiendo que están sobre la mesa, algunas de ellas no logro descubrir… ‘Tránsito socialista’ es lo que para mi significa que todavía estamos en Revolución viva… Dentro del propio proceso que muy bien marchaba, aunque se sentían los estragos, y se sienten, del criminal bloqueo a nuestro pueblo, hubo lo que llamaría un buen cubano, un tremendisimo traspiés, el derrumbe del Campo Socialista nos acorralo durante un buen tiempo, el llamado PERÍODO ESPECIAL…. Fidel, hombre visionario, expresó antes que comenzara esta crisis que habría una etapa en que se tendrían que aceptar lo que en otro tiempo no se hubiera permitido… Se superó la crisis, pero dejó SECUELAS que de no solucionarlas, entonces entraríamos en peligro, porque nuestras nuevas generaciones no conocieron el capitalismo ni esa maravillosa etapa que conocimos como la primera de la Revolución cubana… Sugiero, como el buen sabiondo y autosuficiente, que mientras no se levante el Bloqueo y se fortalezcan las Organizaciones de Masas y el Partido, no tenemos otras alternativas que mantener la Revolución VIVA con FUERTE LIDERAZGO… Cuba, su pueblo, nuestra Revolución, están atados de mano y pies… Y los pasos en falsos nos hundirán… El título del artículo es lo que hoy se vive, salirse de ese camino, es suicidarnos… Ah, y cuándo escribí LIDERAZGO FUERTE, es lo único que pudiera limpiar, eliminar, la corrupción del ‘piso’, PORQUE EN CUBA EXISTE LA CORRUPCION EN CASI TODOS LOS FRENTES DE LA SOCIEDAD, no podemos permitir que avance, eliminarla por completo CON MANO DURA… Gracias por leerme… Marcos Jesús…

     
  23. orlando says:

    De forma lamentable algunas partes de mi artículo han formado revuelo y ocasionado porfías.

    Solo una aclaración, para mi no es lo mismo opositores, (disidentes menos, pues es un término que nos dejamos robar, porque disentir no quiere decir contrarrevolucionario), que adversarios y enemigos. Por eso, nombré, esas tres categorías. Y pueden haber más: criterios y posiciones diferentes, etc. Quizás, los puse en un saco por artículos que aparecieron en los blogs, o porque al leer entrelíneas percibo las sutilezas de algunos planteamientos.

    Pero la razón del artículo está en lo demás. La polémica es buena, pero vuelven a sacarse los trapos rotos de un “pasado que ya no fue” y un presente que no es pero parece.

     
  24. Decirle al profesor Cruz Capote, que he tratado de entender, más allá, de mi interés particular en saber si mis amigos de LJC son “opositores” “adversarios” o “enemigos” de la Revolución Cubana , el tema central, la “razón del artículo” y ciertamente no lo he conseguido a pesar de mi lectura sosegada, tratando de ser lo más comprensiva posible. Tal vez sea porque se abordan muchos puntos, el texto es muy largo y hay una cara a (de afirmación) y una cara b (de crítica) que se intuye, pero el lenguaje académico casi propio de una tesina, impide ver con claridad esa “razón del artículo” más allá de comprobar que se considera hoy en día, que Cuba puede estar camino del comunismo, lo cual creo que está muy lejos de la realidad y ahí está el mismísimo texto de proyecto de reforma constitucional que modifica de forma sustancial el actual artículo 5 y ese final del mismo que habla de “…los altos fines de la construcción del socialismo y el avance hacia la sociedad comunista.”

     
  25. Tocororo says:

    He leído con mucha atención el post de Orlando Cruz Capote, bueno lo he releído varias veces y he hecho apuntes, y reflexionando en los énfasis que le da, después diseccionándolo y finalmente creo que comprendiendo la profundidad que tiene, porque llega tan profundo que toca el meollo del asunto, el tétano del hueso y yo también espero con gusto la segunda parte de este trabajo.

    Además de esto hay comentarios brillantes de los compañeros foristas como Rey, Arturo Menendez, Giordan breve pero claro, Santiago aportando como siempre, Carlos Luis aclarando situaciones, como siempre también y Milblogs debatiendo por el punto 24 abre discusión y defiende aquí en la Pupila la “integridad” de LJC, pero Milblogs, tu forma en tu primer comentario no me ha gustado como te expresas con cierta calentura hacia el trabajo del autor, que es la esencia del post, en donde no cita para nada el blog que defiendes porque es, digamos en el índice, en el punto 24 a modo de relación y consulta, donde aparece LJC junto con otra serie de blogs contrarrevolucionarios, eso es cierto y posiblemente se podría haber evitado tal cosa, el propio autor Orlando escribe algún comentario posteriormente explicando esto en forma positiva, pero le has hecho caso omiso, hasta ahora que veo un comentario tuyo para Orlando.

    Pero bueno Milblogs, mi comentario espero no lo tomes sino en tono positivo y respetuoso porque creo que entiendo el porqué de tu posición, y mira por dónde pues ya que pones en la fogata este asunto y sin sacar trapos al aire, ni cogerle las pinzas a la vecina para colgarlos a que se sequen, pues yo aprovecho para dar mi opinión al respecto amigo Milblogs, lo de amigo no lo digo con doble intención ni comillas, lo digo cordialmente, porque así lo siento. En mi opinión no se puede estar con Dios y con el diablo, eso mismo pero en otras palabras te dijo Carlos Luque en un comentario en cierto post que interviniste, y aunque dicen que hay que tener amigos hasta en el infierno yo prefiero a mis amigos que mandan al infierno a quien se lo merece, digo esto porque yo también sigo diferentes blogs de todo tipo y tendencias pero solo como lector, no participo en ningún foro como comentarista, solo aquí en la Pupila Insomne, soy pupilero en esencia. Por la razón que digo, obviamente leo LJC y recibo al leer a ciertos autores que presentan sus trabajos, mis propias sensaciones que aquí no voy a decir, y luego está el postre, la guinda, la nata, y el bizcocho, de los comentaristas, donde entre ellos te encuentras tú rodeado y sorteando los alacranes que invaden a pululu ese foro, pero por otro lado pugnando “cariñosamente”, así parece al menos, con el que llamas “chinito pillo” al que yo reservaría otra denominación de origen y de modo contundente. Personaje penoso donde los haya, de jodedera y de chiste fácil, que anda creyéndose, imaginándose y queriendo hacer creer a los demás poniendo en su boca con lenguaje misterioso, las historias y anécdotas de otros que “aterrizaron” en Miami con un prontuario renegado, traidores y de “fácil” conformar, y que el ATB, alias chinito pillo, como tú milblogs le llamas, que como vividor consumado que es tu pillo chino, y con cierta habilidad para ponerse en la foto y hacerse un selfis con el personaje “histórico” que fuera necesario, a ver si cubría “rol” para poner luego en boca propia lo que otros le contaban y así cubre sus historietas de super-agente 066, aleccionado por su curriculum en Ecured, a la vista de quien le interese. De todos modos en la gusanera de Miami era sencillo para alguien como tu amigo pillo congraciarse y hacer “amistades peligrosas” y vacilar quien la tiene más grande y mentir con el número de peces que han pescado, “Miami came back wrong”. Como colofón sacar en la LJC el obituario de un personaje que se fue hace poco “ad eternum profundis”, un tal Florentino Aspillaga Lombard, un desertor que perteneció a las servicios de inteligencia cubanos allá por la década de los 80, y que como todos los que dan ese paso, quiso tener su cuarto de hora y vivir de los réditos y habló un reality show dando a entender que una supuesta “red avispa” en Miami intento asesinarlo, como se recoge en el libro de Latell, en fin sin entrar en este personaje que ya “marchó” ni tampoco en tu mencionado “amigo” porque seguir hablando de este personaje implica que se crea lo que no es, pero debo confesar que me divierte darle muela. El problema que veo desde fuera para el blog que defiendes extramuros, como si fueras Flash Gordon, es que parece que de un tiempo a esta parte alguno de su alma mater esta deshojando la margarita todos los días, preguntándose: “seré o no seré” y eso implica carácter finalmente, de todos modos él sabrá en su interior de que va la cosa, pero creo que un conocido y amigo suyo, Chachareo, a quien respeto y aprecio por su entereza, sabe bastante sobre los secretos inconfesables del becado alma mater. Yo no te estoy cuestionando que LJC no sea un blog revolucionario, no lo haría de ninguna manera, pero una cosa te digo, si cualquier foráneo se pone a leer el blog con ciertos autores y la jungla de desgraciados y rencorosos, matutes SMG (sin mayor gloria) de la mayoría de comentaristas, que cubanos muchos de ellos apoyarían una invasión militar a su propio país, y esto me da mucho que pensar, porque los cubanos que pueden no estar de acuerdo con la revolución incluso ser adversarios, nunca apoyarían algo así, porque Cuba no se toca, me recuerda a los escuálidos vendepatrias de Venezuela que apoyan una agresión a su país con tal de acabar con la Rev. Bolivariana, y así se ven esos comentaristas, salvo la excepciones honrosas de algunos, tú entre ellos. Así que la impresión que se llevaría alguien que leyera LJC como digo más arriba y fuera forastero o neófito, es bastante dudosa, los que conocen de qué va la cosa pues lo leen con gusto o sin más, pero la impresión que da es que pareciera un sitio para dar cancha a vomitar sus flatulencias esos “incorregibles” que de ninguna manera tienen ni acceso, ni voz en la Cuba revolucionaria y socialista, y el “chama” de forma pontifical rebatiendo los comentarios que le parece, para dar cierto “color” al blog.

    No quiero extenderme más, porque diría muchas todavía, pero hay algo que no funciona en todo ese esquema amigo Milblogs, el tiempo hablará como siempre y pondrá a cual en su lugar, con Cuba siempre ha ocurrido así.

     
  26. @Tocororo
    Voy a hacer algo que nunca he hecho: en un comentario breve, expreso lo que he sentido al leer el largo comentario tuyo: ¡magnífico¡

     
  27. Y ahora viene tratar de decir algo con sentido.
    En primer lugar, tras leer una sola vez tu comentario, Tocororo, he pensado que todo lo que estaba leyendo era correcto, era un excelente comentario escrito creo con mucha objetividad y aporta muchas cosas interesantes que seguro no voy a ser capaz de responder, contestar, comentar con tanto acierto como lo que he leído. A ver si logro expresarme con claridad:

    Lo más importante sobre el tema LJC, y es algo que nadie aborda con claridad y tampoco lo hace Tocororo, es ¿qué motivos hay, qué textos, artículos, entradas, post, etc como se les quiera llamar, publicados en La Joven Cuba, dan a entender que algo no cuadra? Sinceramente, me gustaría leer algún artículo publicado donde sea, que analiza textos, ideas, afirmaciones que pueden dar a entender que ese blog puede considerarse “dudoso”,

    Por el contrario, los “ataques” a LJC, no vienen precisamente de lo que han publicado varias decenas de personas, incluyendo a Javier Gómez Sánchez, y que realmente no expresan una línea ideológica del blog, sino más bien son textos personales, de cuyo contenido se hacen responsables sus autores y solamente tiene en común, que pasan por el filtro de alguno (no uno) de los editores del blog que considera pueden publicarse dado que “entran” en la línea editorial de esa sencilla bitácora colectiva, primero de cuatro personas, entre ellas el editor del blog El Blog de Edu, y actualmente dos editores principales, uno de ellos Osmany Sánchez, comunista cubano y destacado militante del PCC en el contexto de la Universidad de Matanzas. Ahora mismo, ignoro si además de ellos dos, otros colaboradores que sí se consideran miembros de LJC, son también editores.

    Es decir, trato de decir, que no es de recibo trazar un perfil de dudas por asistencia a eventos, por disfrutar de una beca, por “meterse en la casa del diablo un par de veces” o por un par de fotos con unas personas que dicen que no los financian los malos pero que no ven mal que Soros y Cia echen una manita…
    ¿Ha dicho eso alguna vez La Joven Cuba? ¿Ha recibido LJC dinerito directa o indirectamente para mantener el blog, para pagar algún informático como decía que hacía Fernandito, para pagar a alguien que “mueva” el posicionamiento web del blog o la cuenta de Twitter, etc , dinerito procedente de quienes promueves el cambio de régimen en Cuba¿

    Esa es la cuestión principal. ¿Qué se dice en LJC que no casa con el socialismo cubano, con las ideas esenciales que son seña de identidad de la Revolución Cubana? Ahí se debería discutir, señalar, denunciar si fuera necesario… Pero venir con el cuento de que en Berlin hay una izquierda que no lo es, que además acepta financiación de RSF para unos actos, que una reunión se hizo en un local que lo mismo paga The Open Society Foundations, etc… eso vale bien poco.

    En lo que he expresado está a mi parecer, el terreno donde discutir. Más allá, es anécdota, jodedera cubana como ustedes dicen en Cuba, cosas a veces raras difíciles de comprender, etc. y que muchas de ellas tienen su explicación.

    El asunto, muy importante y que tuvo bastantes consecuencias personales, muy desagradables, que leo sobre la participación de personas contra revolucionarias en LJC, es algo que viene de 2010 cuando el blog surge. No es momento de explicar qué pasó y por qué esas personas tuvieron “un mural gratis” para hablar pestes de Cuba. Eso hace años que acabó: esas personas están baneadas y no son dos ni tres… Hoy mismo, el famoso “JDS alias JSLD”. puede comentar en La Pupila y no puede hacerlo en LJC, no por capricho sino por lo mismo que también ha comentado aquí muchas veces uno que usa frecuentemente la frase “Qué clase de mierda son los comunistas” cuando cree que puede hacerlo….

    Cuando una persona de fuera entra en el blog, es cierto que si aterriza en uno de los artículos críticos con hechos concretos (la pelea de Tatu con el Salón de la Fama, con muchos aspectos del deporte cubano) o con artículos que cuestionan temas generales como la separación de poderes y la existencia de una Sala específica para resolver en última instancia -el Tribunal Constitucional en España-, etc. pueden pensar que han entrado en un blog “dudoso”. Que eso lo piensen personas sin la información necesaria, es comprensible, porque desgraciadamente, leer textos críticos con el día a día cubano, escritos desde el sector que defiende el socialismo, la Revolución, no es muy frecuente y menos hace ocho, siete, seis años….

    Respecto al “pobre y penoso Señor Tang” como suelo usar cuando intercambiamos, la cosa es muy sencilla: cuando conozco quién era el Chino, dónde estuvo, qué hacía, cómo lo vapulea la agente de la seguridad cubana, etc.. naturalmente es persona no grata. Sin embargo, ha llovido mucho desde entonces y Antonio Tang hoy nada tiene que ver, nada le relaciona con la contra cubana. De hecho, es persona que respeta el código de participación del blog, se le anulan decenas de comentarios que no vienen a cuento, pero lo más importante, como opinión personal, no tiene la mala leche, en absoluto, que manifiestan falsos comentaristas que entran al blog para joder y eso nunca lo ha hecho el “chinito pillo”.

    Esto se podría alargar y cierro con esto que también es personal: te agradezco Tocororo tus palabras, porque por ahora sé leer y creo que tú también. Hay algo a tener en cuenta y es que desde 2010 me considero uno más que pone su granito de arena, mi blog Acerca de Cuba y mi participación en blogs cubanos enfrentado directamente con gentuza anticubana (por ejemplo en el blog del periodista Francisco Rodríguez años atrás..), pero no soy comunista, no tengo relación con nadie “de los que mandan” y encima a veces digo cosas que por ejemplo, no acepta para nada Osmany Sánchez como eso de que me gustaría ver prensa en los kioskos de prensa, e incluso ver más siglas en la ANPP. Pese a ello, soy uno más defendiendo el derecho del pueblo cubano a elegir su proyecto social, su soberanía, el sistema político que más le convenga y viendo las cosas, será sin duda el socialismo cubano revolucionario durante muchos años.

     
  28. Lo que más me llama la atención es leer en ese medio tan cercano al Open Society de Soros, además de que publiquen un texto que proviene del sector “constitucionalista” cubano, es ese medio resumen que denominan Presentación, y “alguien” ha sido capaz de trazar un breve esquema de lo que aporta el texto, algo que un servidor no ha sido capaz.

     
  29. Rey says:

    Defiendo la libertad de expresión. Lo que no me parece nada bien es haber convertido lo que pudo haber sido un provechoso debate en torno al sin duda útil e interesante artículo del compañero Orlando, en una inapropiada escaramuza sin sentido en torno al blog “La Joven Cuba”.
    El cual, además, por mil razones diferentes, tiene escasos lectores dentro del país.
    Hubiese bastado por parte de quien comenzó con ese combate, expresar en un comentario su muy respetable opinión y ya.
    Cuando se discuten asuntos de la mayor importancia para la Patria como es el actual Proyecto de Constitución, donde como muy bien expresa el artículo, confluyen, chocan y confrontan gran número de enfoques diferentes, no debemos abrir brecha al poco útil escarceo sectario.
    Es casi tan absurdo, como que en medio de un combate contra un desembarco yanqui, hasta los propios marines detuviesen su ataque, para divertirse mirando a un grupo de soldados cubanos cayéndose a trompadas.
    Y el simil no es gratuito.

     
  30. Carlos Luis says:

    ¿El amigo milblogs olvidará, como hizo su anigo Harold de LJC, que Cubaposiblees un instrumento de guerra sicológica para dividir a los intelectuales cubanos? Sabiendo eso no hay nada curioso sino confirmativo en su actuación.

     
  31. Carlos Luis says:

    Muy bien por Rey. Quien hace lo que tan bien él describe y luego trae chismes desde el celebérrimo Cuba Posible, al igual que hace de lleva y trae con LJC repite el mismo objetivo que más arriba señalé: DIVIDIR.

     
  32. Dos cuestiones en un mismo comentario: la primera y más importante es que en un foro abierto como éste, hay que tener más manga ancha y ser capaces de entender que si hay un tema central que lo proporciona el artículo donde se publican comentarios, de ese tema es sin duda sobre lo que hay que discutir, pero que aparezcan comentarios sobre otros temas, o tratando de matizar algo concreto, esos comentarios no impiden en absoluto que el debate se centre en el post y en los temas de la entrada que sea. Lo de “dividir”, perdonen quienes piensen así, es un poquito paranoico y objetivamente equivocado, pero como dice Rey, existe la llamada libertad de expresión y unos límites que por supuesto no he traspasado.

    La segunda cuestión se refiere al comentario de Rey diciendo que LJC tiene escasos lectores dentro de Cuba. No conozco ninguna herramienta de internet fiable para conocer audiencias y desde hace años utilizo la información que proporciona Alexa del Grupo Amazon. Los datos de Alexa, unas veces favorecen a unos sitios, otras veces es todo lo contrario, y por supuesto desconozco si se cocinan, se manipulan, etc. Como llevo años siguiendo esos datos de bastantes sitios, sí parece que al final, aproximadamente, dan una idea de acceso a los sitios consultados. Por ejemplo al consultar el Top 500 Cuba, hay mucha lógica en esos datos. Dicho esto, comparen los datos en Cuba de LJC con otros blogs similares y verán que tiene datos bastante correctos (1) Además de lo dicho, una selección de artículos los editan los chamas de Matanzas en forma de Revista en pdf si no me equivoco y se distribuye a través del Paquete Semanal y eso supone un buen número de lectores potenciales. (2) Una ausencia importante es la no existencia de una versión del blog matancero alojada en Reflejos, como existe con La Pupila Insomne http://lapupilainsomne.jovenclub.cu/

    (1) El seguimiento de blogs cubanos.sobre todo, me resulta muy sencillo dado que tengo instalado el Alexa Traffic Rank y conozco al instante los dos datos que me interesan, el Rank Global y el Rank Cuba.

    (2) La última Revista LJC #20 se centra, el editorial, en la “lucha contra el bloqueo y en especial la votación masiva que hace la comunidad internacional en su contra cada año en las Naciones Unidas.”

     

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