Camilo, una flor para nosotros
Hoy mi canto no comenta
un dolor ni un desengaño.
Hoy mi canto no presenta
vulgaridades en el amor.
¡Al fin está cantando el Benny!
Es una de las madrugadas del 59; lo habían esperado hasta el colmo, pero nadie se fue, sabían que él llegaría a su Ali Bar, como siempre, con “el pico caliente” a despeñar el alma en su cristalina y desgarrada voz hasta el amanecer:
Hoy dedico mi canto a las madres
que sufren la ausencia
del hijo idolatrado
que valientemente cayera
defendiendo el sagrado derecho de la libertad
y a la patria que solemnemente jurara lealtad.
Termina la canción y el Benny se desconcierta, no hay aplausos: ¿Qué pasó? Pronto se da cuenta: alguien tose, hay sollozos, una mujer inclina la cabeza sobre la mesa, hay quien no puede contenerse y rompe en llanto; el público está conmocionado. Ha tocado el amor de madre, de la patria, y apenas ha terminado la guerra (si es que con el triunfo de la Revolución ha terminado). Hay un toque extra de estremecimiento: en el público hay un joven de 27 años y es uno de los grandes protagonistas de la epopeya, Camilo Cienfuegos.
Al terminar la presentación, el joven comandante va hasta el camerino, y su saludo es: “¡Benny, qué clase de canción hasta cantado!” -como si se conocieran de toda una vida. No es difícil imaginarlo tempestuoso, directo, llano, risueño, echando a un lado sus grados y su tempestuosa historia.
Así fue el estreno de “Rezo en la noche”, la anécdota la cuenta el propio autor Francisco Escorcia testigo excepcional; no hay detalles, si hablaron algo más, si se extendió el encuentro, no fue contado. Es posible que solo fuera un instante en el que dos de los más populares cubanos se encontraban, dos leyendas diferentes, con algo –o realmente mucho- en común: son amados por el pueblo porque del pueblo son.
Quien ha bajado hasta el hueco al fondo de la casa 228 de la calle Pocitos en Lawton, donde está el mínimo apartamento en que nació y se crió puede comprender por qué es Camilo de lo más humilde del pueblo.
Las primeras imágenes de la Sierra lo muestran con la ametralladora sobre el hombro, al más puro estilo hollywoodense; o haciéndole bromas al Che (el único que podía darse ese lujo), llegando al colmo en las transmisiones de Radio Rebelde, de la que ha quedado registrada la grabación en que intercambian mensajes en días decisivos de la invasión, y en tales circunstancias, como si jugando, Camilo le repite, excesiva y vertiginosamente, como de carretilla:
-Así que dime si me entiendes, dime si me entiendes, dime si me entiendes, dime si me entiendes… y te doy el cambio Che.
Y el hermano argentino, en tono calmado (no es difícil imaginarlo negando con la cabeza con leve sonrisa) le contesta:
-¡Atención, Columna 2, Columna 2! Camilo te entiendo perfectamente; se te ha rallado el disco, tienes que cambiarlo.
Las imágenes que nos quedan de él tributan a la leyenda: el triunfo del 1ro de enero representado por sus mandarriazos a la posta del campamento de Columbia, fortaleza central de la dictadura de Batista que el Comandante en Jefe le ordena tomar. La caravana de la victoria y las muchachas lanzándose al cuello del flaco del sombrero alón y la sonrisa franca; el discurso de las palomas y Fidel virándose hacia él: ¡Voy bien Camilo!
El cátcher del juego de los Barbudos, recibiéndole con maestría al Comandante, y la famosa frase (seguramente en tono jocoso) cuando lo invitan a jugar en el otro equipo: ¡Contra Fidel ni en la pelota!
Y en el clímax de una traición, su voz ronca y rajada retumba todavía hoy desde el balcón del Palacio Presidencial, declamando ante su pueblo, los versos de Bonifacio Byrne, dos días antes de su desaparición física:
Si desecha en menudos pedazos
se llega a ver mi bandera algún día
nuestros muertos alzando los brazos
la sabrán defender todavía.
La última es una foto en la que camina delante del traidor, otrora compañero de armas, que pretendía sublevar contra la revolución a la provincia de Camagüey. Solo con su autoridad moral se abrió paso entre los amotinados y le dijo a su jefe: Acompáñame que estás preso. Le dio la espalda y salió caminando.
Horas después, no quiso renunciar a un viaje de regreso en una avioneta Cessna, con anunciado mal tiempo.
Desde aquel 28 de octubre de 1959 el pueblo lo busca, y se busca en Camilo. Quizás por ello ese día llevamos una flor al mar, o al río, o a un estanque en la escuelita, a cualquier lugar… a fin de cuentas él está donde su pueblo, y esa flor en donde el Benny irrumpe a despeñar el alma en su cristalina y desgarrada voz hasta el amanecer:
Hoy dedico mi canto a las madres
que sufren la ausencia
del hijo idolatrado
que valientemente cayera
defendiendo el sagrado derecho de la libertad
y a la patria que solemnemente jurara lealtad.
Bienvenida esta recopilación de canciones y poemas que son otras flores para acercarnos a Camilo de su pueblo.
-Homenaje a Camilo Cienfuegos
CD1781
01_ A Camilo (Poema) Nicolás Guillén _Voz Nicolás Guillén
02_ Canto a Camilo (Guajira) Carlos Puebla _Carlos Puebla y sus Tradicionales
03_ Camilo (Samba) Luis Carlos Pérez _Grupo Nuestra América
04_ Habana- Camilo (Danzón) Electo Rossell _Ibrahim Ferrer y Orquesta Chepín
05_ Camilo Comandante (Canción elegía) Evelio Rodríguez _Evelio Rodríguez y Cuarteto Yaraví
06_ El retrato de Camilo (Canción infantil) Mirta A. y Gisela H. _Alén B. y Coro de niños
07_ Es Camilo (Canción) C. Torrente y E. Almanza _Lourdes Torres y Lourdes Besi 08_ Recordando a Camilo (Ranchera) D.R. _Mariachi Cuba
09_ Voy bien Camilo (Bolero canción) Orlando Laguardia _Ramón Veloz y Cjto. Los Sonoros
10_ Camilo en el mar (Canción) Jesús Moré _Jans V. Robira y guitarra
11_ Camilo (Instrumental) Frank Fernández _ Orq. Brindis de Salas, solista Dagoberto G. (violín)
12_Discurso del Comandante Camilo Cienfuegos (26 de Octubre de 1959)
Bonus track Rezo en la noche de Francisco escorcia por Benny Moré
El CD Nuestro canto, una flor. Homenaje a Camilo Cienfuegos se presentará en la peña Trovando de la EGREM a las 2 pm en el patio bar de los Estdios Areito de la EGREM (San Miguel y Campanario en Centro Habana) miércoles de 2 a 5 pm
Este escrito ha provocado un aluvión de recuerdos, durante tres años asistí a la escuela secundaria “Domingo Faustino Sarmiento” (cosas que tiene la vida), la casa de Camilo la veía a pocos metros desde la quincalla, que hacia esquina, cuando cruzaba Reyes desde Pocito, subiendo por la calle Lawton desde Maria Regla 64, el edificio de los gitanos, ese era mi recorrido, alguna vez de esas visite la morada de Camilo (como la de cualquier humilde de mi barrio). Camilo fue eso, el que se hizo de abajo, rozando la piel con el asfalto.
Gracias, emociona.
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¡Me hevuelto âunTurquino humanoââ¦!
Â
( 1 ) Me dicen âMongo Petacaâ
porque en mi voz haypistilos
y mis arterias sonhilos
si hay que tejer unahamaca.
âCuandosiento olor a albaca
mipecho se despatillaâ.
Por la octavamaravilla
(que vien mi suelo antillano)
¡Me hevuelto âunTurquino humanoâ
delombligo a la rodilla!
Â
Ramón Espino Valdés
ElLeoncito de Las Tunas
Cuba/México.
Â
( 2 ) Siendo un jovencampesino
(hastala sierra llegué)
en âMinas del FrÃoâestudié
y escalé el âPico Turquinoâ.
Ese intricado camino
vio mi fuerza decubano
y pude darle la mano
a aquel que flaqueóen el viaje.
Hoy soyfuerza, soy coraje,
¡me hevuelto âunTurquino humanoâ!
Â
José Pérez Hernández
ElCernÃcalo del Parnaso
Las Tunas/Cuba.
Â
( 3 ) Voy acontestarte, Espino,
con verso y pinturafina
porque una luz meilumina
el venturoso camino.
âEcuadorme siembra un trino
con elsello ecuatorianoâ.
Como me siento tuhermano
(redacto,pinto y compongo)
y con tu acentoigual, Mongo,
¡me hevuelto âunTurquino humanoâ!
Â
Noel Guzmán BofillRojas
ElGeneral de la poesÃa
Cuba/Ecuador.
Â
( 4 ) Me convertà enmarinero
(de laforma más extraña)
âDejéen Cuba mi montaña,
miarroyuelo y mi potreroâ.
Algunos (de aventurero)
me acusaron deantemano
y aunque me encuentrolejano
(de migente y mi cultura)
por querer tocar laaltura
¡me hevuelto âun Turquinohumanoâ!
Â
Reinaldo Figueroa
Metralletadel Pinar
Cuba/USA.
Â
( 5 ) Nacà donde laespinela
como manigua crecÃa,
pero como no tenÃa
previsión no vi suestela.
Soltériendas a mi escuela
(escogÃotro meridiano)
perocomo soy cubano
(soñadordel YumurÃ)
yRamón, gracias a ti,
¡me hevuelto âunTurquino humanoâ!
Â
Félix Muñoz
Felitoel yumurino
Cuba/Tanzania.
Â
( 6 ) La década delnoventa
(con superÃodo especial)
âapartede todo el mal
me hizouna nueva osamentaâ.
Como victoria queostenta
(miorgullo de ser cubano)
ây hoy queregresa el insano
momentode la escasezâ
sé que venceré otravez…
¡me hevuelto âunTurquino humanoâ!
Â
Julio Ramos Morales
ElFarol de Marianao
La Habana/Cuba.
Â
( 7 ) Yo tanto quise crecer
queempecé a estirarme el dÃa
mismoaquel en que nacÃa
delvientre de una mujer.
Crecà yempecé a leer
todocuanto tuve a mano
y entreel estirón temprano
y todolo que he leÃdo
por lotanto que he crecido
¡me hevuelto âunTurquino humanoâ!
Â
Rafael SarmientoEnrÃquez
Dibujantede armonÃas
Matanzas/Cuba.
16/10/2019.
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Una de las últimas entrevistas realizada a Camilo el 19 de septiembre de 1959:
https://youtu.be/Ox33DAgFyCU
Una entrevista inédita grabada, concedida por Camilo Cienfuegos para la radio y la prensa escrita, forma parte de un documental sobre el legendario guerrillero, que tendrá su premier en los próximos días en el barrio habanero de Cayo Hueso, como homenaje al centenario de su fundación, ocurrida el 26 de julio de 1912.
La entrevista que aparece en el nuevo material se hizo el 19 de septiembre de 1959 —40 días antes de su desaparición física el 28 de octubre de aquel año— por el periodista, ensayista y novelista mexicano Gerardo Unzueta Lorenzana, entonces reportero de la revista Siempre, para los radioyentes de aquel país.
El diálogo con el Héroe de Yaguajay, de solo 27 años, se efectuó en el interior del avión en el que Camilo volaba junto al Comandante Ernesto Che Guevara, igualmente entrevistado en aquel momento.
Se supone que esa haya sido la única entrevista en pleno vuelo realizada por un periodista a Camilo; y tal vez la última que le hiciera un reportero extranjero.
El entrevistador Unzueta Lorenzana, hoy cercano a los 88 años de edad, nació en Tampico, Tamaulipas, el 3 de octubre de 1925. Fue fundador del sindicato de trabajadores de la Universidad Autónoma de México; columnista del diario El Universal y diputado federal por el Partido Comunista de la hermana nación.
Los asesores de este revelador documental, donde se aprecian —entre otros elementos— fotos del libro ¿Voy bien Camilo? (Editorial Capitán San Luis, 2009), son los escritores e historiadores Froilán González y Adys Cupull; los realizadores, sus dos hijos, Leandro y Liván; y la conductora, la nieta Beatriz González León, de 15 años.
El nombre La casa del roble obedece a que el documental aborda aspectos del nacimiento del Señor de la Vanguardia en la vivienda de la barriada habanera de Lawton, en cuyo patio la madre de Camilo —Emilia Gorriarán— sembró un roble blanco, hoy muy frondoso.
Adys y Froilán guardaron aquella grabación, que el periodista mexicano tuvo la gentileza de entregarles, pero era un tanto inaudible por el ruido del motor del avión. Y cuando parecía que no se podía aprovechar la importante entrevista, Wilfredo Gil Figueredo, entonces director de la emisora cubana C0C0
—el periódico del Aire—, hoy jubilado, y los técnicos José Reyes Baró y E. Ismael Aguilar Gómez, eliminaron los ruidos de la cinta. De esa forma pudieron oírse bien las preguntas del reportero y las respuestas de los dos comandantes de la Sierra Maestra, y extraer para el documental algunos fragmentos donde Camilo, entre otras cuestiones, aboga por la unidad latinoamericana, de gran vigencia actualmente. [La Casa del Roble, Luis Hernández Serrano:
http://www.juventudrebelde.cu/cuba/2012-07-19/la-casa-del-roble%5D
Camilo Cienfuegos en Antilla:
https://youtu.be/JnAIamf7cDY