Ha sido la “serpiente de verano” en torno a Cuba: el supuesto “ataque acústico” con una “sofisticada arma” a 21 miembros de la Embajada de EEUU en La Habana, por el que el gobierno de Donald Trump –nos dice la prensa- habría incluso evaluado su cierre (1).
A falta de pruebas, ciertos medios utilizaban vías indirectas para acusar de este “incidente” a los servicios de inteligencia de Cuba (2). El diario español ABC dedicaba más de la mitad de una extensa noticia a las declaraciones de un supuesto “expreso político cubano”, que no tenía “ni un atisbo de duda” sobre la responsabilidad del Gobierno de Raúl Castro (3). Esta persona narraba las “prolongadas torturas auditivas” que sufrió en la cárcel mediante “ultrasonidos de alta amplitud de onda”. Para dar credibilidad a su relato, ABC señalaba que hace años denunció las “violaciones de los derechos humanos en Cuba ante el Consejo General de Naciones Unidas” con “sede en Ginebra”.
Efectivamente, esta persona, Luis Zúñiga Rey, habló en 2004 ante la Comisión de Derechos Humanos de la ONU (4). Lo que no dice ABC es que lo hizo en calidad de representante del Gobierno de EEUU, pocos meses después de la invasión de Irak (5). Agente de la CIA desde los años 70, Luis Zuñiga es uno de los más destacados terroristas de la ultraderecha cubanoamericana (6).
Detenido en 1974 cuando entraba en Cuba en una embarcación repleta de armas y explosivos, fue condenado a 30 años, de los que cumplió 14. Ya en EEUU, dentro de la Fundación Nacional Cubano Americana, organizó su ala paramilitar, el llamado Frente Nacional Cubano, organizando y financiando numerosos atentados, 9 contra Fidel Castro y decenas contra instalaciones turísticas de la Isla (7).
Luis Zúñiga, por cierto, jamás había denunciado hasta ahora que hubiera sufrido “torturas auditivas” en Cuba, lo que hace pensar en una burda “actualización” de su relato para regresar al escenario mediático (8).
La gran prensa norteamericana introducía de nuevo al enemigo ruso en el supuesto “ataque sónico”: CBS News (9) y la revista Newsweek (10) recordaban cómo ya “los soviéticos bombardearon la embajada de EEUU en Moscú con radiación de microondas durante más de 20 años”. Algo que recogía el diario español “El Mundo” para aludir a “una reedición de lo que sucedía durante la Guerra Fría” (11). El diario “El País”, por su lado, lanzaba la hipótesis de que “un tercer rival de EE UU – se habla de Rusia, Irán o Corea del Norte- llevó a cabo el ataque, quizás con ayuda de agentes cubanos díscolos” (12).
Pero hay un dato clave –silenciado o minimizado por los medios- que convierte en un sinsentido político la supuesta agresión de la Inteligencia cubana a EEUU: que los citados incidentes, aunque denunciados este verano, se iniciaron en noviembre de 2016, justo cuando avanzaba el diálogo Cuba-EEUU y pocos predecían el retroceso para el mismo que supuso la victoria electoral de Donald Trump (13). Pero a esto, por supuesto, también le buscaban una oscura explicación ciertos medios internacionales. “El País” apuntaba a “disidentes del aparato de inteligencia cubano” que tratarían de “boicotear el deshielo entre Washington y La Habana” (14). El diario argentino “Clarín” aseguraba que “los investigadores” examinan la posibilidad de “una facción rebelde de los servicios de seguridad cubanos, un tercer gobierno (como Rusia) o alguna combinación de ambos” (15).
Mientras, la ultraderecha cubanoamericana, que ya vuelve a pilotar parte de la política exterior de EEUU (16), ha aprovechado el asunto para exigir la expulsión del cuerpo diplomático cubano en Washington (17) y el cierre de la Embajada en La Habana, apenas dos años después de reabierta por orden de Barack Obama (18).
Lo extraño es que a ninguno de estos grandes medios, tan dispuestos a exponer a sus lectores las hipótesis más oscuras -apunten a Rusia, Corea o Cuba-, se le haya ocurrido siquiera sugerir la remota posibilidad de que nos encontremos ante un nuevo incidente de “falsa bandera” (19). Como el Maine (20) o Tonkín (21), uno más en la historia creativa de la Comunidad de Inteligencia de EEUU.
(1) https://www.nytimes.com/es/2017/09/18/estados-unidos-embajada-cuba-enfermedad-misteriosa/
(4) http://www.epoca2.lajiribilla.cu/2005/n206_04/206_09.html
(5) https://www.rebelion.org/hemeroteca/cuba/040321godoy.htm
(6) https://percy-francisco.blogspot.com.es/2017/09/farsa-y-manipulacion-anticubana-por.html
(7) https://www.rebelion.org/hemeroteca/cuba/040329ci.htm
(8) http://www.cubaencuentro.com/opinion/articulos/ataque-acustico-y-mala-memoria-330460
(9) https://www.martinoticias.com/a/rusia-tacha-absurdas-acusaciones-ataque-acustico-cuba/152006.html
(10) http://www.newsweek.com/russia-us-attack-cuba-officials-649546
(11) http://www.elmundo.es/internacional/2017/09/17/59bea4d2468aeb11438b4632.html
(12) https://elpais.com/internacional/2017/09/16/estados_unidos/1505522959_337906.html
(14) https://elpais.com/internacional/2017/09/16/estados_unidos/1505522959_337906.html
(19) http://www.rebelion.org/noticia.php?id=231926
(20) https://www.ecured.cu/La_explosi%C3%B3n_del_acorazado_Maine
Ya el imperio y sus lacayos mercenarios no saben qué van a inventar contra Cuba, ya llegan hasta la ciencia ficción, no se dan cuenta que si hemos vivido por casi 60 años sin embajada yanqui y con un bloqueo genocida y nuestra voluntad de ser libres,soberanos, SOCIALISTAS, no la han podido derrotar, cómo se piensan que por otra campaña más lo van a lograr, ilusos, no escarmientan.
Hasta la victoria siempre.
Con nuestra REVOLUCIÓN y nuestro Partido Comunista al frente, siempre venceremos.
Curiosamente la noticia exploto días después del anuncio por Rusia de haber creado una nueva superarma acústica y es muy probable que sea el origen de la idea de volver esa noticia contra Cuba, intentando algo nuevo para sustituir las tonterías repetidas durante mas de medio siglo.
De donde exactamente salio la “brillante idea” quizás nunca se conozca a menos que su autor con el paso del tiempo decidiera hacer dinero contando su vida como ha sucedido anteriormente con otros operadores democráticos y podamos enterarnos de cuanto le pagaron por “el trabajito”.
Los medios internacionales en general callan el asunto por temor al ridiculo. Y solo algunas noticias son sembradas en los medios incondicionales para mantener con vida el asunto y vender una “opinión internacional de laboratorio” sobre el caso.
Ninguna persona normal en el mundo puede creer en una acción criminal de parte de Cuba, mas bien todos ven el asunto como algo sucio creado para revertir el avance “logrado” en las relaciones con Cuba, todo después de haberse resuelto de forma “favorable y sin escándalos” el asunto sobre el éxodo de los inmigrantes cubanos a los Estados Unidos por su pesada carga económica y social.
Incluso se puede dudar que el gobierno estadounidense estuviera implicado en una posible acción criminal contra el personal de su propia embajada, por los riesgos que implica, pero la operación puede haberse realizado por grupos anticubanos con la complicidad de funcionarios de la embajada con el propósito de acelerar el retroceso en las relaciones bilaterales. Algo tipico del sistema.
Pero todo encaja demasiado bien como parte de un programa para aprovechar el próximo retiro de la llamada generación historica de la revolución del gobierno activo, para ir calentando el ambiente político buscando intentar repetir en Cuba las acciones criminales de las guarimbas venezolanas incluyendo quemar vivos algunos cubanos fueran comunistas o simples ciudadanos para alborozar los medios en un mundo que acepto indiferente lo ocurrido contra el pueblo de Venezuela.
Muchos se han referido a Venezuela como un ensayo de lo que le espera a Cuba despues del cambio de gobierno, desde luego la sabiduría popular bien dice que “una cosa piensa el borracho y otra el bodeguero”.