Apuntes por el Foro. Por Pedro Pablo Gómez

Durante los próximos días y coincidiendo casualmente con la final del mundial del fútbol en Rusia- celebrado con gran esplendor y organización y sin latinoamericanos desde la semifinal- se efectuará en Cuba una sesión mas del denominado Foro de Sao Paulo, lo cual no es indicativo de celebrarse en el país más grande de la América Latina.

El momento político que vive el mundo no podría ser más adecuado para la concertación de ideas por la necesidad en nuestro continente de hallar el mejor camino para la unidad en las acciones contra la hegemonía y dominio que avanza desde el poderoso norte y dejar atrás diferencias que nos impiden ver la luz al final del túnel de la historia.

Estados Unidos y sus actuales gobernantes han manifestado claramente su oposición y crítica a la participación de organizaciones y partidos políticos enfrentados a la acción expansionista y de dominación del imperio. Gran preocupación de los habitantes del entorno de la Casa Blanca, porque temen que los resultados de los representantes de los pueblos se conviertan en elementos y argumentos válidos para guiar la lucha por lograr la verdadera independencia y un mejor desarrollo social, económico y político en nuestra área geográfica.

Por esta causa aumentan sus presiones sobre gobiernos con posiciones favorables a las políticas de Washington para obstaculizar la participación de amplias delegaciones para reclamar la justicia y el cese de la explotación de sus pueblos, ahogados por los medios de comunicación en manos de explotadores y con la sombra general del mundo de la corrupción.

Cuba como siempre brindará su apoyo para que se desarrolle exitosamente el evento convocado con la claridad de que todas las ideas expresadas no serán aceptadas por igual por todos los participantes, donde múltiples visiones serán escuchadas con respeto, y siempre velará por tratar de lograr la mayor cantidad de acciones unitarias y pasar de aquellas que nos dividen. En la lucha existente contra el dominio imperialista todos tenemos que poner de nuestra parte, para llegar a criterios y acciones comunes.

Una gran coalición de ideas de obreros, estudiantes, técnicos, intelectuales y políticos integran la composición de este tipo de reunión que no son estado, pero sí es la fuerza masiva de la sociedad en que vivimos.

Todos debemos luchar para que este foro constituya en la realidad un factor de unidad y avance en las realidades de nuestro continente, con la claridad de identificar al verdadero enemigo de nuestro desarrollo en paz y para el bien de todos.