El mercado editorial de Estados Unidos está cerrado para los autores cubanos que residen en la isla y las publicaciones hechas en la misma, denunció en esta capital el Ministerio de Cultura de la nación antillana. El vacío por la falta de información de las instituciones estadounidenses sobre el proceso literario cubano es ocupado por autores emigrados que escriben contra la Revolución y los presentan como “literatura cubana”, lo que constituye una maniobra política, asegura un informe sobre los principales daños causado por el bloqueo de Estados Unidos en el sector cultural.
En la edición 25 de la Feria Internacional del Libro de Guadalajara 2011, en México, los organizadores advirtieron a bibliotecarios, libreros y distribuidores estadounidenses presentes en el evento, que se abstuvieran de adquirir libros de cualquier tipo producidos en Cuba, pues el Gobierno de esa nación sancionaba tales compras, expone el documento. Esa prohibición es extensiva también a la venta de editoriales y comercializadores estadounidenses, quienes no pueden firmar contratos o recibir pagos de instituciones cubanas.
Revistas y otras publicaciones periódicas también cerraron su flujo en ambas direcciones, y la más reciente medida fue contra el mayor distribuidor estadounidense de estos artículos, EBSCO Subscription Services, quien quedó imposibilitado, desde diciembre de 2006, de efectuar o recibir pagos desde Cuba, o través de terceros, y debió cancelar los pedidos.
Desde esa fecha, las universidades e instituciones de Estados Unidos no reciben tales servicios, a pesar de que fueron rigurosos en el cumplimiento de medidas restrictivas que le impedían hacer distribuciones masivas, sino las publicaciones cubanas eran para el fondo de las bibliotecas.
Gestiones especiales permitieron la asistencia de representantes cubanos a la Feria del Libro de Puerto Rico en el 2011, donde con gran éxito se presentaron títulos de Ediciones Cubanas, pero a pesar de ello el bloqueo motivó las cancelaciones de contratos con algunos clientes de ese enclave colonial, como Forsa Editores y la Universidad de Puerto Rico.
El informe enfatiza en el recrudecimiento de las medidas durante los últimos años, y ejemplifica que en los intercambios culturales y comerciales las contrataciones excepcionalmente autorizadas se redujeron en más del 85 por ciento con respecto al 2001.
De acuerdo con autoridades cubanas, el daño económico ocasionado al pueblo de Cuba por la aplicación del bloqueo económico, comercial y financiero de Estados Unidos, hasta diciembre de 2011, considerando la depreciación del dólar frente al valor del oro en el mercado internacional, asciende a un billón 66 mil millones de dólares. (Prensa Latina)