El próximo viernes 3 de octubre será la novena edición de nuestro espacio La pupila asombrada. Esta vez tendremos el honor de ser parte del Festival de Música de Cámara Leo Brower y además de la actuación del trovador villaclareño Leonardo García, se presentará la antología sobre la trova tradicional cubana De cualquier flor, elaborada por Bladimir Zamora y Fidel Díaz Castro junto a la más reciente edición de la revista El Caimán Barbudo que contiene una entrevista de Joaquín Borges Triana al maestro Leo Brower.
El Festival y la FEU están convocando a los asistentes a nuestro espacio a un intercambio de libros relacionados con el tema de la música en su sentido más amplio. Tendremos los habituales videos musicales que estarán disponibles en nuestro WiFi que contará con su chat habitual y muchos contenidos de video, música y libros junto a algunos de los materiales más vistos este mes en La pupila insomne.
La pupila asombrada se realiza los primeros viernes de cada mes, entre las 6:30 y las 9:30 pm, en “El Hueco” del Instituto Internacional de Periodismo José Martí”, 21 y G, Vedado habanero, con el auspicio de esa institución y la Federación Estudiantil Universitaria.
Ve desde temprano que ya el espacio se ha vuelto pequeño y no olvides llevar tu libro de música o poesía para vivir y soñar.
Cabe preguntarse por qué ningún dirigente de la cultura ha asistido siquiera a un evento de este VI y último Festival de Música de Cámara Leo Brouwer. Ya no para apoyarlo, siquiera para disfrutar de los conciertos excepcionales que nos regala este evento, sin duda entre los más importantes de su género en todo el mundo.
Gracias, Silvio, por hacerte presente en este espacio que, como sabes, te pertenece y debe, al igual que la peña que junto a El diablo ilustrado hacemos cada mes.
El Festival Leo Brower es un enorme lujo que nos podemos dar los cubanos y merece el apoyo y la solidaridad total. Por eso cuando Isabelle nos convocó para sugerirnos la idea de incorporar la edición de octubre de La pupila asombrada al programa del Festival nos sentimos honrados. No imagino tener la oportunidad de ser parte -aunque sea mínimamente- de semejante regalo para nuestro pueblo y no dar cien pasos al frente para apoyar con todo lo que la autoridad artística e intelectual de Leo Brower puede colocarnos por unos días ante los ojos y los oídos y que en otras latitudes sólo está al alcance de quienes pueden pagar altas sumas por disfrutarlo.