A 70 años de la victoria soviética sobre el fascismo

 
Ángel Guerra Cabrera

victoria_reichstagEl 30 de abril de 1945 los sargentos del Ejército Rojo Mijaíl Yegorov y Meliton Kantaria colocaron en lo más alto del Reichstag la bandera carmesí de la Unión Soviética con la hoz y el martillo.  La imagen recorrió el mundo y permanece hasta hoy  como el símbolo vivo de la victoria soviética  sobre el nazi-fascismo pese a los esfuerzos de la mendaz dictadura mediática para presentar el tardío desembarco de Normandía como el causante de ese desenlace. También silencia el  decisivo papel de los comunistas, que en la Europa ocupada llevaron el peso mayor de la resistencia y organizaron vigorosos movimientos guerrilleros en Yugoslavia, Grecia y Albania.

El 9 de mayo de aquel año,  el jefe militar alemán Wilhelm Keitel, firmó la rendición incondicional de la Alemania nazi ante el legendario mariscal de la Unión Soviética Gueorgui Zhukov.  Casi cuatro años después de que en la madrugada del 22 de junio de 1941 cuatro millones y medio de efectivos alemanes y de sus aliados encuadrados en 225 divisiones, apoyadas por 4 400 tanques y 4000 aviones arrollaran las unidades soviéticas de la frontera y destruyeron casi toda su aviación en tierra y buena parte de sus carros de combate.

A las tres semanas, los invasores habían penetrado 600 kilómetros dentro de la URSS y conquistado Letonia, Lituania, Bielorrusia, el occidente de Ucrania y casi la totalidad de Moldavia.

Stalin estaba anonadado y en un principio se negaba a aceptar la realidad y a reaccionar. Y es que ante la negativa de Londres y París a firmar una alianza antinazi con Moscú, propuesta insistentemente por la diplomacia soviética, y la pusilanimidad de ambas ante la arremetida de Hitler contra España republicana, Austria, Polonia y Checoslovaquia, el líder soviético cometió el gravísimo error de firmar el Tratado de No Agresión entre Alemania y la URSS. Ello tuvo serias consecuencias en el prestigio y la preparación contra el ataque nazi, tanto de la cuna de la revolución bolchevique como del movimiento comunista y antifascista internacional.

Stalin confió tercamente en que ese pacto protegería al Estado soviético de la inminente agresión hitleriana, informada con antelación a sus servicios de inteligencia por audaces revolucionarios de otros países que los integraban, como el periodista alemán Richard Sorge, íntimo del embajador nazi en Tokio.

Stalin también cayó en una trampa de los servicios secretos alemanes, que lo llevó, vísperas de la guerra, a ordenar el fusilamiento de gran parte de los más experimentados generales del Ejército Rojo.

Pero logró sobreponerse. Historiadores como Hobsbawm afirman que durante la guerra cesó la represión y por las memorias de Zhukov y otros jefes sabemos que los escuchaba antes de tomar decisiones. En la Gran Guerra Patria el Ejército Rojo protagonizó frente a los alemanes las más grandes y encarnizadas batallas de la historia, caracterizadas por el empleo de miles de piezas de artillería, aviones y tanques. Las batallas de Moscú, Leningrado, Stalingrado, Kurks y Berlín se cuentan entre sus deslumbrantes victorias.

Debe subrayarse que lo que hizo posible la derrota del Tercer Reich fue el heroísmo de los pueblos de la Unión Soviética y la enérgica actuación de una pléyade de talentosos, leales y competentes jefes militares, casi todos de reciente promoción.  Pero, guste o no y pese a sus graves errores, excesos y crímenes antes y después de la guerra, fue bajo la dirección de Stalin que se logró la hazaña.

No obstante, aprovechando la sorpresa y la inicial impreparación de los soviéticos, los nazis lograron ocupar grandes franjas de su territorio, algunas importantes ciudades y amenazar seriamente a Moscú, Leningrado y Stalingrado.  Pero después de su colosal derrota en la última y de la arrolladora contraofensiva soviética en Kursk, ningún conocedor del arte militar dudaba que la derrota de la Alemania nazi sería solo cuestión de tiempo.

La proeza de detener en tan trágicas circunstancias la poderosa  ofensiva alemana, trasladar la industria de guerra miles de kilómetros a la retaguardia y ponerla a pleno rendimiento, movilizar a toda la población(hombres, mujeres, jóvenes, niños) para la defensa del país y la producción y barrer al enemigo hasta derrotarlo en Berlín, únicamente podía ser fruto de una sociedad educada y solidaria, con economía  centralmente planificada y profundo amor a la patria, ingredientes forjados sobre los ardientes rescoldos del fuego revolucionario de 1917.

Twitter: @aguerraguerra

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18 Responses to A 70 años de la victoria soviética sobre el fascismo

  1. Miguel A. says:

    La derecha mundial y especialmente la europea hace un revisionismo histórico para que las nuevas generaciones ignoren el papel de la URSS en la derrota del nazismo y el fascismo. Por eso es muy ilustrativo el siguiente artículo: “Cómo Europa abdica de su historia” de Àngel Ferrero
    | Historia 19/04/15 ::http://www.eldiario.es/contrapoder/Ucrania_pendiente_fascista_6_377322282.html:: TEXTO WEB |

     
  2. Gaizka Gontza. says:

    Aunque no comparto algunos afirmaciones que se hacen respecto de el jefe del estado soviético en ese período histórico, me parece un buen artículo.
    Pienso que este no es el espacio adecuado para el debate sobre la actuación de Stalin. Aunque si veo una necesidad imperiosa abordar este debate para definir cuanto de verdad y cuanto de deformación, o especulación, sobre estos hechos históricos. Todo esto lo comento porque hay mucha información, con diferentes opiniones y esto nos lleva a confusión. Y yo he leído varias versiones. Además debo añadir que converso a menudo con un amigo que ha vivido en esa época en la URRS, el cual tiene ya 89 años y su testimonio no coincide con lo que se afirma en el artículo. También hay un testimonio plasmado en un libro reciente, de Antonio Fernádez Ortiz cuyo título es: “Ve y Lucha”. Habla de muchos aspectos de la vida de Stalin desde le conocimiento como familiar cercano, el cual me parece bastante objetivo.
    Un saludo caluroso, camarada. como siempre es un placer leer los artículos que publicas.
    Gaizka.

     
    • istvan says:

      Absolutamente de acuerdo. En occidente estamos influenciados por el paradigma orweliano de esa sociedad totalitarismo que describió en su libro que en realidad es una farsa. Lo lamentable es que muy pocos comunistas se dieron a la tarea de mostrar la verdad sobre Stalin y su gobierno. El británico Billy Bland y el albanés Enver Hoxha fueron de los pocos. Estoy completamente seguro que casi nadie sabe que Stalin impulsó una reforma constitucional para democratizar la sociedad soviética y fracasó. Eso echa por tierra el mito del dictador cuya palabra es ley. Muy pocos saben que el embajador de EEUU en la Rusia “Stalinista” Joseph E. Davies escribió un diario que luego se publicó como libro donde describía la sociedad soviética y nada tiene que ver con los horrores que nos cuentan hoy día. Existe hasta una película de ese libro rodada en 1943.
      Nadie menciona a estas personas ni se atreven a someter sus obras a crítica o cuestionamiento. La gran mayoría acepta la propaganda anticomunista. Por cierto, hay un artículo de un norteamericano (no recuerdo si es Grover Furr) cuyo título es: “El Stalinismo es anticomunismo” o algo parecido. Está muy interesante. Léanlo y saquen sus propias conclusiones.

       
  3. Enrique R. Martínez Díaz says:

    La Victoria sobre el fascismo por el pueblo soviético es uno de los acontecimientos mas gloriosos de la historia de la Humanidad. Los intentos de ciertos falseadores, pagados por quien sabe, no han podido opacarlos. Sobre Stalin, creo que no hay suficiente información, y también una gran manipulación sobre muchas de las cosas que pasaron en aquellos años. Un solo hombre no puede ejercer un dominio tal sobre un país sin otros que lo apoyaran, por lo que hay que agregar bombres a la lista, de las cosas buenas y de las malas. Estúdiese la biografía de Napoleón, de César. de Alejandro Magno, y de otros muchos, y se verán luces y sombras; Stalin también las tuvo. Es necesaria mas objetividad.

     
  4. Mario Latino says:

    Stalin há sido desde siempre la mayor víctima de la contrainformación reaccionaria.

     
  5. domingo reyes says:

    no se como un medio cubano cae en el error de publicar las afirmaciones que hace el autor de este articulo, como dice mario latino Stalin es la mator victima de la contrainformacion. pero, repito, que un medio cubano reproduzca y le de validez a la propaganda antiestalinista, que es en esencia contra la revolución bolchevique y el comunismo en gral es una aberración. saben uds los revolucionarios cubanos que una de las acusaciones mas repetida contra Fidel es su sed de sangre y el paredón que luego del triunfo se establecio en la habana para según los enemigos de la revolución cubana eliminar a pacificos ciudadanos que lo único que hacían era ser cristiano y rechazar el ateísmo comunista de Fidel, entonces como es que conocedores uds de las dificultades de construir una revolución que reivindique a los humildes de la explotación de siglo, que le proporcionan los poderosos que se niegan a perder su condición y lanzan innúmeros ataque contra todo los que se oponen a sus privilegios, o acaso a los que invadieron por playa giron y ponen bombas en los hoteles, o a los que como el gral héroe de las batallas en africa ponen en peligr el proceso por sus ambiciones personales, hay que regalarles flores. miren camaradas si hay una cosa que hay que valorar de Stalin fue su firmeza en la defensa de su país que fue invadidos por las principales potencia capitalistas que le impusieron una guerra de años en todos lo frentes, como sucede hoy en Venezuela y en la misma cuba, pero Stalin no flaqueo, y esa firmeza lo convirtió en el enemigo principal del capitalismo que no ha dejado de perseguirlo a través de décadas después de su muerte, considero que la mejor prueba de la honradez revolucionaria de Stalin, no es solo, que su país se uniera en torno a el en una coyuntura tan difícil, sino que la saña del enemigo contra el es tal que muchos que debieran reverenciarlo(como uds) utilizen los mismos argumentos de sus enemigos(que también son enemigos de uds) silamente para aparecer como individuos reflexivo cuando en realidad le hacen un flaco servicio a la historia y a la humanidad al utilizar los argumentos de enemigos de clase. por eso no se sorprendan de que al dia de hoy la gente ignore el papel de los comunistas en la lucha contra el fascismo si los revolucionarios son los primeros que rebajan su participación al cuestionar la participación del líder indiscutible de ese momento histórico. que obligo a reconocidos enemigos de la urrss a sentarse y reconocerlo como lo que el era. excúsenme la vehemencia

     
  6. Aprendí de Martí, en la “Edad de Oro”- disculpando a Bolívar de sus errores- “que el sol tiene manchas” …. que notan los desagradecidos. Luego también en uno de sus apuntes, Martí sentenciaba: “Las revoluciones son como el café, se hacen con agua hirviendo” y digo yo: con el enemigo ningún coqueteo, que son serpientes, te encantan con seudo-análisis históricos fuera de contexto, donde exigen guantes blancos y pétalos de rosas, a los que salvaron al mundo del exterminio masivo en campos de concentración y mil atrocidades mas…y terminan, estas serpientes, glorificando el exterminio.

     
  7. No acabo de comprender como se puede tratar de defender a la “bestia” apelando a la “contrainformación”, si ahora va a resultar que Nikita Krufchev era un contrainformador al servicio de no se quién. Por favor, dejemonos de fanatismo y dediquemonos a combatir la CONTRAINFORMACIÓN que si se está prodigando en nuestros dias sobre el papel de la Unión Sovietica en la II Guerra Mundial y sobre quién derrotó a la Alemania hitleriana.

     
    • Pedro, debo aclararte algo, Nikita fue parte de la lucha de poderes de esa burocracia que secuestró el socialismo y provocó su caida, odiaba a Stalin desde que este castigó a el hijo de Nikita por disparar borracho en la cabeza a otro oficial en una prueba de punteria. Fue un represor antes de la guerra a queien Stalin envió una nota, ahora desclasificada, donde le decia: Humanizate, imbecil. Y para terminar te dejo las palabras de Stalin: Sé que muchos arrojarán basura sobre mi tumba, el viento de la historia se encargará de limpiarla. Aclaro, no fue un santo y cometió muchos errores, pero tambien, como el sol, tuvo su luz. Viva la victoria sovietica sobre el fascismo!! Gloria eterna al pueblo sovietico!!

       
      • No seré yo quién cuestione la Gloriosa victoria del pueblo sovieto en Gran Guerra Patria, pero no demos todo el mérito a Stalin, fueron los millones de soldados de las de 40 nacionalidades sovieticas quienes sacrificaron sus vidas para expulsar al agresor criminal.

         
  8. camarero says:

    yo diría que el genio de la victoria fue zhukov… evitó la caída de leningrado, y ganó las batallas de moscú, stalingrado y el arco de kursk… de ahí para allá todo fue retirada para el III reich…

     
  9. Luis M. Domínguez Batista says:

    Si la segunda guerra mundial, intento de un nuevo reparto del mundo por la elite capitalista encabezada por Alemania, Italia y Japón entre otras, se hubiera iniciado, luego de una larga preparación de sus potencias e ideologías, hoy, la cosecha de muertos y la participación de potencias militares hubiera sido 1000 veces lo que resultó en muertos y no habría durado tanto tiemo en tener terrorificos resultados. Calculen que en la guerra de Vietnam USA arrojó más bombas que todas las que se arrojaron en la segunda guerra mundial, sin contar las agresiones y las guerras que han tenido materialización en esta etapa de el último tercio del siglo XX y la primera década del siglo XXI. Lo que ocurre es que las fuerzas contendientes están mejores preparadas y que a occidente le ha resultado muy dificil enfrentar a la coalisión de pueblos que se oponen al poder imperial y eso que los frentes, aparentemente se han debilitgado un tanto y que ya no existe la URSS, pero frente a la berrera mundial en defensa de la paz han surgido potencias economicas que son a la vez potencias militares como China, la India, Africa del Sur, Irán y Brasil, Rusia. Algunas de las cuales cuentan con armas nucleares y todas juntas son un freno a la guerra y un frente de paz, y la cosa se ha puesto tan seria que para desatar una guerra imperial por un nuevo intento de apoderarse del mundo y ponerle un mando supremo del capital internacional no será fácil. El mundo se ha hecho un tanto ingobernable y no lo han hecho ingobernable las armas que se producen en mayor número en occidente y que forman el P.I.B. de las mayores potencias capitalistas de la historia, sino que han surgido movimientos y se han potenciado fuerzas, aparentemente invisibles, que frenan un tanto a la guerra y ya el poder imperial no tiene un mando definido ni puede hacer su voluntad sobre la mayoría de las naciones. Los tiempos cambian y hoy, es sinbólico que se celebre, en la nación artífice de la derrota del imperio hitleriano, con todas las banderas rendidas a su favor, inclinadas en saludo a la nación líder, que fue quien puso más de 20 millones de sus hijos para salvar al mundo. Nación que podrá ser derrotada militarmente, cosa que dudamos, pero que en la memomeria de la Historia Universal quedá como el símbolo que alcanzó la paz y que comenzó por hacer de la justicia una premisa del hombre universal y del derecho a la paz un símbolo de la persevarancia y de la soberanía de los pueblos. Al calor de Rusia y la URSS todo el sistema colonial se vino abajo y hoy están en dudas las Malvinas y Puerto Rico, que el poderoso imperio del norte ampara en terrorio americano y unas cuantas islitas en el caribe como restos del oprovisoso sistema colonial impuesto al mundo desde que Colon invandió nuestras tierras.

    Así de cierto.

     
  10. Domingo Reyes says:

    Krushev no sólo fue un contrinformador, sino tambien un contrarevolucionario que sembró la semilla de la caída ¿o es q gorvachov no fue el gran liquidador?o hay q creer que los sucesores de stalin q querian q el mundo occidental los aceptara como civilizados europeos, eran ciudadanos honrados y no sabian q estaban creando con sus politicas lo q hoy se conoce como oligarquia y q liquidó las conquistas socialistas en su provecho, lo que pasa es, que la construccion se hace a costas de arrebatarle las riquezas q por siglos los privilegiados han acumulados y esto es por si alguien no lo sabes GUERRA, y en las guerras hay victimas que todo el mundo trata de q sean del bando contrario. En este momento estoy mirando a maria corina machado llamando a enfrentar al monstruo nicolas maduro. Sin embargo los grandes medios la llaman a ella y sus compañeros democratas, esos mismos medios ocultan los muertos de los ultimos años del imperio y nadie dice q bush es un monstruo, pero algunos revolucionarios”sinceros” y q distorsionan la sentencia de q la verdad es revolucionaria la verdad q la burgusia (y servidores como krushov y troski) le proporcionan a traves de los grandes medios q distorsionan la histora. La campaña contra stalin no es sólo contra información sino contrarevolucion. Si seguimos la verdad de los medios sucedera lo q decia malcom x y asi si q no habra posibilidad de revolucion

     
  11. Sergio Ortiz says:

    El autor de esta nota sobre los 70 años de la victoria soviética hace críticas erróneas a Stalin, casi diría trotskistas.
    Critica el pacto Molotov-Ribbentropp, ampliamente justificado por el hecho de que las potencias occidentales no querían acuerdo con la URSS y empujaban a Hitler hacia Moscú. Además le permitió a Stalin ganar tiempo y prepararse para la que se venía.
    Critica la limpieza de los militares trotskistas confabulados con Alemania. Muy bien hecha esa limpieza, que impidió operar a la quintacolumna en la URSS. Esta fue la única nación invadida por los nazis que no pudo contar con quintacolumna, desbaratada por Stalin. Que la llamada “oposición de izquierda” era de hecho aliada del Tercer Reich se comprobó judicialmente en los juicios de Moscú. Favor de leer el libro del ex embajador de EE UU en Moscú, Joseph Davies.
    Critica la falta de preparación de Stalin antes del 22 de junio de 1941: falso. Bien preparado estaba su ejército Rojo pero claro que necesitaba ganar experiencia en el combate y por eso fue que en los primeros días los alemanes pudieron penetrar tantos km dentro de la URSS. El propio general Zhukov en sus memorias admite que Stalin tuvo razón en desoir su consejo de ir con las tropas soviéticas a la frontera con Alemania en la víspera de la invasión. Stalin le dijo que no, que eso daría pie a la excusa alemana invasora y pondría a la URSS como “agresora”. Y que aún cuando movieran esas tropas a la frontera, igual sería sobrepasadas porque esos nazis venían guerreando hace tiempo y el ejército rojo no, que había que desgastarlos de a poco, que penetraran y los irían combatiendo, se alargarían las líneas de logística alemana y se ganaría en experiencia de combate. Y así fue.
    La crítica de Angel Guerra Cabrera contra Stalin es errónea y muy en línea con la denostación trotskista.
    Sergio Ortiz, Partido de la Liberacion (PL) de Argentina.

     
    • Fidel:
      Pienso que ocurrieron acontecimientos históricos que influyeron en la idea de que para un comunista el fin justificaba los medios, acontecimientos internacionales difíciles de comprender —los he mencionado en más de una ocasión—, a pesar de todo el antecedente que constaba del intento franco-británico, las dos grandes potencias coloniales, las mayores del mundo, de lanzar a Hitler contra la URSS. Pienso que los planes imperialistas de lanzar a Hitler contra la URSS jamás habrían justificado el pacto de Hitler con Stalin, fue muy duro. Los partidos comunistas, que se caracterizaban por la disciplina, se vieron todos obligados a defender el Pacto Molotov-Ribbentrop y a desangrarse políticamente.

      Antes de ese pacto, la necesidad de unirse en la lucha antifascista condujo en Cuba a la alianza de los comunistas cubanos con Batista, y ya Batista había reprimido la famosa huelga de abril de 1934, que vino después del golpe de Batista contra el gobierno provisional de 1933, de incuestionable carácter revolucionario y fruto, en gran parte, de la lucha heroica del movimiento obrero y los comunistas cubanos. Antes de aquella alianza antifascista, Batista había asesinado no se sabe a cuánta gente, había robado no se sabe cuánto dinero, era un peón del imperialismo yanki; pero vino de Moscú la orden: organizar los frentes antifascistas. A pactar con el demonio. Aquí pactaron con el ABC fascista y con Batista, un fascista de otro tipo, un criminal y un saqueador del tesoro público.

      Son acontecimientos muy difíciles, pero venían unos tras otros, y los comunistas más disciplinados del mundo, lo digo con sincero respeto, eran los partidos comunistas de América Latina y entre ellos el de Cuba, del cual tuve siempre y conservo un altísimo concepto.

      Hoy podemos hablar del tema porque hoy vamos marchando hacia nuevas y nuevas etapas.

      Los militantes del Partido Comunista de Cuba eran los ciudadanos más disciplinados, más honrados y más sacrificados de este país, contribuían al Partido; los legisladores del Partido entregaban una proporción de su ingreso, eran la gente más honrada de este país, independientemente de la línea equivocada impuesta por Stalin al movimiento internacional. Cómo culparlos. Póngalos en el dilema de aceptar o no algo, a mi juicio, absolutamente correcto: la unión de todos los comunistas. “Proletarios de todos los países, ¡uníos!”, o romper abiertamente, en aquellas circunstancias, la disciplina.

      Y no soy de los que se ponen a criticar a los personajes históricos satanizados por la reacción mundial para hacerles gracia a los burgueses y a los imperialistas; tampoco voy a cometer la tontería de no atreverme a decir algo que tengo el deber de decir un día como hoy. Nosotros debemos tener el valor de reconocer nuestros propios errores precisamente por eso, porque únicamente así se alcanza el objetivo que se pretende alcanzar. Pues sí, se creó tremendo vicio de abuso de poder, de crueldad, y en especial el hábito de imponer la autoridad de un país, de un partido hegemónico, a los demás países y partidos.

      Nosotros hemos estado más de 40 años manteniendo relaciones con el movimiento revolucionario en América Latina, y relaciones sumamente estrechas. Jamás se nos ocurrió decirle a ninguno lo que debía hacer. Ibamos descubriendo, además, el celo con que cada movimiento revolucionario defiende sus derechos y sus prerrogativas.

      Recuerdo momentos cruciales, lo digo aquí y nada más que una partecita: cuando la URSS se derrumbó y se quedó sola mucha gente, entre ellas nosotros, los revolucionarios cubanos. Pero nosotros sabíamos lo que debíamos hacer y lo que teníamos que hacer, cuáles eran nuestras opciones. Estaban los demás movimientos revolucionarios en muchas partes librando su lucha. No voy a decir cuáles, no voy a decir quiénes; pero se trataba de movimientos revolucionarios muy serios, nos preguntaron si negociaban o no ante aquella situación desesperada, si continuaban luchando o no, o si negociaban con las fuerzas opuestas buscando una paz, cuando uno sabía a qué conducía aquella paz.

      Yo les decía: “Ustedes no nos pueden pedir opinión a nosotros, son ustedes los que irían a luchar, son ustedes los que irían a morir, no somos nosotros. Nosotros sabemos qué haremos y qué estamos dispuestos a hacer; pero eso solo lo pueden decidir ustedes.” Ahí estaba la más extrema manifestación de respeto a los demás movimientos y no el intento de imponer sobre la base de nuestros conocimientos y experiencias y el enorme respeto que sentían por nuestra Revolución para saber el peso de nuestros puntos de vista. En ese momento no podíamos pensar en las ventajas o desventajas para Cuba de las decisiones que tomaran: “Decidan ustedes”, y así cada uno de ellos, en momentos decisivos, decidió su línea.

      Nosotros somos un pequeño país aquí en el Caribe, a 90 millas del imperio y a unas pulgadas de su base ilegal, mil veces más débil que lo que era la URSS en la época de su pacto con Hitler, o cuando estaba dando órdenes a los líderes de los partidos comunistas. En la época de la República de Weimar, que surgió en Alemania después de la Primera Guerra Mundial, la increíble crisis económica desatada como consecuencia del Pacto de Versalles impuesto a aquel país por Inglaterra, Francia y Estados Unidos, por un lado fortalecía al movimiento revolucionario y por otro a las fuerzas nacionalistas más reaccionarias.

      Hitler triunfa electoralmente frente a los partidos burgueses liberales y frente a las fuerzas comunistas combativas y revolucionarias; pero pudo más en esa situación el resentimiento terrible del pueblo alemán por las condiciones leoninas establecidas por los vencedores. Y así es como llega Hitler al poder. Este, en un libro que escribió, había declarado desenfadadamente su propósito de buscar espacio vital en el territorio de la URSS para la raza alemana, a costa de los rusos, a su juicio raza inferior. Todo eso estaba escrito, y el movimiento comunista se educó en ideas y conceptos muy claros contra el nazifascismo.

      En nuestro país, después de tantos revolucionarios caídos, siendo los comunistas los más conscientes, los mejores militantes, la gente más honrada, el partido marxista-leninista fue conducido, sin embargo, a aquella alianza con Batista, que tanto reprimió a los estudiantes y al pueblo en general. Los jóvenes eran muy reacios a su poder; los obreros, que veían sus intereses defendidos continuamente por los dirigentes comunistas, eran firmes y leales al Partido; pero en la juventud y en amplios sectores populares había mucho rechazo justificado a Batista.

      Pienso que la experiencia del primer Estado socialista, Estado que debió arreglarse y nunca destruirse, ha sido muy amarga. No crean que no hemos pensado muchas veces en ese fenómeno increíble mediante el cual una de las más poderosas potencias del mundo, que había logrado equiparar su fuerza con la otra superpotencia, un país que pagó con la vida de más de 20 millones de ciudadanos la lucha contra el fascismo, un país que aplastó al fascismo, se derrumbara como se derrumbó.

      http://www.cuba.cu/gobierno/discursos/2005/esp/f171105e.html

       
      • Luis M. Domínguez Batista says:

        Iroel estas en la verdad, pero recuerda siempre que no por el esfuerzos e intenciones se miden las cosas sino por el resultado. Todos los errores condujeron a millones de muertos a un atraso de decenas de años en el proceso revolucionario mundial y adolores inmensos e ideologías malogradas. Hay, todo futuro, que alcanzar mayor realización y apuntar a mejores resultados, hay que trazar tantas variantes como sea posible y en el futuro inmediato tenemos que apuntar a ser mejores en táctica y estratégia para obtener mejores resultados, aún cuando quiebren su potencial partidos que apuntan a ir a más y no resultan. Tiene que haber líderes siempre, pero hay que pensar con más calidad y no siempre escoger el camino más corto y más fácil, habrá en ocasiones que ir más despacio, recoger menos frutos pero con mayor calidad y menos riesgos. Así pienso.

         

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